Límites {Tokio Hotel}

Capítulo 18: ¿Qué somos?

Capítulo 18: ¿Qué somos?

-Guaf guaf

Ese ladrido hizo hacerme saltar de la cama. ¿Qué hora era? Aún estaba oscuro afuera. Me levanté con mi cuerpo desnudo a buscar mi celular. Bill seguía durmiendo. Puede venir el apocalipsis y este hombre sigue durmiendo, no entiendo como no puede despertarse con Pumba ladrando. Tomé mi celular y recién eran las 4 de la mañana, por Dios, necesito dormir más.

Cuando quiero volver a la cama veo a Pumbi usurpando mi lugar. Bill lo malcría y mucho. Tuve que hacer una maniobra de circo y acostarme de nuevo en la cama, y como soy tan torpe, caí encima de Bill despertándolo del susto.

-QUÉ QUÉ NO QUIERO IR A LA ESCUELA MAMÁ YA TENGO 26 – dijo sobresaltado

-Bill calma, me caí sin querer – le dije mientras me sentaba al lado suyo

-Uffff pensé que eras mi madre – dijo aliviado - ¿Por qué te caíste?

-Pumbi ocupó mi lugar y quería volver a acostarme

-Ah sí, es muy celoso, lo hace siempre

“Lo hace siempre”, no me gusto para nada ese comentario. ¿Estaba queriendo decir que también lo hacía con esa rubia Barbie? Ese comentario me hizo cambiar la expresión. ¿Celos? No sé ni que somos, no tendría que sentir celos.

-Ah… - dije mirando para otro lado

-Estas celosa – me dijo riendo

-¿Qué? No Bill, como crees – le dije tratando de esquivar el tema

-Lo estas

-Bill no tendría por qué sentir celos, no eres mi novio – dije como si nada, pero ese comentario nos dolió a ambos

-Entonces… ¿Qué somos?

-No lo sé, recién nos estamos conociendo…

-Bueno, entonces somos conocidos que quieren conocer aún más y que tienen relaciones sexuales- dijo divertido

-Me gusta ese término

-A mi igual, ¿puedo besarte conocida? –me dijo tomándome una mejilla

-Me encantaría, conocido

Le dije y se acercó a mí y me beso tiernamente los labios. Sus besos eran deliciosos, besaba increíble. Aburrida de la posición en la que estaba, coloqué mi cuerpo desnudo encima de él, y él nos tapó a ambos con la ropa de cama.

-Bill, quisiera continuar pero me estoy muriendo de sueño – le dije bostezando

-Injusticia – me dijo haciendo puchero – tendremos algo pendiente

-Mañana saldaremos la cuenta

-Duerme bien, sueña conmigo

-Tú también – le respondí mientras él me besaba la frente

No tardé nada en quedarme dormida en su pecho.

*Narra Tom*

Ria estaba sentada en el sillón con un bulto en sus brazos. ¿Eso era mi hijo? Me acerco a ella y si, era un bebe de ojos café con un pircing en los labios. ¿Ria le hizo un pircing? Esta mujer está loca.

-Tom, ten al pequeño Tommy, quiere estar con su padre- me dijo Ria y luego desapareció

Así que el pequeño Tommy es mi hijo. No me sorprendía que fuera tan hermoso, y más sabiendo que salió de la auténtica fábrica Tom Kaulitz. De la nada él bebe comenzó a oler mal y se puso a llorar. Miegda, se cagó. No sé dónde me dejó esta mujer los pañales de Tommy. Desesperó, Tommy no se calla y Bill comenzó a cantar Final Day.

-And now we're here again, up on the roof so high, the whole world can just go to hell, for all I care tonight

-Bill cierra la boca – le dije

-I can feel the end is near, and all that's come is me up here, and if our final day has come, let's pretend to carry on

-BILL CIERRA LA MALDITA BOCA

Le grité enojado y sentí un golpe en la cabeza. Me caí de la cama ¿Todo fue un sueño? Voy a matar a Georg, ayer agarró mi celular para “jugar” y me configuró la alarma para las 7 am con esta odiosa canción. Ouch, mi hermosa cabeza, me la di fuerte. Me vengaré.

Volví a la cama, apoyé la cabeza en la almohada para volver a dormir pero no hubo caso. Me desvelé como un hijo de puta. Pensé en llamar a Ria, pero en LA son las 6 am y se enojará conmigo si la despierto.

Y ahí estaba, dando vueltas en la cama, pensando en lo que iba a ser mi vida dentro de estos 9 meses. Me comenzaba a emocionar por el tema del bebe con Ria, ambos comenzamos a salir del estado de shock. Creo que podemos llegar a ser buenos padres.

Prendí la tele y estaban dando las noticias, nada más aburrido. Y encima hablaban en español, peor.

Extraño mi casa. Bueno, mejor dicho, extraño a mi Ria. Las vacaciones no son lo mismo sin ella.

Mi madre me ha invitado a pasar unos días en Berlín con Ria para poder vernos, estaba muy emocionada con el tema de que iba a ser abuela, no me deja de mandar mensajitos preguntando por Ria. Insoportable. A pesar de eso la extraño, y a Ria no le pareció mala idea.

Voy a llamar a la aerolínea, que me den un vuelo para mañana temprano para volver a casa, luego tomaré un avión a Berlín con Ria para ver a mi madre. Sí, eso voy a hacer.