Huída

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"Vamos Ryoma" Se escuchaba entre la multitud, los ánimos eran buenos, el partido estaba empatado, y se le notaba distraído, además aún no ultilizaba sus técnicas especiales, podría ganar el partido con facilidad, pero aún no lo hacia... Algo pasaba por su mente pero nadie en el público podía saberlo... O bueno, casi nadie.
Mientras Ryoma caminaba a la banca por el descanso, en las gradas Sakuno y Yuki conversaban aprovechando el tiempo fuera.

YUKI- Qué gusto me da haber venido, Sakuno, toda la gente tiene mucha energía - Dijo con mucho entusiasmo.

SAKUNO- Sí, siempre es divertido, me da gusto que estés aquí, pues usualmente no te toca ser espectadora - Sonrió.

YUKI- Así es, pero también sé apreciar un partido.... y debo decirte que tu novio sabe dar un espectáculo, aunque parece distraído, pero no me mal entiendas no lo hace nada mal, y es demasiado emocionante verlo jugar, aunque algo me llama la atención... parece cómo... cómo si estuviera cortejando a alguien... - Lo dijo mientras miraba al chico secarse el rostro.

SAKUNO- ¡¿EEEHHH?! N-NO Ryoma... No... Es mi novio, no sé qué dices - Sus mejillas explotaban en ardor y tuvo que tapar su rostro para que nadie pudiera notar el rojo de su cara.

YUKI- Mmmm... Con que no lo son - Miró rápidamente al chico - Sé que en el pasado habían existido rumores, que no fueron verdad, pero ahora... quiero saber entonces ¿Qué clase de relación tienen? - Regresó a Sakuno.

SAKUNO- ¿Relación? - Continuaba roja su cara - El sólo es mi compañero de salón, y me ha asesorado de vez en cuando... Pero nada más. - Dijo con su mirada hacia abajo, para evitar la pena.

YUKI- Qué extraño... - cruzó los brazos - Digo si sólo son compañeros de escuela... ¿Podrías explicarme por qué te mira así? - Solo arqueó un poco su ceja con genuina duda.

SAKUNO- ¿Cómo.... ? - Yuki hizo una seña para que mirara al chico, y así lo hizo. - ¿Eh? - sintió que su corazón se detuvo un poco, Ryoma la miraba fijamente, sereno e inmutable, mientras sostenía la toalla en su mejilla para secar su sudor, ella devolvió la mirada con impresión, estaba nerviosa, pero no podía apartar la vista, por un momento todo parecía estar en silencio, sólo existian ambos, ella mantenía sus ojos en los ojos del chico, sin emitir palabra, pero todo su cuerpo temblaba al no saber porqué él lo hacía, y él la repasaba entera aunque parecía sólo estar posado en su rostro.
Sabía que el motivo de su distracción era la chica, que necesitaba mirarla para poder estar tranquilo, algo dentro de él se inquietaba cada vez que no tenía contacto con ella, pero debía terminar el partido, así que utilizó su descanso para recargar toda la batería, y no le quitó los ojos de encima en ningún momento.
Después de tan largo contacto, algo dentro de ese rato se volvió erótico, no era un día caluroso y Ryoma apenas si se movía en el partido por estar pensativo, pero ambos sentían su cuerpo hirviendo, ella con las manos encogidas en su pecho y su respiración casi imperceptible, él apretando un poco su mandíbula y una calma impresionante que no parecía digna de él durante un partido pues siempre estaba muy activo. Necesitaban liberar esa energía, pero no podían acercarse uno al otro por las circunstancias en las que se encontraban.

- ¡Echizen! - Gritó su senpai, sacándolo del sueño que estaba viviendo con la castaña, sin mucha sorpresa sólo cerró los ojos para beber de su jugo, y escuchar el resto del reclamo - Estás muy extraño hoy, era para que hubieras terminado desde hace mucho ¿Qué te pasa, no te sientes bien?

RYOMA- Momo sempai... De hecho todo lo contrario, creo que tengo demasiada energía ahora. - Una sonrisa pícara y arrogante se dibujaba en su rostro, era claro que ese momento con la chica había sido suficiente para solventar sus dudas y regresar su cabeza al juego.

MOMOSHIRO- ¿Ah? Sí que estás raro Echizen... Pero si eso dices y te sientes mejor, termina el partido pronto. - Dijo cruzando los brazos en confusión.

Amor y Odio (Ryosaku) 🧢🌸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora