AVA BIANCHI
Termino de vestir a gian para volver a casa.
—papi vendra con nosotros..
—lastimosamente sí.
—eso no pensabas a noche. —susurra en mi oido—
—solo fue sexo, que de seguro tuviste con muchas..
—ava. —niega con la cabeza—no existe ningúna otra mujer que pueda ocupar tu lugar.
—años atras no parecía eso..
—¿ya nos vamos mami? Quiero ver mi regalo...
—si ya nos vamos. —lo tomo en mis brazos—
—mami ya soy grande..
—apenas tienes 2 añitos para mi siempre seras mi bebé, el pequeño de mamá. —beso su mejilla—
—te quiero mami. —recuesta su cabeza en mi hombro—
Me derretía el corazon cada vez que me hablaba, doy todo por mis hijos son lo más hermoso que tengo en ests vida, a pesar de que ambos sean una exacta copia de amir, ellos eran lo más valioso de mi vida.
Todavía recuerdo cuando gian nació, fue algo difícil pero logre traerlo al mundo.~recuerdo~
Estaba preparando la lonchera de stella, tenía 9 meses recien cumplidos el embarazo no fue para nada fácil vivía sola en una pequeña casa y me ocupaba de mi hija y en mis tiempos libres me dedicaba a escribir y trabajar.
—mamma se nos hace tarde..
—ya estoy terminando tu lonchera, no me apures no soy flash.
—hoy nos toman las fotos, tengo que llegar temprano.
Cuando iba a responderle sentí un fuerte dolor que me atravesaba todo mi vientre.
—¿mamma te hiciste pipi encima?
—cariño creo que tu hermano quiere nacer.
—¿llamo a la abuela?
—iremos en el auto, yo puedOOOO.
Diablos que dolor más terrible, agradecía a ver tenido a stella cuando estaba inconciente porque juro que nose que haría.
—mami me tiene que tomar las fotos.
—ME IMPORTA MIERDA LAS FOTOS STELLA TU HERMANO NACERA..
Sus ojos se llenaron de lagrimas y empezo a llorar.
—no llores cariño, ayúdame buscando el bolso de tu hermano.
Esta corrio escaleras arriba.
Las contracciones eran fuertes, me agarre de donde pude y camine hasta la cochera.
—aquí estoy mami..
—sube al auto y ponte el cinturon.
—¿estas segura que puedes conducir mami?
—llegaremos al hospital en cuestion de minutos yo puedo.
Respire como pude.
—CARAJO. —mordi mi labio mientras apretaba el acelerador para irnos lo más pronto al hospital—
Yo podía sola no necesitaba ayuda de nadie.
Aunque por dentro rogaba que amir llegase y estuviera a mi lado dandome apoyo diciendome que todo estará bien, pero recuerdo cual fue la razón por la que lo deje.