⌈Hᴀᴘᴘɪᴇʀ⌋ •KookTae•

⇢𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐²⁴

－Jungkook, ¿podemos hablar?…

Intensifico sus propios pasos tratando de alcanzar a su mejor amigo por los pasillos del área de arte musicales, pero este parecía no querer responderle una vez más.

－¡Hey!, ¡Jungkook!－ incluso intento subir la voz, pero el pelimorado ni se inmutaba en darse la vuelta o dirigirle la mirada incluso.

Era el segundo día que su mejor amigo lo ignoraba olímpicamente, ¿la razón?, obviamente podía ser borracho, pero aun así podía recordar todo, pues Jungkook estaba enojadísimo cuando se entero de que Taehyung había tenido un encuentro con Hyunjin, y que el primer mencionado nunca le haya dicho nada sobre eso.

Sabia que estaba actuando infantil, pero le hubiese gustado haber sido notificado, es más, Hyunjin no merecía ni siquiera hablar con su mejor amigo, ¿por qué Taehyung permitió que eso pasara?, ¿planeaban volver?, ¿serán amigos?, ¿por eso actuaba de esa forma con Félix en la peluquería?, ¿el aun quería a su ex pareja?.

Bomba de preguntas y con ellas el simple rechazo hacia el acanelado que aun lo perseguía.

También son preguntas que por el momento no tendrán respuestas, ya que el menor se rehusaba a escuchar la explicación de su traicionero amigo, porque ahora eso es Taehyung para el infantil Jungkook, un A-M-I-G-O T-R-A-I-C-I-O-N-E-R-O.

Obviamente los mayores también se habían sorprendido al saber la pequeña charla que tuvo Taehyung con Hyunjin, pero a diferencia de Jungkook, quien se fue enojadísimo ese día, escucharon a su amigo aclarando como había sido dicho encuentro no planeado y menos deseado.

－Jodida mierda－ insulto entre dientes, frustrado de seguir siendo ignorado.

La ultima vez que Jungkook se enojo de esa forma fue cuando había perdonado a Hyunjin por primera vez hace años atrás, más no tenia ganas de pasar por lo mismo otra vez.

Estar "peleado" o ser ignorado de tal forma, era una daga al corazón de Taehyung, no toleraba que su presencia fuera esquivada, menos que no le dirigiera la palabra, encima ni hablar de los muchos mimos que se estuvieron dando últimamente, anhelando con un sinfín sus besos y caricias, que sabia que no iba a recibir aunque lo rogara.

Y tan solo paso un día completo sin la atención del menor, con este van dos y ya sentía que se moría.

Se quedo parado en el medio del pasillo viendo, como la fuerte figura enojada del menor, se alejaba de su alcance, con clara muestras de no querer ser seguido por el, por su mejor amigo.

Taehyung se estaba hartando, no solo se le agotaba la paciencia, sino que eso aumentaba su enojo, por lo que si tendría que pelear o llorar gritando con Jungkook en medio del pasillo, lo haría, más si este se resiste en escucharlo.

－Taehyung, ¿Qué te trae por aquí?－ la voz de Yoongi opaco un poco sus pensamientos, del como encerrar al menor en el cuarto del conserje, para prestarle absoluta atención a su amigo, quien lo abrazo por los hombros.

－Yoongi Hyung, ¿sabe cuantas clases le falta a Jungkook para retirarse a la casa?－ pregunto en cambio, su tono de seriedad alarmo un poco al nombrado, quien miro al frente por mera coincidencia, notando a el pelimorado alejarse.

－Nos queda solo una－ le respondió viendo como este asentía －¿todavía te sigue haciendo la ley de hielo?…

－Ni una puta mierda, Hyung－ insulto el castaño, estaba muy colérico －no me mira, no me habla, me esquiva como si hubiera maltratado a un jodido gatito, dime… ¿Qué puedo hacer?－ hablo cansado, la verdad no le gustaba para nada la situación que le estaba haciendo vivir su mejor amigo.