Two Weeks

Desde que te conocí (Winteriron)

Para Bucky conocer a Tony había sido lo mejor de su vida, amaba las risas que salían de aquellos labios rosados y pequeños que poseía el de ojos café, amaba besarle y tocar sus mejillas con cariño.

Bucky conoció a Tony justo cuando el primero estaba en su peor momento, Tony le brindó esa confianza y paz que había perdido por un evento traumático luego de la pérdida de sus padres en manos de unos ladrones que entraron a su casa y los mataron a sangre fría, mientras él se escondía debajo de la cama sin que ellos se dieran cuenta. Bucky se encontraba en terapia para superar eventos traumáticos y Tony era ayudante allí, las terapias no funcionan con James, pero parecía que Tony si podía ayudarle a calmar las pesadillas, era tanta la ayuda que el castaño fue capaz de brindarle, que la terapeuta decidió que James y Tony tuvieran una hora de conversación en una sala apartada de los demás, y claro que funcionó, James superó su trauma gracias a la ayuda de Tony, el cual le escuchaba atentamente sin interrumpirlo, dando sonrisas sinceras y diciéndole "Todo estará bien" "No fue tu culpa", palabras que alguna vez dijo su terapeuta, pero que no tenían sentido para él hasta que las escucho decir de los labios de Tony y se las creía.

Era posible decir que desde que conoció a Tony era un hombre nuevo, más cuando ambos confesaron sentir algo más que una simple amistad por el otro ,claro que James nunca pensó ser correspondido por Tony, pero se sorprendió cuando el castaño de bonitos ojos le dijo que se sentía atraído por él y no encontraba que fuera malo intentar tener una relación, una relación que ya tiene 2 años de un sólido amor y ardiente como desde el primer día.

- Hey Bucky, ¿Vas a ayudarme o no? - Bucky vio a Tony cargando una gran caja mientras la dejaba en el suelo del departamento de ambos y es que habían decidido irse a vivir juntos.

- Si te ayudó... ¿Qué me ganó?

- No dormir el primer día en el sofá - respondió con una sonrisa altanera - Ahora mueve ese lindo trasero y ayuda a tu lindo y sexy novio.

Tony salió del departamento y Bucky soltó una pequeña risa, amaba con locura a ese castaño de ojos café, como no hacerlo si era el ser más hermoso y lleno de luz.

[...]

Bucky no quería ver a Tony, no luego del accidente en moto que tuvo cuando iba a su trabajo, ¿Cómo podía estar ahora con Tony? Era imposible, su brazo izquierdo faltaba, ya no estaba y tendría que usar una prótesis de por vida, no era digno del amor del castaño, por eso mismo no había dejado que entrará a la habitación en donde lo tenían hospitalizado.

Escuchó bullicio a las afueras y vio como la puerta era abierta abruptamente, allí parado con una furia en sus ojos estaba Tony, el cual caminó hasta Bucky, apretó los puños absteniéndose de golpearlo por no dejarlo entrar.

- Eres un maldito idiota y tonto, yo te amaré sin importar si te falta uno o dos brazos, si te quemas la cara o si te faltan todas las extremidades, escúchame bien James Buchanan Barnes, si vuelves a alejarme de esta manera, yo no voy a volver.

- Tony, soy alguien incompleto.

- Cállate, yo te amo por quien eres, esto no tendría porque separarnos o ¿Es que ya no me amas? - lo miró con ojos brillosos apunto de soltar lágrimas y Bucky negó levemente.

- Cariño, no pienses eso, yo te amo, siempre te amaré, pero mírame, no tengo un brazo.

Tony acarició el rostro de Bucky y besos su labios - Te construiré uno genial.

[...]

Tonto, esa era la palabra correcta para definirse, era un completo tonto hace 1 año atrás cuando había decidió dejar a Tony por no tener su brazo, obviamente Tony no lo dejo hacerlo y se esmero en siempre demostrarle cuanto le amaba y que no importaba si tenía o no una de sus extremidades, Tony cumplió con lo prometido, le había creado un brazo hecho de un material muy extraño en el mundo, pero muy resistente, el material llamado Vibranium fue capaz de conseguirlo gracias a sus contactos, además gracias a esto Bucky cada vez se sentía más seguro de si mismo.

- ¿En qué piensas James? - la voz de Tony lo sacó de sus pensamientos, esté le extendió una taza humeante de chocolate caliente.

- Solo que fui un tonto al querer alejarte - se acomodo en el sillón en el que estaba.

Tony sonrió con su propia taza de chocolate caliente en mano y se sentó en las piernas de Bucky, el cual besó su cabeza.

- ¿Ya quitaste esa tonta idea de tu cabeza? - preguntó apoyándose en el pecho de su amado y dejando las tazas en la pequeña mesa que tenían al lado para evitar quemarse.

- Pues claro, no creo poder vivir sin ti.

Tony sonrió y se acomodo mejor sentándose a horcajadas sobre su novio - Entonces demuéstralo.

Bucky sonrió coqueto y lo atrajo más a su cuerpo.

- Como ordene mi genio.