¿Qué sacrificarías?

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La reunión con la empresa de Fat Gum no duro mucho tiempo, los pasantes a los que Bakugo a entrenado por años encontraron una posible ubicación de los distribuidores principales, siempre era difícil desenredar la telaraña de una red de distribución así, por más pequeña que fuera; aquella reunión le recordó a Kirishima sus días en preparatoria cuando rescataron a Eri, solo que ahora ellos están en la primera fila, a pesar de haber salvado a la ahora estudiante de preparatoria, no es un recuerdo agradable para el pelirrojo, después de todo habían perdido a un gran héroe ese día, y ahora sabiendo que trabajara junto a su novio la incomodidad que siempre trato de evitar vuelve, esa pequeña vocecita en su cerebro que pensó había dejado años atrás, esa preocupación de no ser lo suficientemente fuerte; esta misión podía parecer sencilla en el plan, pero siempre había algo que podía salir mal.


Bakugo tiene a sus propios pasantes, chicos que sabe le son totalmente leales y harían cualquier cosa para ayudarlo, por lo mucho que ha hecho por ellos, incluso sacrificarse a sí mismo, Bakugo también sabe eso, por ello los cuida un poco más cuando están en el campo. Katsuki sabe que esta rodeado de un montón de dementes que no dudarían en dar su vida por él, incluido su novio, por ello siempre trata de estar al frente de batalla, siempre trata de ser más ágil, más rápido, más fuerte, necesita serlo o perderá a alguien.



En el camino de vuelta a casa cada uno se pregunta cual es la mejor forma de protegerse en esa misión, inmersos en sus pensamientos ninguno dice nada hasta que atraviesan la puerta y el rubio suelta un largo y prolongado gruñido.

—Ahora entiendo porque te negabas a trabajar conmigo —suelta con cansancio quitándose los zapatos. —Puedes renunciar a verme todos los días, pero...

El pelirrojo suelta una pequeña risa, se sienta en la entrada y comienza a quitarse los zapatos. —Pero no a ti... Puedo sacrificar un par de cosas por ti, pero no a ti.

—No sería tu maldita culpa —ninguno de los dos se mira a pesar de estar frente al otro. —Pero te culparías, lo sé —Eijiro solo mueve lentamente sus hombros y le regala una media sonrisa. —¿Por qué saliste del closet frente a todo el mundo?

La pregunta sorprende a Kirishima, pues no parecía estar relacionada con la conversación

—Creí que algún niño podría verme y saber que puede ser un héroe.

—Ser un ejemplo o un símbolo a tu manera.

—Supongo —sabe que al rubio no le interesa ser seguido por la gente, el quiere ser el mejor y ayudar simplemente por que eso es en lo que cree, sabe que Bakugo vive a su propia manera, solo siguiendo sus convicciones.

—Yo no podría hacer eso —Katsuki decide mirar hacía arriba. —No me interesa ser un símbolo o alguna mierda así —ambos ya sabían eso. —Y odio ver como te tratan algunos malditos desgraciados solo por ser gay, pero... —Bakugo se muerde los labios. —Pero sé bien que sacrificaría por ti, hoy en la reunión lo noté... Y también sé que no te gustaría saberlo.

En lo profundo de Eijiro sabe que es aquello a lo que se refiere, pero quiere creer que se esta equivocando, debe preguntar, tiene que asegurarse —Si algo llega a pasarte en batalla yo...

—No es solo eso —pasa por su lado dirigiéndose a la habitación que ambos compartían, se detiene en la puerta de esta antes de entrar. —Mi vida es este trabajo, eso creí... Pero eso ya no es así, el trabajo dejo de ser lo primero, me da asco el saberlo, el notar el que ahora estoy tan atado a ti...

—¡¿No estas diciendo que podrías dejar de ser un héroe por mí o sí?!

Ahora es el rubio quien sube lentamente sus hombros y sonríe a medias —Te dije que no te gustaría la respuesta —y con esa conversación sin terminar Bakugo se adentra a la habitación.  



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Gracias por leer, disculpen los errores que esta cosa tiene, no se alimenten mal como yo.

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