Miro a Marcos a los ojos y Luck viene corriendo. Marcos mira a Luck y se le queda la cara descompuesta y empieza a huir. Corremos detrás de él y Luck le tira una piedra con la que se cae al suelo.
- ¿Y mi hermana?
-¿Qué dices?
- Luck te vio con la furgoneta en la que metieron a mi hermana.
- Es verdad, te ví.
- Yo no la secuestré, solo seguí ordenes.
-¿Qué ordenes? - preguntó Luck
- No lo puedo contar.
- ¿A sí? - dije.
Cogí unas cuerdas y le até las piernas y los brazos, lo llevamos a mi sótano y empezó la acción.
- ¿Qué ordenes?
- Eres una sicópata, suéltame.
- Luck, ¿Tú crees qué soy una sicópata?
- No, eres vengativa.
- Ves...
- Di, ¿Qué ordenes? - dijo Luck.
- No lo diré.
- A sí... - cogí un cubo de agua fría y se lo tiré por la cabeza.
- ¿Quién te manda? - dijo Luck.
- No lo diré.
- Luck trae la gasolina y el mechero...
- No, no no... vale, lo diré.
- Así me gusta- dije yo.
- Vale... a mi me manadan ordenes desde un número privado... me ingresan cinco mil dolares por hacer trabajillos... y no se más.
- Dame tú teléfono, Marcos, ya puedes irte- dije seria.
- No sin mi móvil.
- ¿Es qué no escuchas? Fuera... - Exclamó Luck.
Marcos salió del sótano con la cara todavía más descopuesta que al llegar, y yo igual al pensar que sou una sicópata por maltratarle, pero a la misma vez satisfecha por haber conseguido algo de información para conseguir volver a ver a mi hermana.
Revise todas las llamadas y nada, todoe era demasiado discreto, mensajes desde torres de los seis continentes y llamadas siempre por privado, era inútil seguir, no encontraría nada de todas formas...
Me acosté a dormir, agotada por tanto investigar y me despertó un ruido en el salón.
Me levanté, fui hacia el salón para ver de donde venía el ruido y ví una sombra detrás de mi, me di la vuelta y era Marcos.
- ¿Qué haces aquí?
- Solucionar un problemilla
- ¿En mi casa?
- Si...
- Fuera de aquí o llamo a mi padre.
- Tengo respuestas sobre los secuestradores y quería abisarte.
- ¿Qué respuestas?
- Se lo que querían realmente.
- ¿Qué querian?
- Mejor dicho a quién.
- No me tengas en ascuas.
- Tú eres el objetivo, y me han dicho que te secuestre.
- ¿QUÉ?
- Pero no lo haré...
- Ya, se que no lo harás, pero ¿por qué yo soy el objetivo? Yo creí que era por dinero, pero entonces daría igual quien fuera la secuestrada.
- Ahora debes protegerte.
- No, no lo haré, buscaré a mi hermana igual que estoy haciendo estos días y no pararé hasta encontrarla.
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Stella
Mystery / ThrillerUna discusión. Un secuestro. Un misterio. Margarett deberá hacer frente a todas las dificultades que se presentan. La dulce y pequeña Stella ha desaparecido. Margarett es la única que puede ayudarle. Pero, ¿qué pasaría si el verdadero objetivo es el...