Halfway Out Of The Dark

Capítulo I: Esa misteriosa chica

(Narra Tom)

   Me encuentro en medio del escenario, estamos revisando los detalles fuera y dentro de escena, llegan cajas llenas de materiales: escenografía, vestuario, maquillaje, etc. De repente escucho una voz seguida de una risa, dice mi nombre en tan solo un susurro, es una voz peculiar, ni muy fuerte, ni muy suave, más bien dulce, tierna pero a la vez cargada de dolor, no sé cómo describirla, en un momento está alegre y a otro sufre. Súbitamente todas las luces desaparecen y solo quedan penumbras, observo como un par de ojos violeta me miran, son grandes y muy hermosos, diría que son una mezcla de violeta, púpura y gris, definitivamnemte no son un color común, sino que son una especie de amatistas con vetas grises y su borde es de color gris tenue ¿Quíen tiene nos ojos así? Escucho la voz decirme, suplicarme "¡Ayúdame Tom! Sácame de la oscuridad ¡Sálvame!". En ese instante me despierto de golpe. Todo a sido un sueño, pero se sintió tan real, tengo esa extraña sensación en mi pecho ¿Quién es esta chica? ¿Por qué necesita mi ayuda, que la salve?

   Me percato de que he estado durmiendo en el escritorio de mi despacho, debí dormirme mientras calificaba exámenes, observo mi reloj y me doy cuenta de que ya es tarde, son las 10:13 p.m, me alisto para salir y marcharme a casa, hay pocas personas por los pasillos de la Universidad, solo unos cuantos estudiantes que salieron de los últimos cursos del día, esos que se imparten hasta pasadas las 9:40 de la noche, siempre los he considerado agotadores e inhumanos, esos pobres estudiantes llegan tarde en la noche a preparar trabajos para su siguiente curso o  para su trabajo en la mañana, pero al ser uno de los profesores más jóvenes y nuevos aquí, no tengo mucho "derecho" a expresar mi opinión al respecto; solía impartir clases en colegios o institutos privados, todo con el fin de obtener la experiencia necesaria para conseguir trabajo  en la universidad, además de eso te piden haber realizado investigaciones y trabajos de campo, por suerte para mí y no es por ufanarme, pero soy una especie de genio en lo que hago, adelanté varios años mi carrera y es por eso que antes de mis 30 ya había optenido mi bachillerato, dos maestría y mi doctorado, tenía hechos mi investigación y mi trabajo de campo, eso sin mencionar que llevé una segunda carrera, mi otra pasión: dirección y producción teatral y televisiva, para ese año me ofrecieron trabajo en la universidad y heme aquí después de cuatro años, así que sí, parece que a mis 34 años de edad tengo ya mi vida resuelta, pero la verdad es que aún no logro oprimir esa sensación de vacío que hay en mi interior, esa sensación de eterna soledad, a pesar de estar rodeado de personas que me quieren y a las cuales quiero también, esa necesidad imperiosa de salir de mi burbuja de comodidad, de tomar riesgos, de vivir; esa urgencia de encontrar mi camino fuera de la oscuridad.

   Llego a casa, había olvidado mi celular esta mañana por lo que al revisarlo, observo 11 llamadas perdidas y 7 mensajes, 2 de voz y 5 escritos, asimismo en la contestadora de mi teléfono fijo hay otros 10 mensajes de voz y quién sabe cuantas llamadas. Me pregunto quién habrá estado tan deserperado por contactarme, pero a la vez sé que ya conozco la respuesta: Loraine, lo confirmo al ver que la mayoría de los mensajes en ambos teléfonos son de ella, 10 para ser exactos, tengo 1 de Sarah, 1 de Emma, 1 de mamá, 2 de Luke, uno de mis mejores amigos y mi mano derecha, 1 de Benedict y otro de Michael, estos últimos me llan la atención y me emocionan, al parecer ambos han regresado a la cuidad y quieren que salgamos; por otra parte mamá y mis hermanas me llamaron para avisarme de muestra reunión familiar este sábado, Luke ya consiguió el teatro para muestra siguiente puesta en escena y además dice que requiere mi presencia en la lectura del guión que vamos a hacer, para ver qué dejamos, qué quitamos, y actores usaremos y demás.

   Y Loraine -suspiro cansado solo de pensar para qué me ha estado buscando- efectivamente me ha llamado para lo que creo, en sus múltiples mensajes dice que me extraña, que me necesita intensamente, que por qué no contesto el teléfono, que si la engaño (aunque aveces creo que es al revés), que la he tenido abandonada, después vuelve a decir que muere de deseo por mí, que nos veamos cuanto antes.... En síntesis, quiere sexo (o está urgida de él) y por eso me llama. Hace ocho meses que salimos pero los últimos dos han sido una pesadilla, ella pasó de ser una mujer dulce, divertida, sincera, centrada, a ser una especie de adolescente salvaje y sin escrúpulos adicta al sexo, el alcohol y espero que a ninguna droga, además de que sospecho que tiene una aventura, alguien que se "hace cargo de ella" cuando yo me niego; si se pregunta ¿quién (qué hombre) en su sano juicio rechazaría a una mujer cachonda que se le insinúa? La respuesta es "Tom", siempre he considerado que a las mujeres hay que tratarlas como damas, respetarlas y mimarlas, protegerlas, aunque sé que son perfectamente capaces de hacerlo por ellas mismas (tengo dos hermanas a las que no me atrevería a hacer enfadar amenos de que quisiera terminar con un brazo roto), no merecen ser tratadas como un pedazo de carne; ya bastante mal me parece que haya hombres que busquen minimizarlas hasta ese punto, convertirlas en un juguete sexual, pero que una mujer se haga a sí misma esa ofensa, es deprimente y degradante. Y lamentablemente es lo que Lory ha estado haciendo.

