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Después de las vacaciones en la cabaña con los chicos y pasarla súper bien, llegó el momento de separarnos aunque yo estaba con Marco pero ellos estaban en otro lugar; iban a la misma universidad pero estaban dentro de la residencia de ella misma, ya que con Marco alquilamos un departamento cerca de la universidad porque nosotros íbamos a vivir juntos.

Las vacaciones fueron estupendas, nos metimos en la piscina, nos emborrachamos hasta vomitar todo, hubo peleas entre parejas por las confecciones de yo nunca nunca y muchas cosas más pero nunca fue aburrido fue unas de las mejores vacaciones que tuve en años.

Ahora mismo estábamos en el departamento ya instalados con Marco, estába acomodando la comida que habíamos comprado en el supermercado.

Por cierto papá antes de venir para acá me dio bastante plata para que podamos vivir, yo no la quería porque quería conseguir un trabajo estable mientras que estudiaba. Pero al final y al cabo la tuve que aceptar aunque iba a trabajar igual ya que no quería vivir por la plata de mí papá, parecía una mantenida aunque no lo era.

-¡Nena!

-¿Que?- fui hacía la habitación

-¿De que lados dormís?¿Izquierda o derecha?- señalo. ¿Encerio me llamaba para eso? No lo puedo creer

-Derecha- el lado del armario, claro que sí

-Esta bien- se tiro en su lugar marcando territorio

Me reí por lo bajo y volví al comedor ya que estaba acomodando las cosas para pasado mañana,si, hoy habíamos llegado y ya pasado mañana tendríamos que ir ¿Podríamos a ver venido un día después? Si, pero decidimos que mañana queremos explorar este gran lugar. Además como había dicho quiero conseguir trabajo ah y Marco también, ya que no quiere que trabajé yo sola.

Después de terminar de ordenar guardé todo en la mochila, fui con Marco quien estaba tirado en la cama con el celular cuando noto mí presencia sonrió dejando su celular de lado y me señalo la cama para que vaya con el, me acuesto a su lado para apoyar mí cabeza en su pecho.

-¿Que querés comer?- me preguntó agarrando el celular otra vez.

-Ensalada- contesté elevando los hombros

-¿Otra vez?- me miró de reojo - tenés que comer algo de grasa

-Si- me senté para mirarlo - come vos grasa, yo no quiero engordar querido

-Sos perfecta con cualquier cosa y de la manera que seas- me dijo sincero y sonriendo con sinceridad

-Gracias- me sonroje, si todavía me seguía sonrojandome por comentarios así.

Fui al baño con ropa en la mano para bañarme aunque el ya me conocía mí cuerpo, pero me daba vergüenza salir en toalla a la habitación cuando estaba el, abrí el grifo y el agua salió caliente - que fue ideal para mí -, al rato ya me estaba vistiendo con una remera de el. Salí de ahí para ir directo a la cocina que ahí estaba Marco, mirando la televisión.

-Te queda mejor que a mí- me observo de arriba a bajo, con una sonrisa perversa

-Si me queda perfecto- le seguí el juego -¿Ya pediste la comida?

-Si ya estará por...- sonó el timbre- llegó - sonrió antes de levantarse de dónde estaba

Se fue para ir a buscar la comida a la puerta, mientras yo me sentaba en el sofá para cambiar la película sangrienta que estaba viendo, ni loca miraba una película así mientras que comíamos, entro al salón con la comida en la mano pero yo no veía mí ensalada.

-¿Mi ensalada?- lo mire confusa

Yo quiero mí ensalada.

-No la pedí ya que vas a comer pizza- dijo sentándose al lado mío

Siempre a tu lado  [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora