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Darle otra oportunidad a mi novio era algo que me tenía con los nervios de punta, no sabía lo que planeaba Jimin exactamente, pero estaba ansioso por saberlo, su llegada no fue inesperada para mí, después de la video llamada que tuvimos, Jimin había tomado el primer vuelo para estar aquí conmigo, pidió inclusive alejarse de las entrevistas por un par de días para estar conmigo, aunque claro los patrocinadores no estaban contentos por esto, lo sé porque ahora estoy escuchando la conversación.

—¡No puedes simplemente cancelar todo cuando te plazca, Park! —podía escuchar la voz de aquel hombre, los gritos no habían cesado desde que Jimin le comento que no iría a las entrevistas que estaban programadas.

—Lo lamento, pero me encuentro indispuesto —comento de nuevo mi alfa, lo miré, caminaba de un lado a otro dentro de la cocina, no quería que escuchase los gritos, pero ya era demasiado tarde para eso, aprete mis labios y lo vi a él mirando al suelo mientras suspiraba—, escucha, sólo un par de días, te lo pido en serio.

—¿Crees que los patrocinadores te darán tu par de días? —el sarcasmo en la voz de aquel hombre sólo provocaba que mi alfa frunciera el ceño—. ¡No! Te recuerdo que tienes que presentarte, además no sé que es tan importante como para que no quieras estar en las entrevistas.

—Sólo tengo unos asuntos pendientes —comento Jimin.

—Si es por ese omega tuyo —Jimin apretó la mandíbula al escuchar eso—, Park, no te entiendo, pareciera que ese omega estúpido es quien manda en tu relación.

—¡No vuelvas a llamarlo así! —gruño Jimin en lo alto, haciendo que me encogiera en mi sitio, sus ojos azules ardían en furia—. Podrás ser el jefe de todo el equipo, pero no permitiré que te metas con mi pareja, y no me interesa si me quieres sacar del equipo por esto.

—Aunque quisiera sacarte no puedo —soltó un bufido del hombre del otro lado de la línea—, eres uno de los mejores en la escudería, y ya has ganado suficientes competencias para demostrarlo —hubo una pequeña pausa—, sólo dos días, es todo.

—¡Sí! —dijo Jimin mientras sonreía.

—Pero no habrá más, después de esos dos días, te quiero de vuelta aquí para hacer las entrevistas, sin excusas.

Me aparte de la entrada de la cocina, ¿sin excusas? Solté un resoplido, me sentía mal, estaba metiendo en problemas a mi alfa, pero en verdad quería que pasará tiempo conmigo, camine hasta llegar a la estancia, el lugar siempre había sido algo cómodo para mí, la estancia tenía un enorme sofá para siete personas en específico, formaba una enorme curva como la luna cuando esta en menguante, el televisor estaba al frente, una pantalla de casi cincuenta pulgadas, en el centro una mesa de patas cortas de madera color negro, y en medio un pequeño ramo de flores artificiales dentro de un jarrón de cristal. Jimin tenía en la pared del lado derecho una estantería de cristal en donde colocaba los trofeos que había ganado, el relucir de aquellos premios siempre era lo que llamaba mucho la atención de todos, aunque Jimin consideraba que no era para tanto.

Jimin y yo teníamos una pequeña obsesión por coleccionar libros y leerlos de vez en cuando para entretenernos, teníamos dos libreros grandes cubriendo la pared que se encontraba detrás del sofá, todos estaban repletos de libros y de algunas fotografías de Jimin junto a mí, todas enmarcadas, también era allí donde colocaba los recuerdos que Jimin me traía de todos sus viajes por el mundo.

Toda la estancia estaba pintada de blanco, me gustaba el lugar, siempre los pisos estaban lustrados, también eran blancos, solté un suspiro mientras tomaba asiento en el enorme sofá de color azul marino, no tarde en escuchar los pasos de mi alfa aproximarse, el aroma de Jimin era lo que me encantaba, era relajante, pero a la vez lleno de todo ese poderío que siempre había demostrado, su fragancia a madera y ese toque picante de canela era lo que siempre me mantenía embelesado.

Dangerous Love  ||JimSu||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora