Alma, sí, ay alma, como diría Buena Fe en tono de bolero. Alma qué secretos mantienes cautivos en tu interior, ajenos a la luz que llega a esos lugares inexplorados.
Alma, más allá del tacto, de los sonidos o banalidades, palpables. A una mirada de distancia que conspira en desnudarnos, de la piel, de las verdades.
Intercambio de almas, más allá de las palabras, sinónimo de sentimientos en caricias a una distancia segura, tras sonrisas, pero que augura felicidad más allá de las galaxias, del tiempo y las nebulosas.
Alma, corres, vuelas y eres, siempre eres, alma. Florece más allá de las espinas e ilumina a quien sabe ver, lo esencial es (y será siempre) invisible a los ojos.
Hoy, aquí en este lugar hagamos un pacto de almas. Viajemos a ese sitio donde los silencios son cómodos y no hacen ruidos innecesarios. Pon tu mano, más allá de esta coraza que se alza entre mi versión palpable y el mundo, más allá de esta galaxia o de mi traje de astronauta.
Seamos alma, ajenos al tiempo, de lo terrenal, de lo ateo, de la realidad.
Alma.
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Reflexiones de un astronauta sin luna
PoetryUna vez más las emociones atacan desde el alma, encontrando como única salida esta compilación de textos desordenados, retazos acumulados al pie de un grito. Palabras que fluyen desde el interior, tal vez sin sentido, sin orden cronológico, con erro...