Astrid O'Neill después de tener una gran aventura en su primer año junto a sus amigos Harry Potter, Ron Weasley y Hermione Granger, otro año empieza en Hogwarts. Pero este año estará lleno de sorpresas, retos y nuevos secretos saldrán a la luz.
Una...
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El club de duelo
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Horas después Astrid fue despertada al escuchar un grito de dolor, era Harry.
—¡Harry!
Astrid intento moverse, pero su costado le dolía.
—¡Fuera! —gritó Harry, pero después dijo— ¡Dobby!
Astrid vio a alguien cerca de la cama de Harry, en la mano tenía una esponja, los ojos del tamaño de pelotas de tenis del elfo doméstico miraban desorbitados a Harry a través de la oscuridad. Una sola lágrima le bajaba por la nariz larga y afilada. Astrid con esfuerzo se sentó en la camilla y miro a Harry pidiendo una explicación.
—Es Dobby, el elfo que les platique —dijo Harry incorporándose en la cama y tranquilizando a Astrid.
—Harry Potter ha vuelto al colegio —susurró triste— Dobby avisó y avisó a Harry Potter. ¡Ah, señor!, ¿por qué no hizo caso a Dobby? ¿Por qué no volvió a casa Harry Potter cuando perdió el tren?
—¿Qué hace aquí? —dijo—¿Y cómo sabe que perdí el tren? —A Dobby le tembló un labio, y a Harry lo acometió una repentina sospecha— ¡Fuiste tú! —dijo despacio—¡tú evitaste que pasáramos, Ron, Astrid y yo!
—Así es señor —dijo Dobby, moviendo vigorosamente la cabeza de arriba abajo y agitando las orejas— Dobby se ocultó y vigiló a Harry y selló la verja, y Dobby tuvo que quemarse después las manos con la plancha. —Enseñó a Harry diez largos dedos vendados— Pero a Dobby no le importó, señor, porque pensaba que Harry Potter estaba a salvo, ¡pero no se le ocurrió que Harry Potter pudiera llegar al colegio por otro medio!
Se balanceaba hacia delante y hacia atrás, agitando su fea cabeza.
—¡Dobby se llevó semejante disgusto cuando se enteró de que Harry Potter estaba en Hogwarts, que se le quemó la cena de su señor! Dobby nunca había recibido tales azotes, señor...
