Capítulo 7
— ¿Por qué lo dices? — dije llevando mi mano vendada al pecho.
— Por lo de antes. — dijo y simplemente tomó mi otra mano. Me sacó del callejón y fuimos caminando hasta el puerto de Kanto. — Yo fui quien dejo esa carta que viste en tu casillero, la encontré tirada y al ver que era de Sanzu para ti, te la llevé. — decía mientras seguíamos caminando, era como si no le pareciera tan extraño lo sucedido.
— Ah-... — terminé diciendo por el exceso de información.
Cuando llegamos al puerto, el olor a mar era magnífico, habían numerosas personas, con unos uniformes rojos, entre ellos estaba Sanzu. Ahora lo comprendía todo. Él no me hablaba para protegerme, había planeado una pequeña cita para decírmelo después de la pelea, como siempre, todo un romántico. Izana me dejo detrás de unos grandes contenedores de mercancía con un chico alto que tenía una cicatriz en el ojo, Kakucho. Él me dió ropa para poder cambiarme y se fue para dejarme más intimidad, la ropa se componía en una sudadera gris claro y unas medias altas, el resto seguiría siendo mi uniforme escolar porque no tenían más ropa. Cuando terminé de cambiarme salí de detrás de los contenedores y me acerqué a Kakucho. Izana se acercó a nosotros y le dijo que la ToMan estará por llegar al puerto, que sería una masacre. Y así fue.
La banda Tenjiku controlaba cada movimiento de los miembros de la ToMan, parecían algo estúpidos, hasta que llegaron Manjiro, Draken y la chica de cabellos castaños claros. Antes de aquello, Takemichi estaba al mando de la ToMan, sustituyendo al comandante Sano Manjiro, Peh-yan se encargaba del noveno líder de los Black Dragons, Angry y Hakkai de los hermanos Haitani, siendo terriblemente derrotados hasta que el peliazul comenzó a llorar, Inui peleaba con un chico pelinegro con media cabeza rapada, parecía que no estaban peleando del todo, pero yo simplemente era una espectadora. Yo me encontraba sentada en uno de los contenedores, al lado de dos chicos que, cuando llegó Manjiro, bajaron a pelear contra él.
Sanzu no intervino en toda la pelea, él se mantuvo al margen incluso cuando su "líder" se metió en la pelea de Inui. Sin embargo, Izana y Kakucho estuvieron luchando durante toda la batalla. Izana se interponía cuando creía que la pelea sería complicada, y Kakucho se enfrentó a Takemichi. Hubo un momento en el que se escuchaban motos, ahí fue cuando Takemichi alzó su puño en alto y dijo que la ToMan había ganado. En ese momento me di cuenta de muchas cosas, sin embargo todo pasó demasiado rápido como para poder asimilarlo. En algún momento, Izana se enfrentó a Manjiro, dejando a Izana con la nariz sangrando. En otro momento, alguien jaló mi cabello, bajándome del contenedor y llevándome junto Izana y Manjiro. Mi cabeza se aclaró cuando vi un arma apuntándome. Jadeé y lo último que vi fue a Sanzu, una mirada neutral, como si la vida no fuera cierta.
Yo siempre pensé que todos los recuerdos y saberes de la vida regresaban a ti cuando morías, por eso sabias si ir
al cielo o al infierno.Desde que tengo memoria, mi familia me apartó de ellos, como si fuera un deshecho para tirar a la basura. Mi padre estaba siempre fuera de casa por "trabajo", y mi madre era ama de casa, ella me "mimaba" a su manera. Hubo un día en el que mis padres y hermano fueron a algún lugar en coche, y tuvieron un pequeño accidente, en el que ninguno de los tres sobrevivieron. La noticia me impactó tanto que mi cerebro empezó a imaginar que ellos estaban ahí conmigo todavía. Unos años después, me dio un paró cardíaco y me llevaron al hospital, donde me diagnosticaron Síndrome del corazón roto. A partir de ese día, mi vida empezó a mejorar, quitándome cualquier tipo de estrés de las notas, porque no era la mejor de mi clase, antes de ese día. Cuando conocí a Sanzu, él se reía de mi. El día que sus amigos se reían de lo débil que era, él se reía con ellos. El día que me llevo al karaoke, solo abusó de mí, por pura diversión. El día que fue a mi casa, cambió las pastillas a una droga especial para que no recordara nada de lo pasara un par de horas después de haber tomado la pastilla. Las pastillas que tomaba eran para regular mi estrés y la enfermera de la escuela me las administraba porque no tenía dinero, ni fondo, y tampoco me podía someter a estrés porque este acabaría con mi vida.
En resumen, mi vida era una mierda. Mi cerebro hizo que toda mi vida fuera una mentira, una pequeña historia de amor romántico con un final trágico.
Pero no lo odiaba, era bonito vivir en una mentira. Para solventar el estrés, ¿cierto?
Ahora mi pregunta es: ¿Para que m**rda me va a servir la trigonometría? ¿De que me sirve saber que alto es un árbol cuando los rayos del sol forman un ángulo de 40° y la longitud de la sombra del árbol es de 18m? No lo entiendo.
Al final me salió bien la presentación, pero tuve que hacerla en uno de los recreos por qué no era capaz de presentar ante mis compañeros. Igualmente son un pan de Dios. :3
Me preguntaba también como estabais. :)
Y que historia os gusta leer ^-^ para escribir y tener ideas.
Mi cerebro se derritió x el frío de mi país (España)
Volviendo al tema, este capítulo no me gustó pero tampoco sabía que escribir como remplazo así que se quedará así. Y solo queda un capítulo más :')
Espero mucho que os esté gustando y no olvidéis votar y comentar si os gustó, me hace mucha ilusión :')
Nos vemos cuando tenga algo más para el siguiente capítulo (que está medio hecho) 💗🎐
ESTÁS LEYENDO
A student's life - Haruchiyo Sanzu
FanfictionOnce upon a time... with Haruchiyo Sanzu . . Bad ending