𝐺𝑎𝑦 [𝐾𝑎𝑧𝑢𝐹𝑢𝑦𝑢]

27

El viernes llegó, y con él la salida a los bolos con los chicos.

Estos días Kazutora y yo hemos estado más juntos, me acompaña a ir hasta mi próxima clase en la universidad e inclusive me espera fuera del salón para ir con los chicos hasta la cafetería, aunque últimamente salimos y vamos a comer algo a otro lado... y sí, Baji también nos acompaña. O a veces también me acompaña hasta mi casa donde en el trayecto hablamos de varias cosas sin importancia, pero nunca nos quedamos en silencio... Y es algo raro que Kazutora siempre tenga algo para decir, porque él nunca dice nada.

Kazutora también ha estado más libre, me refiero a que a veces en los pasillos rozamos nuestras manos y estoy seguro que es a propósito. También, cuando Baji va con nosotros a comer por ahí, se queda junto a mi y le lanza miradas de odio cuando me habla o cuando me cuenta un chiste.

Últimamente Kazutora ha actuado como un chico interesado por otro, y eso me gusta. Mucho.

Sabía que los rumores se habían intensificado más ahora que Kazutora cambió su forma de actuar drásticamente... Aunque me pregunto cuánto debe de haber estado pensado en eso.

Pero él no se había enterado, y entre nuestro grupo de amigos, solo Draken y yo sabíamos sobre el rumor. Solo esperaba que nadie más se enterara y pronto dejen de hablar sobre eso.

Y ahora estábamos en el auto de Mikey, con Takemichi de copiloto y Mitsuya, Draken, Kazutora y yo atrás.

Estábamos un poco apretados ya que no éramos niños con confecciones pequeñas, nuestros cuerpos eran grandes y el auto era muy pequeño.

Pero Takemichi comenzó a hablar sobre un tema, y Mikey le respondió, y luego Mitsuya comentó sobre eso y terminamos todos hablando sobre la separación de una banda.

- Yo las amaba. - Dijo Draken cuando bajamos del auto y fue lo que finalizó la conversación. Bueno, eso y una risa de parte de Takemichi.

Entramos quedamos sorprendidos ya que el lugar era increíble para que hace poco se haya abierto.

Divisamos a Smiley entre la gente y a su lado estaba Baji con un chico.

- ¿Quién es él? - Preguntó Kazutora mirándome confundido, me encogí de hombros y nos acercamos con curiosidad.

- Hola, chicos. Él es ____. - Habló Baji mirándome nervioso.

Asentí y una pequeña sonrisa se escapó de mis labios.

- Un gusto, ____. Yo soy Chifuyu Matsuno. - Me presenté con una sonrisa haciendo que mis ojos formen una línea negra.

Todos me miraron incómodos, supongo que se dieron cuenta que mi ex estaba presentándome a una pareja. Pero vamos, como si a mi me importara. Tengo a Kazutora.

_____ al parecer se dio cuenta, porque me miró apenado y rascó su nuca.

- Yo... dios, estoy muy avergonzado... Chifuyu, tengo que pedirte perdón por lo que hice, por mi culpa... - Lo interrumpí.

- No tienes que disculparte por nada. - Dije y solté una risa. - No fue tu culpa, Baji me dijo que no sabías nada. Además, la culpa la tiene este idiota, pero tranquilo, me abriste los ojos. - Dije y reí. - Ahora olvidémoslo, porque sucedió hace un año y varios meses, y yo lo único que siento por Baji es envidia de su dinero.

_____ rió nervioso y Baji negó divertido, yo comencé a reír y segundos después Smiley no pudo aguantar la risa.

- Pensar que antes no podían separar sus cuerpos del otro y ahora se presentan las parejas. - Habló Mikey y rodó los ojos.

Nos quedamos en silencio.

- Me tenía que haber callado, ¿no? - Asentimos. - Lo siento, mi culpa.

Negué divertido.

- Bueno, bueno, ya. ¿Vamos a jugar? - Preguntó Smiley divertido y todos asentimos.

Luego de haber preparado el juego y de dividir los equipos, que, por cierto, quedamos Draken, Mitsuya, Smiley, Mikey y yo en un equipo y Kazutora, ______, Baji y Takemichi en otro, comenzamos a jugar.

Yo era malísimo en esto, razón por la que no ayudaba para nada al equipo.

Luego de varios minutos en el que nos reíamos de tonterías por parte de Baji, Smiley y ____ (sí, se acomodó muy rápido ese chico, y me di cuenta que es perfecto para Baji), y los chicos se reían de mis fracasos, me cansé.

- Chicos, de verdad, creo que no debería seguir jugando, los estoy haciendo perder. - Hablé y mordí mi labio inferior mirando a los chicos inseguro.

- Por favor, Chifuyu. Vinimos para divertirnos, no para ganar. - Dijo Smiley y los demás asintieron. - Aunque si quieres tirar por lo menos un bolo no... - Fue interrumpido por un golpe en el hombro de parte de Mikey, reí.

Suspiré y agarré una bola cuando era mi turno. miré los bolos a lo lejos de la pista y, cuando estaba a punto de tirar, sentí una mano en mi cintura.

- Estás en una mala posición. - Escuché la voz de Kazutora y sentí una suave risa.

Con la otra mano me agarró suavemente la muñeca derecha, la mano con la cual agarraba la bola, e hizo que tirara mi brazo hacia atrás.

Luego me ayudó con mi posición de mis pies y mi dirección, todo sin soltar su mano de mi cintura.

Y yo estaba más rojo que un tomate.

- ¡Ya, dejen de coquetear y lanza la bola, Chifuyu! - Gritó Draken y Kazutora lo miró amenazante.

Me soltó la cintura lentamente y se alejó un poco para dejarme tirar.

Hice lo que Kazutora me enseñó hacía unos segundos con sumo cuidado y pude derribar 9 de 10 bolos, lo miré emocionado y luego de pegar un salto corrí hacia él y lo abracé con fuerza.

- ¿Viste eso? - Pregunté deshaciendo el abrazo. - ¡Soy un genio! ¡Lo hice, lo hice!

Kazutora comenzó a reír.

- No hubieras derribado ni uno solo si no fuera por mi ayuda. - Habló arrogante, aunque tenía razón.

Sonreí.

- ¡Gracias, Kazutora! ¡Eres el mejor! - Exclamé emocionado y me acerqué a derribar el otro bolo, y, siguiendo otra vez las instrucciones de Kazutora, pude derribarlo.

Cuando el juego terminó, que aunque ya pude dominarlo aun así perdimos por lejos, salimos y caminamos hacia un restaurante.

Charlábamos de cualquier cosa, y era increíble como el tal ____ siempre tenía un tema de conversación interesante y algún chiste muy gracioso para contar.

Lo apruebo.

Esa noche la había pasado muy bien, hacía mucho que no tenía ese tipo de salidas y menos con tantos amigos.

Después de mucho tiempo pude descansar de varias cosas sofocantes y no tener que hablar sobre problemas y problemas.

Me sentía tan feliz de tener los amigos que tenía y no podía estar más agradecido con el destino por ponerlos en mi camino.