   Entiendo, soy hombre y también tengo mis necesidades, pero si hubiera querido acostarme con una cualquiera, no habría acudido a ella en primer lugar; trato de creer que aún en ella se encuentra aquella mujer que conocí, aquella que se ruborizó cuando le pedí una cita al pensar que yo le hablaba a alguien más. Sin embargo ahora es celosa y dramática en extremo, dice que ya no la quiero y demás, ciertamente cuando una mujer o cualquier persona solo te llama cuando quiere algo de tí, ya no sabes si seguir queriéndola; ella llama cuando quiere sexo, regalos, dinero o que la lleve conmigo a algún evento. Hasta he llegado a poner la canción "Why'd You Only Calle Me When You're High?" de Arctic Monkeys como su tono de llamada. Somos una especie de versión de esa canción en la que es ella quien llama.

   Quizás es masoquismo, pero me insisto a mí mismo que me quede con ella, que no tengo razones suficientes para dejarla, al fin y al cabo ella de verdad me gustaba mucho, pensé que sería la indicada, aunque ya no estoy seguro de nada, estoy muy confundido.

   Cansado me dirijo a mi dormitorio, la noche es fresca aunque sopla un viento frío, por lo que me quedo en boxers y me pongo una camisa para dormir, sigo la rutina: me cepillos los dientes y me acuesto y a los pocos minutos me dejo llevar por el sueño.
 
   Entré a una habitación llena de velas y pétalos de distintas flores, los cuales aún desprendían un leve aroma, era una velada muy romántica por lo que veía ¿Qué hago aquí? Estoy por marcharme cuando el sonido tenue de unos gemidos detuvo mi paso, escuché con atención y los volví a oír, a paso lento pero seguro me acerqué más al lugar del que provenían,  cada vez el sonido se hacía más fuerte, encontré una cama pero lo que  me dejó pasmado fue lo que ocurría sobre ella ¿Por qué estoy viendo esto? ¡Es demasiado íntimo! Era la escena de una pareja teniendo relaciones sexuales, haciendo el amor, me atrevería a decir por la manera en que lo hacían, esa mezcla perfecta de amor, pasión y lujuria desenfrenada podía sentirse en el aire, en cada poro.
  Observaba curioso y fascinado  a la pareja, ella estaba bajo él, él prácticamente la cubría con su cuerpo, ella enrrollaba sus largas piernas en la cintura de él y lo insitaba a ir más profundo en su interior, él mantenía un ritmo en sus penetraciones, lento, candencioso, preciso, como si no quisiera romperla, la adoraba con su cuerpo, se entregaba a ella y ella a él, ella tenía la piel más blanca y perfecta, tersa y suave a la vez, que había visto en su vida, parecía hecha de porcelana, ella ocultaba su rostro en el cuello de su amante y dejaba colgar su salvaje cabello rubio cenizo con puntas en degradado celeste esparsirse libremente por el colchón, le clavaba las uñas en su espalda mientras gemía cada vez más fuerte y le susurraba palabras de amor a su compañero, cuando decidí dejar de analizarla a ella y mirarlo a él me quedé atónito, lo miraba de perfil, pero indudablemente era yo y como si para eliminar dudas se tratase, escuchar a la mujer decir mi nombre al alcanzar el orgasmo, me lo confirmó.

   Me desperté sobresaltado, el sudor cubría mi cuerpo, mi respiración estaba agitada y la presión en mi miembro dejaba en claro lo exitado que me encontraba, miré el reloj y vi que eran las 3:00 a.m, decidí que una dicha fría y mi mano serían de mucha ayuda en este momento.

   Salí de la ducha, satisfecho pero con muchas interrogantes ¿Qué demonios acababa de pasar? ¿Quién era ella? Porque definitivamente no era Loraine, pero más importante aun, esa voz ¿Por qué era la misma voz que había escuchado en mi sueño anterior? Esta vez estaba cargada de deseo, pero sin lugar a dudas era la misma voz que me perseguía en sueños y necesitaba saber urgentemente quién era su dueña.

   ¡Hola! Ya sé que me quedó un poco largo el capítulo, pero me emocioné a la hora de transcribirlo (por si no lo sabían, yo escribo a mano y hasta que lo publico, lo digitalizo), podía darles un cap. corto y uno mediano o uno extenso jeje. Ya saben, comenten, sientanse libres de dar su opinión y voten por favor! Besos, espero que hayan disfrutado el capítulo! :* ;)