🌟 ¿Y si miramos las estrellas?
❛❛ -Probablemente nunca habría notado lo hermoso que es el cielo si no fuera por ti.
-El cielo es nuestro recordatorio de que siempre tendremos algo en común y eso es que a pesar de la distancia siempre estaremos...
And I'll tell you all about it when I see you again
We've come a long way from where we began
Adiós pulgoso.
No es un adiós, es un hasta pronto
Narrador Omnisciente
Estaban cinco chicos apuntando a varias direcciones mientras que Lucius se acercaba lentamente
-..todo lo que debes hacer es dármela o no sabrás la verdad, Potter
-He esperado esto por quince años...
-Lo sé -respondió Lucius pensando que la conseguiría
-...esperaré un poco más ¡ahora!
y todos al unísono gritaron: desmaius. Mientras se separaban e iban por caminos diferentes
Todos comenzaban a lanzar hechizos tras hechizos a los mortífagos que los atacaban. Hasta que se vuelven a juntar colocándose en circulo
-Reducto -grita Ginny atacando, pero todo se comienza a caer. Llegan a la puerta más cercana en la que no había nada haciendo que caigan, pero quedan flotando levemente antes de caer al suelo.
Voces salían del arco, pero el sonido de los mortifagos llegando fue mucho más fuerte.
Agarraron a cada uno de ellos, menos Harry quien tenía la profecía en sus manos. Sostenían del cuello a los chicos mientras les apuntaban con sus varitas.
-Creíste que unos niño lograrían detenernos -ríe con burla -Dame la profecía ahora o verás a tus amigos morir, tu decides Potter
-Lucius querido, somos niños, pero no estúpidos -se escuchó la voz de Ara detrás de Harry haciendo sobresaltar levemente al platinado
-Aléjate de mi ahijado -dijo Sirius detrás de Lucius. Para cuando el platinado se giro el pelinegro le dio un golpe en el rostro haciéndolo caer hacia atrás del impacto.
Así de a poco la habitación se fue llenando de las personas de la orden junto a Ara y Jason. Quienes agarraban a los mortífagos.
La peliverde y el rubio corrieron hacia los chicos que estaban detrás de una roca protegiéndose.
Sirius peleaba contra Lucius, pero en un inesperado movimiento Bellatrix se puso atrás del platinado y en un pequeño grito:
-Abada Kedavra -pronuncio Bellatrix dándole al Black
Haciendo gritar a ambos chicos de la impotencia, tristeza y desesperación cuando su cuerpo se desvaneció entre los velos del arco, mientras que Sirius solo miraba a ambos chicos cuando desapareció. No los quería dejar.
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