Y así fue como el chico y su padre se pusieron de camino, obviamente con armas a la mano, seguridad ante cualquier cosa; estos salieron del rancho en donde vivían y se dirigieron a la calle más cercana para no perderse entre el bosque, esta calle era "El Manzano" toda la maldita calle estaba rodeada por bosque... de igual manera para la orientación del padre era prácticamente imposible perderse.
Durante varios minutos hubo un frio, incomodo y serio silencio de parte del padre e hijo... hasta que
- Oye pa ¿Cómo conociste a mamá?
Dijo el chico rompiendo aquella cadena de silencio, a lo que el padre respondió.
- Pues... yo estaba escondiéndome en el establo, cuando tu madre iba a limpiarlo pensó que le haría daño...
Dijo el padre de forma apagada, aun así, tenía una sonrisa en sus labios reviviendo aquellos recuerdos y aun sintiendo la emoción de vivir aquel momento, el chico simplemente lo observo y enseño una sonrisa entre sus labios, estaba contento de verlo tan animado, además sabia el otro tramo de la historia.
- Entonces llegó el abuelo y casi te manda a conocer a tu creador ¿no? Jeje
Dijo soltando una carcajada después, el padre lo miro medio serio y luego salto una carcajada con el hijo para reírse ambos de forma algo descontrolada, uno imaginando lo gracioso que tuvo que ser y otro recordándolo lo gracioso que fue.
Luego de algunos minutos las risas cesaron lentamente... el padre vio al chico y aun con una sonrisa entre los labios le dirigió la palabra.
- ¿y tú? ¿Cuándo harás enojar a tu madre con una mujer?
El chico volteo la cabeza con algo de desagrado, jamás lo había pensado y la verdad no le gustaba pensar en eso, simplemente se relajó respirando hondo el aire de aquel ambiente radio activo, cerro los ojos y volteo la cabeza al frente, se le notaba totalmente despreocupado.
- Ayy pa... la neta eso a mí no me gusta, prefiero ser un...¡EXPLORADOR! Y un caza recompensas.
El padre lo vio medio molesto por decir tal inmadures, soltó un leve quejido y dirigió la mirada al camino, aún era joven, tenía tiempo para cambiar su destino...
La calle terminaría en un cruce, tenían que llegar a una pequeña ciudad, un pueblucho llamado "Honey" así que tomaron la ruta que fuera directo a la "Ruta 106" y seguir su camino.
Durante el camino el padre del chico le platico sobre las calles, rutas caminos e incluso, sobre comida... de ahí llego el tema ¿Qué iban a comer ellos y su familia? Tenían un rancho, pero aun así era pequeño y con una cantidad limitada de animales, tenían que administrar bien machos y hembras antes de que el proceso de selección natural lo hiciera por ellos; y como moscas al estiércol escucharon una manada algo pequeña y retorcida de ratas topo salvajes, los hombres se callaron por un momento y con armas en sus manos acecharon a sus presas.
A la cercanía de estas el padre apunto a una, el hijo a otra y contaron de forma regresiva empezando por el 3...2
- ¡1!
Gritaron ambos y dispararon matando de un solo tiro a sus presas, el resto del grupo huyo antes de aceptar su destino al igual que sus compañeras, los chicos se dirigieron a su próxima comida para montarla al igual que a su bestia campeona a su brahman de carga.
Con una preocupación menos siguieron su camino con un silencio constante, el cual era roto por algún chiste, comentario, platica o incluso la letra de una canción hasta que por fin llegaron a lo más cercano que tenían a una ciudad..."Honey" el pueblucho, llegando en una entrada triunfal y suspensiva ante las calles aparentemente solas de aquel pueblo, listos para la semigran pelea.
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DESTRUYEME.
Ficção Científica¿Saben?...hace tiempo que quería escribir esto, pero...no lo sé, tenía simplemente miedo, muuucho miedo, pero como sea, aquí estoy aun con miedo e intentando no cagarme encima mientras escribo y cuando publique esto próximamente...creo que será dema...