XV

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Cielo mío...

El amor torna tu nombre junto a las olas más enormes,
los oceanos, las amapolas, magnolias,
con los cielos más estrellados e infinitos,
con las orquídeas más amarillas,
con las nubes más hermosas,
con todos los cirros y lunas.

Ah, el amor.
Tu cara bella, tus ojos fijos, tus blancas manos.
Déjame ser volando tu cielo de cristal que miras y lloras,
y ser nadando el mar al que le grito tu dorada sombra.

El amor huele a las corolas de un manantial
y a las lisas piedras con el golpe de las olas.
Huele al aire de tu viento
que respiro y anhelo,
huele a tu perfume que tanto me embriaga y huelo.

El amor tiene un nombre,
y que no te diga que es el tuyo.

Y que te grite a llantos sordos
que ni te quiero, ni te amo,
que te adoro y que te cielo..:

Así, con todos los tonos y colores,
así, despejado y en tormenta,
así, infinito con y sin estrellas.

El amor se siente como
tus tiernos dedos junto a los míos,
enlazados, cálidos, livianos.
Se siente como mariposas,
verdes prados, blancos cúmulos, rojos guacamayos.

Podré escribirte poemas que eludan a la distancia, que digan como:
Tu voz al otro lado de la pantalla y yo al otro lado de la galaxia.
Escribir versos de tus ojos fijos o de ti con nombres de flores o tonos del cielo.

Escribir de mi odio y querer.
Ya tu sabes como funciona esto:
¡Cómo odio amar, cómo te amo!
No sé cómo, ni cuando, ni porque...
sólo sé que te amo.

Pero ningún adjetivo, verbo o artículo poético describirá enserio cuanto te amo.
Ni cien poemas del cómo me siento cuando te veo.

El amor se ve como la caída del crepúsculo al alba,
entre tonalidades naranjas, amarillas, azules y moradas.
Se ve el amor como jazmines y girasoles en el blanco edén.

Se ve como mis ojos a ti te ven.

Ya sin más el amor huele a la fragancia
de los lirios y al violeta jardín.
El amor huele a ti.

XVIWhere stories live. Discover now