¿Por Qué No Lo Hice Antes?

Tenías razón

Salí del colegio, no me golpearon en la salida, que milagro, pero Isa me dijo que Iban a salir todos y necesitan a alguien que cargue todo, ósea yo; me aliste y me fui donde me dijo Isa, la verdad quiero ir, así puedo seguir a Ana, así que con un poco de gusto lo hago. Como siempre fui caminando donde estaba, estaba pensando en todo lo que hare para matarla, nunca me decidí como matarla, aunque no creo que sea necesario, de cualquier manera que la mate lo disfrutare. Luego de media hora llegue donde estaban ellos, todos ya estaban en el lugar, me estaban esperando desde hace rato, y me regañaron por llegar tarde, ni mis papas me regañaban por eso. Las mujeres compraron mucha ropa, desde ropa de baño hasta pijamas, y yo solo cargue todo, o casi todo, mariana se compró el nuevo juego de PlayStation 5, no me acuerdo de su nombre, pero se veía entretenido, hasta yo me lo compraría: Pedro compro unos libros de matemáticas, al parecer se va a saltar dos años y va a ir de una a la universidad, me parece injusto pero si él se va, mejor para mí, aunque la única forma de escapar de mi, es en una tumba. Los hombres no compraron ropa, pero compraron muchos dulces, mucha comida, casi se compran todo un loca de comida, era un momento algo bonito, era especial para ellos, pero para mí no, era tedioso cargar cuarenta cosas y "darles" dinero porque no les alcanzaba, por suerte no tenía mucho dinero, así que no me pudieron quitar mucho. Luego de un buen rato de ir de compras, le entregue todos sus regalos a todos, Isa quería que me fuera con ella, pero yo le negué, dije que Ana me había pedido que le ayudara con sus cosas, mire a Ana con cara de cachorrito lastimado, cara que Isa me lo hizo varias veces que yo aprendí a hacerlo; Ana dijo que si, porque llevaba muchas maletas y ella se iba sola, así que Isa acepto, solo por esta vez, se ve que mi dueña es celosa, demasiado. Isa me miro con odio y se fue.

- gracias, me salvaste de ir a su casa – ella pidió un Uber.

- está bien, total no quiero estar sola, tengo la loca teoría de que nos están matando.

- ¿nos?

- pues mis amigos, pero tú eres una persona que tengo que odiar, aunque es fácil odiarte, muy fácil, como que tu personalidad da asco, con solo verte me da ganas de pegarte, vomitar o ambas.

- gracias.

- no hay de que, la verdad si necesito ayuda con esto y como te dije no quiero estar sola, estar contigo es mala compañía, pero por lo menos tengo a alguien a mi lado, mientras tu estes peleando contra el asesino yo me voy – desearas no estar conmigo.

- ¿y porque crees que alguien lo están matando? Yo creo que es pura coincidencia.

- no lo sé, es como un sentimiento que me dice, te van a matar, morirás, a cada rato, pero ahora estoy, sé que es verdad, tienen que escucharme.

- o te volviste una loca y todo es una coincidencia.

- no lo sé, estoy estresada, muy estresada, no quiero morir, quiero vivir, tener familia, un novio hermoso, sentir que tuve una buena vida.

- tarde o temprano morirás, así que no pienses en eso, con que hayas vivido diez años, para mí ya es una buena vida.

- gracias, no ayudaste una mierda, pero aprecio que dieras tu mejor esfuerzo, que no sirvió para nada, así que te lo agradezco – llego el Uber – llego nuestro transporte – le abrí la puerta del copiloto.

- las damas primero – ella entro y yo cerré la puerta, luego metí las cosas en el baúl y me fui en las sillas de atrás – listo nos podemos ir.

- no sabía que eras un caballero, al parecer el perro tiene as bajo la manga, no lo esperaba, cada día eres más humano – ella se río y le dio las indicaciones al conductor.

Ella hablo con el conductor todo el camino, no le tome importancia a lo que decían, seguramente no era nada interesante, mientras ellos hablaban yo me puse mis guantes; llegamos a la casa de Ana en media hora, vivía en la mitad de la ciudad en una casa, sus padres estaban dentro de la casa ¿cómo hago para matarla? Esto será más difícil de lo que creí, pero se me ocurrirá algo.