Ilusión

5._Lord

Olimpia volvió a la mansión después de burlar a Shin. Cuando paso por la sala vio la pianola e incapaz de contener su ira nacida del dolor de su herida, fue hasta la chimenea por el atizador. Estaba por golpear el instrumento cuando su padre se lo arrebato de las manos y la empujó con fuerza. La muchacha cayó sobre la alfombra como una flor que es cortada desde la base. De una forma suave,pero cruel de ver.

Cuando Bills entró allí, sin más propósito que ir a su habitación, se encontró con una escena que a él no lo conmovió en nada. El señor de la casa simplemente desahogó en Olimpia toda su frustración por haber sido timado. Porqué acepto participar de la treta de esos tres,pero ellos no le agradaban en lo más mínimo. En especial Shin. Cómo no podía castigarlo a él,la maltrato a ella que al ver a Bills le pidió ayuda con una mirada suplicante,sin embargo, él siguió su camino como si nada. De no ser por la dama de compañía de Olimpia,esta hubiera terminado muy mal. Su padre no le tuvo clemencia ninguna. 

Whiss que llegó unos minutos después,ayudo a la mujer a llevar a la muchacha a su habitación,dónde la dejó tendida en su cama. La dama le pidió que saliera para poder curar las heridas de su niña,que pareció haberse ido a otro mundo. Miraba,pero no veía y no emitió ni un sólo quejido pese al dolor que sentía.

-Ese hombre rompe con todos los paradigmas de un padre. Y estoy siendo sutil-le dijo Whiss a Bills cuando se reunieron en uno de las amplias terrazas de la mansión.

-Su hija se entregó a un estafador que la engaño con un cuento ridículo. En su caso yo hubiera hecho lo mismo y también matado al imbécil de Shin-le dijo Bills descansando su espalda en el barandal.

-Cuanta empatía-exclamo Whiss-Pero a lo que voy es a lo que este hombre es en verdad. Estaba hecho un energúmeno cuando encontró a Shin con la señorita Olimpia,pero cuando él le explicó su plan para con el Rey...Sus ojos brillaron de codicia.

-No podemos fiarnos de él-le dijo Bills mirando hacia abajo,a la entrada del jardín-Y tampoco de ese mocoso.

Whiss miró a Shin que llegaba a la casa. Se le veía un tanto alicaido.

Cuando la dama dejó la habitación de Olimpia,se encontró en el pasillo con Whiss, quién le pregunto cómo estaba la muchacha. Después de una respuesta protocolar,la mujer se quedó viendo a ese sujeto alto y delgado de atuendo granate.

-Supongo que también nos desprecia por lo que hicimos-comentó Whiss con una sonrisa resignada.

-¿Quién soy yo para juzgar? Además ¿Qué hay de malo en unas monedas a cambio de una bonita ilusión? Sin embargo,lo que le hicieron a mi niña es otra historia-le dijo la mujer.

-Yo...

-¿Le gustaría una taza de té y pastel,señor Whiss? Las penas con pan son buenas,decía mi abuela.

-Me encantaría-le respondió Whiss que se hizo una idea de a dónde iba esa invitación en realidad.

Terminó en la cocina sentado del otro lado de una mesa que lo obligó a extender las piernas,
pues dobladas levantaba aquel mueble. La mujer delante de él le dijo llamarse Matilde y cuidar de Olimpia desde que tenía cinco años,cuando su madre se suicidó.

-La señorita era muy pequeña y si bien vio a su madre colgando de aquel árbol,no recuerda nada. Posiblemente su mal de la vista la ayudo a deshacerse de esa terrible escena-terminó de decir Matilde y bebió un poco de té.

-Es una historia muy triste. Pero ¿Puedo saber por qué se quitó la vida la madre de la señorita Olimpia?-le preguntó Whiss.

-Porque el padre de Olimpia piensa que ella no es hija suya. La madre de mi niña se enamoro de un empleado de esta casa y cuando el señor lo descubrió se imaginó toda clase de cosas. Trató muy mal a la señora y está se suicidó unos días después. Pero él estaba equivocado. Aquel joven nunca correspondió a la señora,por lo que entenderá que nunca ocurrió algo entre ellos. Sin embargo,el señor no oyó ni oye razones. Si conservo a la muchacha es porqué pensaba casarla con el Lord Cuidador,
pero este la rechazo por ser muy joven.