No estás sola (Lobos #3)

Capítulo 4

Jared

Ella me ha marcado sin saber nada. Su loba se comunica con Gina, pero mi luna no sabe que es una loba aunque su loba trata de explicar.  Johnson se queja porque la loba es una insoportable, según para él, habla mucho y se pasa quejando porque su humana no sabe nada.

Por otro lado, solo tengo que tener mucha paciencia porque los lobos me van a sacar de quicio igual que mi pequeña luna ya que tengo que enseñarle de todo de este mundo.

— Te protegeré cariño. No estarás más sola, siempre estaré contigo — susurro en su oído mientras camino hasta su pequeña cabaña que mandé arreglar hace un rato.

Minutos más tarde...

La cabaña está cerca, mi mujer todavía no despierta, se que está cansada, no quiero dejarla sola pero me necesitan en la mansión así que iré ahí y mañana vendré para hablar con ella.  Llego a la pequeña cabaña.

Mi luna no quiero dejarte aquí, este lugar no es para tí.

Dejo a Gina en su cama, ella se aferra a mi para no dejarme ir. Logro salir de agarre y camino rápido a la salida de su cabaña.

Mi lobo se queja pero a la vez entiende la situación porque es difícil ahora separarme de ella pero tengo que irme para no forzar nuestro vínculo.

Segundos más tarde...

Entro a la casa del alpha agotado, tengo que admitir de que hoy fue un día tremendo, pero todo valió la pena porque pude salir y salvar a mi luna.

— Buenas noches alpha — saluda la ama de llaves de la mansión.

— Buenas noches ¿Hay alguna noticia? — pregunto con curiosidad y asiente varias veces.

— La Omega que hizo daño a su luna está abajo como lo ordenó — explica y asiento varias veces en silencio.

— Mañana me encargaré de ella. Veré qué sentencia que le doy por hacerle eso a la luna — gruño recordando todo lo que pasó. Siento  a mi ama de llaves nerviosa se que quiere preguntarme algo así que hago una seña para que lo haga.

— ¿Qué hará ahora que nuestra luna que es una loba? ¿Ella vendrá a vivir con nosotros? — pregunta con mucho interés.

— No tengo idea de que hacer. Ella es una cachorra, no sabe que es una loba porque no me dió tiempo de explicarle nada porque me marcó — hablo frustrado.

— ¿Le ha marcado? — cuestiona asombrada y asiento varias veces empiezo a contarle todo lo ocurrido, solo me mira con asombro.

— Se nota que es una luna muy fuerte. Solo tenle paciencia y haga que confíe en usted, verá que enseguida ella entenderá todo lo que está sucediendo — explica con una sonrisa. Hace una pequeña reverencia para retirarse y asiento.

— Todo esto será muy difícil — murmuro para mí.

— Ni que lo digas, esta loca me tiene harta, es muy mandona y argel — dice mi lobo cansado, cierro el link  porque no quiero escuchar las quejas de Johnson ahora. Camino hasta mi habitación pensativo ya que no conozco a mi luna realmente, trato de no pensar en lo que me dijo Johnson pero es difícil.

¿Será que mi luna es así como su loba? No lo creo se nota que es lo contrario a ella.

Sacudo mi cabeza cuando me doy cuenta de que estoy frente a mi puerta, entro en mi pieza y cierro. Me saco toda mi ropa u me pongo no pijama para acostarme en la cama. Cierro mis ojos para descansar y solo pensar en mi pequeña luna.

Buenas noches, mi Gina. Nos vemos mañana.

Gina

En la mañana...

Los pájaros cantan y el sol me molesta en la cara, abro mis ojos poco a poco, por la molestia de la luz, miro que la puerta de mi casa está abierta, entro en terror al observar que el hombre desconocido de ayer está  cocinando.

¿Que hace aquí? ¿Cómo entró a mi casa?

— Veo que despertaste, Gina. Te hice el desayuno — dice con una sonrisa.

— ¿Cómo sabes mi nombre? — gruño y me pongo a la defensiva.

— Sé el nombre de todos aquí, este es mi puedo cariño — explica con una sonrisa.

— ¿Quién eres? — cuestiono.

— Soy el alpha Jared Thompson, soy un hombrelobo. Estás en la manada Luna Brillante y tú eres mi luna— contesta sin dejar ningún detalle.

Este hombre está completamente loco.

— No me jodas con eso. Si te quieres hacer el simpático, hazlo a otra persona pero a mí no   — hablo enojada y con los brazos cruzados.

— Pero, si es la verdad — se queja como un niño pequeño.

— Te explicaré en forma detallada, Gina. Necesito que me escuches y no me interumpas. Deja las preguntas para después ¿De acuerdo? — dice el hombre con un tono serio y asiento varias veces.

— Pero antes tienes que comer. Estás muy delgada — gruñe enojado

— No me gruñas, no tienes derecho a hacerlo y si quiere comer mi humana, lo hará. Déjala en paz — hablo enojada es como si otra persona lo regañara, baja su cabeza como un niño pequeño.

— Lo siento, luna — se disculpa, asiento confundida por mi hablar y mi acción

— Necesito saber lo que está pasando — murmuro para mí.

— Después de que desayunes todo, te explico todo, luna — dice el hombre desconocido.

Chantajista.

Me observa mal pero no me dice nada.

¿Que tan importante es lo que me tiene que contar? Espero que no sea nada que tome a mal.

***

Continuará...