Dangerous Love ||JimSu||

06

Iniciar la mañana con un buen desayuno siempre es importante, aunque me había ofrecido a prepararlo, Jimin insistió en llevarme a desayunar afuera, acepte su propuesta, era un buen momento, me sentía feliz, y con ganas de pasar más tiempo con él, aunque claro, para ser sincero, ser novio de un conductor de la F1 es como estar con una estrella de Hollywood, no sólo se trataba de los paparazis que buscaban la oportunidad de tomarnos fotografías, sino que también algunos aficionados llegaban a reconocerlo de inmediato y no dudaban en saludarlo, uno que otro era más atrevido y le pedía su autógrafo sin miedo alguno, y casi siempre era yo quien terminaba tomando fotografías del fanático y mi novio en cuestión.

Para mí fortuna pasaba siempre desapercibido por las miradas, aunque muchos sabían sobre mi relación con Jimin, yo pasaba sumamente desapercibido, y eso era un alivio, no quería que me fueran persiguiendo haciéndome preguntas tontas sobre mi relación con Park Jimin, mi vida privada quedaba como eso, privada, solamente Jimin me conocía y las personas me dejaban tranquilo, agradecía que así fuera, no sabría siquiera como actuar si acaso alguien se me acerca solamente para entrevistarme, ciertamente jamás acepte mi relación con Jimin por querer fama, simplemente mi alfa había logrado conquistarme con sus acciones, es un encanto de hombre.

—¡Oh por la luna! —esas fueron las palabras del mesero en cuanto se acerco a la mesa para atendernos—. ¿Usted es Park Jimin? —mi novio no dudo en soltar un suspiro pequeño mientras le regalaba una sonrisa a aquel otro alfa que parecían brillarle los ojos de sólo verlo.

—Lo soy —menciono Jimin, mientras que yo me dediqué a mirar hacia el menú, los desayunos eran variados, cubrí la parte inferior de mi rostro mientras me concentraba en leer y al mismo tiempo escuchar la conversación de esos dos.

—¡E-es un gusto poder verlo en persona! —dijo aquel chico de apariencia joven—. Soy un gran fanático suyo, lo sigo desde su primer campeonato mundial.

Fruncí levemente mi ceño, ¿campeonato mundial? ¿Qué carajos es eso? No pude evitar mirar hacia mi novio, y él parecía estar totalmente contento por lo mencionado.

—Es genial poder conocer a alguien que me sigue de tanto tiempo —comento Jimin.

—Para mí es un honor poder atenderlos —me dio un rápido vistazo antes de volver a ver a Jimin—, ¿ya han decidido o prefieren que regrese más tarde? —Jimin me miro.

Quizás no había una marca sobre mí que dijera que soy su omega, el lazo es importante, inclusive para que tanto el alfa como el omega puedan transmitir las emociones y pequeños mensajes para su pareja, pero de alguna forma, era como si no necesitáramos ese lazo tan importante entre nosotros, era extraño, pero Jimin casi siempre parecía poder leer mi mente sin pensarlo mucho y con una sola mirada, sabía lo que quería, aunque a veces yo no podía decir lo mismo de mí, Jimin tiene gustos que son variados, muchos de ellos pueden inclusive no coincidir con los míos pero que hace que se complementen bien a la primera oportunidad, como los sabores de helado, pero aunque los gustos fueran así, nos complementábamos bien.

—Danos unos minutos más, por favor —dijo Jimin en cuanto sus ojos azules se apartaron de los míos, el joven alfa no tardo en dar un asentimiento para después retirarse, Jimin soltó un resoplido pequeño mientras volvía su atención a mí—, perdona si no podemos tener un tiempo para nosotros, cariño.

—No te preocupes por eso —aleje el menú de mi rostro y lo coloque sobre la mesa—, debe ser normal para ti todo esto —Jimin rodo los ojos.

—No lo es —sus ojos conectaron con los míos—, usualmente en los viajes casi no ocurre esto, y casi siempre si hay un piloto en una competencia de su país de origen, es al que más le prestan atención, sobre todo porque es la esperanza de obtener un título.