Sailors y Saints: las diosas de la guerra

El lugar impensado

Santuario, Grecia

Después que los caballeros se colocaran sus armaduras, excepto por uno, se reunieron con las uniformadas Sailors, mientras se van colocando dentro del circulo que han formado las Sailors al tomarse de las manos, Kiki se acerca a ellos.

-Lamento no tener lista tu armadura Ikki.

-Kiki, ambos sabemos que aún hay algo que debo completar.

Mientras los dos caballeros seguían charlando, Saori se acerca hasta ellos para desearles un buen viaje, esperando que por fin tengan un rumbo para ayudar a Seiya. La mayoría de caballeros se encontraban cerca para observar cómo es que partían sus compañeros y el resto de Sailors vigilaban, solo una de ellas centraba su mirada hacia otro lugar. Unos símbolos aparecen en las frentes de las Sailors con un pequeño brillo que termina creciendo y cegando brevemente a los presentes, sin dejar rastro del grupo de jóvenes.

Quien sorprende a una distraída Saori por detrás es Sailor Saturno, la joven diosa se sobresalta ante la sombría Sailor.

-Atena ¿a dónde se han llevado el cuerpo de Pegaso? - A pesar del susto que le provoco, Saori siente que esa pregunta no solo se debe a una simple curiosidad. Saori toma un respiro para estar más tranquila para responder ante la interrogante de la joven Sailor.

-Ahora lo está cuidando Seika, en uno de nuestros jardines ¿deseas verlos ahora? -. Saori le pide que le acompañe hacia la dirección que recién le acaba de indicar.

-Solo deseo seguir observando el estado del semidiós-. La joven Sailor empieza a caminar hasta alcanzar a Saori.

Una preocupación llega a Kiki al escuchar tal petición de una de las Sailors que ha podido notar que deja inquietas al resto de Sailors con su presencia. Solo puede seguir escuchando sus pasos acompañados con los de Saori mientras se alejan del resto.

Al llegar a uno de los jardines cercanos al santuario se encuentran una joven castaña de cabello rizado, Seika, junto al joven en silla de ruedas, Seiya, mientras ella le arregla una manta sobre él. Al terminar, Seika levanta su mirada para notar como se acercan dos jovencitas.

-Me gustaría presentarlas, ella es Hotaru Tomoe, Sailor Saturno. Y ella es la hermana mayor de Seiya, su nombre es Seika.

-Es un gusto conocer a otra Sailor scout, gracias por ayudarnos-. Seika muestra su agradecimiento con una reverencia hacia la joven Sailor.

-No debes agradecerme. Me gustaría pedirte que me dejaras a solas con él-. Seika mira a Saori quien inclina su cabeza en señal de pedirle hacer lo que dice.

Mirando a su alrededor, estando rodeados de un paisaje verde, y acercándose hasta tocar el hombro de Seiya mientras lo observa con detalle, la jovencita estaba pensativa en una sola cosa cuando lo vio.

"A pesar del tiempo nunca cambias, aunque te permita marcharte, siempre nos encontraremos ¿no es así, Rodorio? Tú fuiste el primero en estar conmigo, ahora puedo estar segura de llamarte mi amigo."

Fondo submarino

El reflejo de los rayos del sol y una fresca brisa provoca que un joven abra sus ojos, observando un azul y brillante cielo que nunca había visto, un cielo que trata de recordar desde cuando ha existido uno tan azulado, esa duda lo hace observar su entorno que luce de un mismo intenso color, es como si estuviera rodeado por el mar.

- ¿En dónde... en dónde estoy? - murmura Darién mientras se sujeta la cabeza ante el dolor que siente, recordando del porque está en ese lugar, solo se le vienen imágenes del barco de Julián Solo pero no hay nadie a su alrededor, eso lo tranquiliza un poco al saber que nadie puede estar en peligro, una sensación que es temporal al escuchar unos pasos acercándose.