I couldn't want you anymore (l&h! omegaverse!)

❁. 16

—Hola Hazz... yo me preguntaba si estabas por llegar ¿Sabes? Te he estado esperando por mucho tiempo y estoy preocupado por ti. —dejo que la tercera nota de voz se deslizara por el buzón de mensajes del teléfono no contestado.

Había llamado a Harry hace aproximadamente dos horas diciéndole que su familia había llegado por sorpresa y preguntándole si esta bien que se quedaran en su habitación, Harry había accedido diciéndole que igualmente ya no dormía en ella de todas formas.

También le menciono que estaría esperándolo para cenar y presentarlo a su familia como su relación, ya que no tenían algo establecido. El alfa estuvo de acuerdo y prometió que llegaría en unos minutos. Harry claramente no había llegado y Louis decidido cenar solo con su familia antes de que se hiciera demasiado tarde.

La preocupación había tomado cada célula del cuerpo del omega, su lobo por dentro estaba sollozando incontrolablemente y a Louis estaba a punto de escapársele algunas lágrimas.

Caminaba por la cocina de un lado a otro con la atenta mirada de su madre desde el mesón donde desayunaba, la taza de té temblaba en sus dedos por la ansiedad incontrolable y no había podido ni beber un sorbo de esta.

—Cachorro, ambos sabemos que está bien, te prometo que supieras que algo está mal si así fuera. Al fin y al cabo, son destinados ¿verdad? —preguntó la omega con voz amorosa.

Louis asintió, sintiendo el revoloteo en su estómago por pensar en su alfa como su alma gemela, era magnifico.

—Pero mi omega está llorando, mami. No sé si eso sea buena señal —dijo Louis dirigiéndose hacia su madre y sollozando en su hombro después de dejar la taza en la mesa.

—No te preocupes, mi niño. Tu alfa está bien ya verás. —arrullo Jay al omega indefenso en sus brazos.

—Encima de todo esto hemos tenido algunos problemas mamá y no sé cómo manejarlo —hablo, sin dejar de sollozar y sintiéndose seguro en los brazos de la mujer.

—Te guiare para que los soluciones, corazón. Lo prometo, pero creo que ahora necesitas hablar con alguien —dijo viendo hacia el ascensor.

Louis volteo a ver y se encontró con un alfa con la mirada gacha jugando con el borde de su camisa abierta color celeste con florecitas blancas, sin porte dominante ni aire de superioridad, solo un cachorro asustado con olor triste.

Su omega no aguanto más y corrió a refugiarse en los brazos que tanto había estado esperando. Lloriqueo en su hombro aferrándose al torso de Harry y dejando que sus saladas lagrimas mojen la perfecta camisa.

Harry también se permitió aferrarse a su cintura y dejar que las lágrimas bajen por sus mejillas, su lobo le decía que había sido todo un irresponsable y Harry solo tenía miedo.

La lucidez pareció volver a Louis y se separó de golpe del cuerpo reconfortante.

—Lunas Harry ¿Qué paso? ¿Dónde estabas? ¿estas bien? —lo lleno de preguntas.

Harry se limitó a bajar la cabeza como un cachorro arrepentido, las lágrimas aun salían de sus ojos triste, como una tormenta de nubes grises que caía.

—¿Te hicieron algo, mi amor? —pregunto Louis colocando sus manos en las mejillas.

Que lo llamara así solo hizo que el sentimiento de dolor se hiciera más grande en Harry, el había tenido a su omega aquí preocupado por el y Louis solo le trataba bonito.

Negó con la cabeza.

—Lo siento mucho, enserio lo siento. Yo... solo no quería venir, no tenía el valor de hacerlo. Lo siento. —sollozo mientras avanzaba queriendo refugiarse de nuevo en los brazos del omega.

