Capítulo 48 Anzu termina con un misterio

40 9 71
                                    


Resultados de la segunda encuesta de popularidad.

Resultados de la segunda encuesta de popularidad

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.



¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Finalmente, el festival estudiantil arribó. Después de semanas de arduo esfuerzo por parte de los estudiantes, el tan ansiado momento se hizo presente. Los clubes organizaron presentaciones en el teatro y en el gimnasio de la institución, mientras que los grupos de cada grado decidieron en forma individual qué actividades mostrar al público, como exposiciones de arte, cafés y restaurantes en las aulas.

Kimura participó temprano en la mañana de la limpieza de los patios, para que sus compañeros pudieran armar los puestos de comida y ubicar el gran frente que elaboraron repleto de globos. Dejó el lugar reluciente, nunca aquel sitio lució tan limpio, años cumpliendo castigos en el hotel le sirvieron de algo en la actualidad.

Los estudiantes que colaboraban en la organización estaban vestidos con ropa casual, una playera blanca con el nombre de la preparatoria y unos pantalones deportivos azules para mayor comodidad, incluso los pandilleros que Yuuta había reclutado utilizaron el uniforme. Por primera vez Minato parecía una preparatoria normal.

Kimura observó el panorama, los veteranos de Okami asomaban desde los rincones para presenciar el evento, respetuosos al trabajo de sus compañeros de la pandilla.

—Si con esto no descubren que eres un amante de la limpieza, nada lo hará.— bromeó Tai acarreando una pila de cajas hacia su puesto.

—Sí, sigue burlándote. ¿No necesitas ayuda?— preguntó Kimura viendo cómo el paso intranquilo de su amigo hacía temblar la montaña de cajas.

—Estoy bien. No soy una damisela en apuros.

—¡Se-senpai!

Escucharon el llamado de Rina. La chica corría hacia ellos con una sonrisa de oreja a oreja. Era su primer festival en la preparatoria, estaba muy animada.

—Oh, hablando de damisela en apuros.— dijo Tai depositando las cajas en el suelo con mucho cuidado.

—¡Buenos días!— se reverenció Rina agitada por la intensa mañana.

Yankee love ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora