El sonido del despertador provoca que me desvele de mi profundo sueño, es Lunes así que comienza de nuevo mi tortura en la uni. Me quito el edredón de encima y camino hacia el baño por el frío suelo de mármol, retiro la ropa de mi delgado cuerpo y me meto en la ducha. Veinte minutos después de mi concierto bajo el agua caliente, voy hasta el armario y escojo una falda de cuero junto con un jersey de cuello alto blanco, me pongo mis botas altas negras y salgo de la habitación. Ya sentada en el taburete de la barra de la cocina, veo como el sol alumbra poco a poco las calles de New York.
Preparo un bol de fruta con yogurt para después de clase y me dirijo al metro para ver a mi camarera favorita, ya allí entro con una sonrisa a la cafetería y voy al mostrador, toco el timbre para que ella me atienda como todas las mañanas pero en su lugar sale un chico con un rostro serio y deprimido.
-¡Hola!, ¿que tal?- Le saludo sonriente.
-¿Qué quieres tomar?- Me pregunta encerrado en su amargura.
-Emmm... ¿Sabes dónde está Gloria?
-No me interesa mi vida así que las demás me importan mucho menos- Se apoya en el mostrador queriendo que me largue de una vez mientras que pone una sonrrisilla sarcástica.
-Bueno es que ella me atiende todas las mañanas y nunca ha faltado a un turno suyo, menos cuando se olvidó la receta de la tarta de queso y...- Me corta antes de que pueda seguir hablando.
-¡Está mala!, ¿contenta? ¡¿Me puedes decir de una vez que quieres?! No aguanto más tu irritante voz.
Abro la boca sorprendida por su actitud, me acerco más al mostrador y le respondo.
-Siento mucho preocuparme por una persona señor amargado de la vida, pero no importa. Quédate con tu estúpido café, no lo quiero.
Me doy la vuelta y voy hacia la salida mientras escucho como resopla, mañana volveré para ver si Gloria está bien y el idiota este ya está despedido.
Minutos después llegó a la universidad y al fondo del pasillo puedo observar a mi hermana con el idiota de su novio enrollándose junto a las taquillas, algunos les ignoran pasando por su lado y otros, tanto chicas como chicos, desean ocupar el lugar de Mason y de Elizabeth. Paso junto a ellos para llegar a mi primera clase del día pero antes de que me de cuenta y pueda escapar, Elizabeth me coge del brazo para empezar a interrogarme.-¿Ayer recogiste todo, verdad?- Pregunta apoyada en el pecho de Mason mientras me mira como si fuera inferior a ella.
-Sí, lo hice ¿contenta?
-No sabes cuánto...- Responde con voz calmada.
-Bueno, que os lo paséis bien- Continuó mi camino hacia clase para encontrarme con mi mejor amiga, Kloe.
Así es, Kloe con k, una de las chicas más sociables y atrevidas que conoceréis en vuestra vida, todo lo contrario a mi. La gente nos suele llamar el dúo dinamita, el dúo "k", la estrecha y la atrevida... En fin, demasiados motes, pero a mi me gusta llamarnos "k&k", simple pero precioso.
Detrás de ese puesto de popularidad que llevan mi hermana y Mason estamos nosotras, aunque a mi me conocen más como la pequeña Mcklein... Como siempre la sombra de Elizabeth, en cambio Kloe es hija única por lo que brilla por si sola, es normal si tenemos en cuenta sus preciosos ojos verdes color esmeralda y sus labios carnosos recubiertos de un perfecto brillo que dan ganas de besarlos... Eso es lo que dicen todos en la uni, y es normal porque Kloe es Kloe y yo solo "la pequeña Mcklein".-Tierra llamando a k, ¿me oyes?
-¿Eh?
-Te has quedado pillada- Dice riéndose levemente- ¿En qué pensabas...? ¿O en quién?- Insinúa moviendo las cejas de arriba a abajo.
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Apuestas, secretos y asesinatos
Mystery / ThrillerKatherine Mcklein, una jóven que tiene toda su vida resuelta. La casa perfecta, las notas perfectas, los amigos perfectos y unos padres perfectos, ¿o no tan perfectos? Ella cree que todo lo que hay a su alrededor no posee ningún solo error, pero ¿qu...