—Un momento. —lo paro, antes de que se terminara de acercar —O sea que estas bien —el alfa asintió. —¿Nadie te hizo nada? —el alfa negó. —¿Entonces me tuviste preocupado todo este tiempo por nada? Y ni si quiera te atreviste a contestar el celular. Lunas Harry —dijo mientras pasaba sus manos por su cara, haciendo que los restos de lágrimas desaparezcan completamente. Su aroma se había vuelto mucho más fuerte, ira se reflejaba en él.

—Solo tenía miedo de no ser suficiente para tu familia —admitió en un susurro.

—Por dios Harry ¿Cómo tengo que demostrarlo? —le recriminó —Te he dicho muchas veces cuanto te quiero, siempre te lo recuerdo. Eres suficiente para mí. Aun si mi familia no te hubiese aceptado yo me quería contigo, porque eres mi alma gemela, mi destinado y me has enseñado a quererte tanto. —dijo señalándole con el dedo y al borde de las lágrimas nuevamente.

Un "Lo siento" fue lo único que salió de los labios tristes del alfa, gotas saladas no paraban de salir y parecía que sus piernas fallarían cualquier momento de tanto contener el llanto.

—Quiero estar contigo Harry y he aprendido a demostrártelo, yo no sé si tu sepas hacerlo por mi —dijo antes de darse vuelta y caminar por el pasillo hacia la habitación donde dormían su madre y sus hermanas.

Dejando a un alfa arrepentido y con su lobo recriminando lo cobarde que era, a veces quería que ese estúpido instinto saliera de su cuerpo.

Mientras tanto Louis abrió la puerta y se lanzó a los brazos de su madre que estaba leyendo un libro en su cama mientras las niñas dormían un gran nido que había hecho anteriormente en una esquina de la habitación.

—¿Necesitas hablar cachorro? —Louis asintió —¿Qué te parece salir un rato a caminar? —pregunto, a lo que Louis también asintió.

Salieron de la habitación, pasando por el pasillo donde la puerta de la habitación de Louis estaba cerrada, así que supuso que Harry estaría ahí. Se reconocía un rastro de whisky amargo y menta fuerte cuando pasabas a lado de esta, amargamente triste y fuertemente temerosa.

Su madre iba unos pasos delante de él, y su rostro reflejo confusión cuando la mujer se agacho y recogió algo del suelo frente al elevador. Se acerco a ella y vio en sus manos un cuaderno forrado de cuero.

Él sabía que era ese cuaderno, lo había visto rondando por toda la casa y Harry a veces se sentaba frente de él mientras trabajaba y se ponía a escribir en este, era obvio que no era de trabajo, parecía ser más un objeto personal que no se había atrevido a tocar.

Y antes de que le dijera a su madre que no lo abriera, ya lo había hecho. Una hermosa manuscrita se reflejaba en las páginas.

—Ni el azul del océano más cristalino, o de la mar más turquesa se compara a lo que tus ojos reflejan cada vez que despiertas: brillo, luz y cariño. Eso es todo lo que necesito para quedarme contigo. —pronuncio su madre, dejando a Louis con la piel de gallina y las emociones a flor de piel.

Bajaron por el ascensor y salieron hacia la fría noche de Londres, y Louis estaba seguro de que lloraría en cualquier momento. Sabía que Harry lo amaba, pero estaba asombrado por la cantidad de este. Louis estaba seguro que no escribías poemas sobre cualquier persona que se cruzaba en su vida.

—Cachorro, ambos se aman y lo sabes. No sé a qué teme tu alfa, pero estoy segura de que juntos lidiaran con eso. Si un problema está afectando a una pareja, deben ser ustedes dos contra el problema, no uno en contra del otro. —dijo Jay, con el aliento marcándose por el frio. Louis la veía y estaba seguro de que jamás encontraría a una mujer más hermosa en esta tierra.

Y claro que su madre tenía razón, y Louis tuvo una idea de cómo hacer que Harry lo sepa. 

Avr lloren. 

No me gustan que mis papis se peleen :(

Con todo el amor, Mayte xx.