Seguir nuestro camino.

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Las niñas y Ros se despertaron mientras yo terminaba de preparar mi intento de un buen desayuno a base de huevos, ellas se fueron a bañar a un pequeño lago que les indico la viejecita, luego que volvieron a comer yo fui sola al lago.
Era un bello lugar, me pregunto como llego aquella viejecita hay y cuanto tiempo llevaria viviendo sola, y si acaso sabe algo de la ciudad siguiente, antigua ciudad Anabel.
Me cambie y volvi a la casa, ya todas avian comido y estaban listas para irse. Pero antes la viejecita nos detuvo.
-Es peligroso para las niñas ir a la ciudad siguiente, acavan de llevarse a la mayoria de las jovenes, hay demasiados hombres y poco alimento, se han vuelto un tipo de resistencia-
-Es justo lo que buscamos, y no se preocupe por las niñas no les pasara nada, Ros y yo las cuidaremos con nuestra vida-dije firme y agradecida por la nueva informacion.
-Bien, por sierto ¿me podrian dar sus nombres?, me gustaria saber a quienes he acogido en mi hogar-
-Me llamo Kris, mi hermana es Clarissa, ella es Ros y la niña...-aun no sabia su nombre, quiza le deveria dar un nombre falso.
-Soy Melanie, Mel si haci lo prefiere- Dijo la suave voz cantarina y timida, de nuestra pequeña compañante, me alegra que alla hablado y en un momento oportuno.
-Mucho gusto Mel y Clarissa cuidense-Les dijo dulcemente y con una sonrisa a las niñas, luego nos vio a nosotras dos y sus labios se volvieron una fina linea y su rostro inexpresivo- Y ustedes cuidenlas-
-Asi lo aremos-dije-Gracias por todo-
Y nos marchamos por la carretera a ciudad Anabel.
No quedaba mucho por caminar, pero aun asi sirvio mucho estar las cuatro juntas solas y bien despiertas pudimos platicar un poco Ros y yo mientras hablaban por un lado Clarissa y Mel.
-¿Que aremos llegando a Anabel?-me dijo Ros.
-Buscaremos conocidos, y comida, despues iremos a ver que quedo del pueblo-
-¿Realmente crees que quedo alguien?-me dijo con un tono algo esperanzado pero se que no queria que me diera cuenta, es ridiculo tener esperanza en algo asi a estas alturas.
-No, pero talvez quedo algo que nos sirva-Dije firme he indiferente y ella al oir esto prefirio dedicarse a oir a las niñas igual que hise yo.
-Eres muy bonita Mel, y tu nombre tambien es bonito-dijo mi hermana.
-Gracias- contesto Mel timida pero sonrojada.
-¿De donde eres?-
-No se-Contesto ahora, poniendo los ojos en blanco.
-¿No sabes?, umm... ¿tienes familia?-
-No se- y esta vez mi hermana entendio lo mismo que yo y Ros, no recordaba nada de su pasado, o quiza solo no queria recordarlo.
-Nosotras seremos tu familia- Dijo mi hermana sonriendo y abrazando repentinamente a Mel-tu seras mi hermanita menor-
Mel sonrio y la abrazo tambien, asi como Ros y yo que veiamos conmovidas la ecena.
El resto del camino Mel y Clarissa se fueron tomadas de la mano, mientras Ros y yo nos manteniamos en silencio hasta llegar a una ciudad con grandes edificios en pie y otros grandes caidos en pedazos, todo muy parecido a la primera ciudad solo que en esta, los cuerpos no avian sido enterrados ni recogidos si no que se dispersavan a las puertas de los edificios, la mayoria padres que seguramente avian defendido a sus hijos he hijas asi como avian hecho los mios.

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