¿Cuál es el costo?

Lo que sucedió

Venelana tuvo un sueño realmente extraño.

Soñó que fue llevada a un lugar extraño, otro mundo, que en ese mundo encontró a su hija después de meses de búsqueda, ¡pero que en realidad habían pasado diez años! ¡Que su hija era una oficial militar de alto rango, estaba casada y tenía dos hijos!

Mientras pensaba en eso, cambió de posición en su cama para estar más cómoda. Pero se dio cuenta.

-Un momento, esta no es mi cama. Esto ni siquiera es una cama.

Sus ojos se abrieron repentinamente y lo primero que vio fue a aquella mujer pelirrosa de sus sueños, Sakura, quien la miraba atentamente.

-Ah, estás despierta, Venelana-san. 

La demonio castaña miró a la doctora y gimió. -No fue un sueño.

Sakura levantó una ceja en duda hasta que se dio cuenta de lo que hablaba.-Si soñaste lo que yo creo que soñaste... creo que sigues soñando.

Venelana no sabía que pensar cuando vio a la nobleza de Rias a excepción de Issei en un estado casi catatónico, apenas moviendo sus rostros estancados en una mirada en shock.
Miró a la familia Phoenix, excluyendo a Raiser, mirar confundidos y un poco de felices en el caso de la madre e hija.
Casi rió al observar a la nobleza de Raiser con expresión de haber chupado un limón.
Entonces miró a su nuera también en shock  quien a su vez miraba a su nieto platicando y jugando junto a sus nuevos primos feliz de tener a alguien cercano a su edad con quien jugar.

Finalmente se fijó en su esposo, su hijo, Issei y Raiser.Y lo que vio la dejó en conflicto.
Por una parte Sirzechs y el peón de su hija parecían estar fulminando con la mirada al esposo de su hija, Naruto, si recordaba bien, pero parecían un poco heridos.
Era cómico porque parecían estar vendados como momias con bultos en sus cabezas.Por otra parte, los otros dos se veían peor. Su esposo tenía un ojo morado sostenía un pañuelo en su nariz la cual tenía restos de sangre.Raiser parecía convertido en un saco de boxeo para profesionales. Ambos ojos morados, nariz y boca ensangrentada, y mejillas hinchadas. Lo que más sorprendió a Venelana, fue que el factor curativo de los Phoenix no haya arreglado eso aún, en cambio vio a Sakura tratando a los heridos con alguna especie de energía.

 ¿Qué era esa energía?

-Obaa-san está despierta, Oka-chan.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por la voz de una pequeña niña, su nieta Mito Uzumaki. 

-Ummm... hola.-Entonces tú eres Obaa-san. Oka-san nos contó a mi y a nii-san sobre ti. - la pequeña hinchó sus mejillas en señal de enfado, lo cual la hacía ver adorable en la mente de Venelana.Pero ¿Por qué estaba enfadada de todos modos?

-Este... ¿Mito-chan? - La niña dio un pequeño gruñido en respuesta. -¿Por qué estás enfadada? 

-¡Porque mamá siempre se pone triste cuando habla de ti! ¡Debiste tardar menos en venir! Mi mamá me hace feliz, las mamás hacen felices a sus hijas. ¡Hazla feliz! ¡Dattebaya!

Venelana parpadeó un par de veces y empezó a reír.

-¡Oye! ¡Deja de reír! ¡Dattebaya!

Después de unos segundos, la castaña dejó de reír y miró a su nieta.-Lo sé, Mito-chan, y espero hacer feliz a Rias de nuevo.

La pequeña parpadeó y luego dio una gran sonrisa a su abuela.
Ella sólo escuchó historias sobre su abuela, buenas y malas, pero aún así sabía que ella era buena de corazón.
Ella creía en lo que sus padres decían "La familia es aquella que decide serlo" y a pesar que no se conocían el pensamiento es lo que contaba.