•~Nuevo héroe por casualidad~• [Rebornplay] CANCELADA

Extra2: Tortillas.

Despertó por los intensos rayos de sol que entraban por el gran ventanal de la sala de estar. Reborn sentía un extraño peso en el cuerpo. De mala gana abrió sus ojos, y, para su sorpresa, tenía a Auron recostado en su pecho, durmiendo.

Se puso nervioso. ¿En qué momento se habían quedado dormidos? Y mejor aún, ¡¿Por qué Auron estaba acurrucado en su cuerpo?!

Después de reflexionar un poco lo que haría, con cuidado, colocó su mano sobre la cabeza del contrario. Acarició un poco su sedoso cabello, pasando sus dedos entre las ebras castañas de este. Nunca había dormido con alguien así, se sentía algo lindo.

Aún así, no quería moverse y despertar al menor.

No sabía cómo levantarse. Trató de ser lo más cuidadoso posible, puso un pie en el suelo, pasando sus manos por debajo de la espalda y las rodillas del contrario, logrando dejar al chico recostado en el sofá.

Se estiró un poco y repasó lo que acaba de pasar, sintiendo como sus mejillas tomaban un intenso color rojizo. ¿Y si las chicas los habían visto? ¿Cómo se los explicaría? O peor, ¿Auron se habría dado cuenta?

Decidió relajarse, acomodando un poco su ropa y caminando hacia la cocina.

En el momento en el que el mayor se retiró del salón, Auron abrió los ojos. Había despertado hace un tiempo, pero, al sentir a Reborn como su colchón, decidió hacerse el dormido un rato. Cuando sintió la pequeña caricia del mayor en sobre su cabeza se sonrojó a más no poder. Menos mal Reborn no lo había notado.

Se sentó en el sofá sin hacer ruido, giró su cabeza e hizo tronar su cuello, estirándose. Vio a uno de sus nuevos gatos correr con sigilo sobre los muebles, hasta llegar a él.

Lo acarició un poco al sentir como se acomodaba en su regazo. Así estuvo unos quince minutos, escuchando algunos ruidos desde la cocina, intuyendo que sería Reborn dándole su comida al otro gatito.

-Buenas.- Saludó el castaño, aún un poco avergonzado por lo de hace un rato, haciéndole pegar un pequeño saltito al contrario en su sitio, sin escucharlo llegar al salón.

-Hola, ¿qué tal dormiste?- Saludó de vuelta.

-Bastante bien, la verdad.- Una sonrisa de medio lado casi imperceptible se dibujó en su rostro, viendo la tierna escena de Auron acariciando al pequeño gato anaranjado. Caminó un poco hasta llegar al mueble y sentarse junto a él. -¿Y tú?- Empezó a acariciar igualmente al felino, sintiendo su suave pelaje.

-Igual.- Alzó un poco su mirada, viendo en dirección a la cocina. -¿Ya le diste de comer a los gatitos?- Preguntó, ya sabiendo la respuesta.

-Solo al gato negro, este pequeño no se quizo acercar.- Respondió, mientras acariciaba la suave cabecita del felino, al parecer le tenía más confianza a Auron que a él. Al menos se dejaba mimosear.

El menor asintió, observando la mano del contrario con detenimiento, al no tener sus guantes. Se veía rasposa y algo maltratada, con una que otra cicatríz pequeña.

Algo que no había notado aún era el brillante anillo plateado que portaba en su mano izquierda. Le entró curiosidad. ¿Estaría comprometido? No había llegado con nadie al pueblo, y no le había comentado nada de tener pareja.

-¿Quieres algo de desayunar? Te advierto que soy muy buen cocinero.- Le miró Reborn, sonriendo con burla.

Auron sonrió de igual forma, saliendo de su trance. -Te apuesto a que cocino mejor que tú.- Sentenció.

-¿Me desafías?- Alzó una ceja y le miró retador.

El castaño menor asintió, seguro de sí.

(...)

Huevos y algún que otro insulto volaban por la cocina.

Lo que había empezado como una "competencia tranquila" haciendo un desayuno balanceado había terminado con una guerra por quién hacía la mejor tortilla de patatas del mundo.

Fuego y agua peleaban mientras se arrebataban de las manos la única sartén antiadherente que quedaba limpia.

De repente, fuego decidió atacar, cansándose de forcejear con su contrario. Encendió el utensilio en llamas, haciendo alejar a agua al sentir el intenso ardor del fuego cubir sus manos.

Pero él no se iba a quedar así. Rápidamente estiró su mano hasta la llave del agua, abriéndola y dejando correr un poco por su mano. El líquido se adería a su brazo como si fuera un imán, no sabía ni cómo lo estaba haciendo, pero la adrenalína le hacía sentirse capaz de todo. Satisfecho con la cantidad de agua en su poder, lanzó el líquido en dirección a la sartén, que ahora mismo se encontraba a nada de ser colocada en el fogón para empezar cocción de las patatas, aunque en ese momento se encontrara encendida en llamas. El agua cubrió el metal, haciendo que, por un momento, se formara una dura capa de piedra en su exterior, que a los segundos se quebrantó y calló al suelo como polvo.

-¡Eh!- Auron volteó a ver al contrario.- !No hagas eso!- Se quejó en voz alta, enojado.

-¡¿Quién ha sido el que ha empezado con el fueguito?!- Recriminó Reborn, cruzándose de brazos.

-¡Pero vamos a–- Los dos callaron al escuchar un agudo chillido, proveniente de detrás del de fuego.

Voltearon asustados, reconociendo el característico sonido del llanto de un felino.

Era el gatito naranja, maullando por comida a sus nuevos dueños.

-¡Hostia, el bebé!- Exclamó Auron, agachándose a su altura y acariciando levemente la cabeza del animal.

-¡Que no le hemos dado su comida, joder!- Se agachó de igual forma el más alto, acariciándole a la par con su contrario.

Al final se habían olvidado de esa tal competencia, concentrándose en darle de comer a su gatito y termiando de hacer su propio desayuno ya mas calmados.

-¿A que estaba buena mi tortilla?- Sonrió con burla el mayor, observando la enojada expresión del de fuego mientras se levantaba de la mesa y caminaba con los platos sucios a la cocina.

-¡La hemos hecho los dos, cabrón!- Recriminó con enojo el mas bajo, lanzándole un suave golpe en el brazo mientras el castaño pasaba por su lado, el cual solo podía contener su risa.

Después de todo habían desayunado bien, que era lo que importaba.

1021 palabras.

XD.

Ignorando un poco el hecho de que me cuesta mucho escribir, me ha gustado mucho este extra :D.

Se que no es lo que se espera después de dos meses sin acutualizar, pero algo es algo xd.

Juro que no sé por qué me cuesta tanto hacer un solo párrafo. Tal vez sea porque soy demasiado perfeccionista con la ortografía (aunque aún así me equivoque) o porque soy muy distraída como para centrarme en lo que estoy haciendo.

De igual forma, muchas gracias a todos lo que me han estado apoyando♡. ¡Que ya son 3mil leídas, joder!

No imaginé siquiera llegar a las 1k, ¡pero mira ahora! xd.

Mis más sinceras disculpas por no ser constante, juro que intententaré mejorar, y muchísimas gracias a todos💕.

Sin más, me despido.

~Iunjo de León~

Martes, 11 de Enero. 2022.
1:13a.m.