SOY UN IMPOSTOR

Capítulo 47.

        ¿Salpullido rojo? ¿Alergia?

        A través de las sombras borrosas que se proyectaban en la pared del cristal, Lu Wanghe pudo ver débilmente el enrojecimiento que se extendía por el lado de su cara.

        Se mezclaba con el color escarlata de su mejilla por el calor, y si no te fijabas bien, no podías distinguir el sarpullido.

        No sé cómo Xia Ziying había escondido el polen en el compartimento que le causaría la alergia, pero llevaba tanto tiempo allí que ni siquiera se había dado cuenta.

        El adolescente exhaló lentamente y utilizó sus uñas para pellizcar la carne de sus manos para mantener su mente despierta, y el ligero dolor finalmente despejó un poco su visión.

        Lu Wanghe susurró a Qiu Qingyan: "Hermana Qingyan, voy al lavabo".

        Luego se levantó y se dirigió hacia el exterior del compartimento.

        "Xiao Lu, a dónde vas - por qué tienes la cara tan roja, no estás enfermo, ¿verdad?"

        La luz blanca de la parte superior del compartimento se derramaba con frialdad sobre la alfombra escarlata, y el persistente olor a incienso aún no se había disipado del todo, ahogando la fina fragancia floral, pero surgía con fuerza hacia el adolescente.

        La sensación de picor y hormigueo ya le llegaba a la cara, la respiración de Lu Wanghe era cada vez más pesada y se quedó quieto unos instantes al escuchar la pregunta del director Xu antes de darse cuenta de quién le hablaba.

        "Director Xu ...... Hace demasiado calor en el palco, quiero salir a dar un paseo, ahora vuelvo".

        "Está bien, adelante".

        Lu Wanghe acababa de mover sus pasos y quería abrir su teléfono para enviar un mensaje a Fu Jingmo cuando de repente apareció una figura en su visión ya algo borrosa.

        Estaba tratando de hacer un esfuerzo para distinguir cuando la voz apenada de Xia Ziying, teñida de un poco de petulancia, ya había sonado frente a él.

        "Resulta que yo también siento que hace demasiado calor en la caja, así que por qué no salgo a dar un paseo con Xiao Lu, no te importa, ¿verdad?"

        La mano de Lu Wanghe que colgaba de su costado se apretó con fuerza, sus uñas apretaron la carne de su palma con una fuerza mortal para evitar que su voz sonara tan débil.

        "Sea mi invitado, señorita Xia, ciertamente no me importa."

        Los dos salieron por la puerta de la sala de cajas uno tras otro.

        Cuando acababa de entrar en el hotel, Lu Wanghe había mirado deliberadamente la ubicación del lavabo y la salida de emergencia, y tras salir de la habitación caminó directamente en dirección al lavabo.

        La sensación de opresión en el pecho se había vuelto más y más pronunciada, y la picazón de la erupción roja en su cara estaba causando un débil dolor en sus sienes. Lu Wanghe maldijo en su corazón, contuvo el impulso de levantar la mano para rascarse, controló deliberadamente la velocidad de su paso, mientras fingía mirar su teléfono móvil, y pulsó la llamada de voz con Fu Jingmo.

        "¿Hehe?"

        Lu Wanghe dobló una esquina y vio a Xia Ziying caminando a unos diez pasos detrás de él con sus postizos, supuestamente todavía observando para ver si era realmente alérgico o sólo salía a tomar aire.