La Historia de Zoffia

CAPITULO 7

Llegué justo a tiempo a la clase de atletismo, usualmente llego media hora temprano, pero como hoy me trajo mamá llegué justo a tiempo, un minuto más y me cierran la puerta.

Mis amigas ya estaban ahí, Emilia había elegido otro deporte, por lo tanto se perdía de todo el chisme y de la plática intensa que ya era parte de nuestra rutina los días de atletismo.

-Amiga, ¿te quedaste dormida, o qué pasó?- dice Georgia en cuanto me ve.

-Ja ja ja, que chistosa, amiga

-¿Ya viste quien llegó?- Gia apunta muy “discretamente” hacia donde se encuentra Tadeo.

-¿Quién, el entrenador?-

-Ay que chistosita eres Zoffia, no creas que no te vi echándole el ojo a Tadeo desde que ibas entrando a la pista-

-Saben muy bien que estoy en fase de superación en estos momentos, Tadeo no tarda en pedirle a Mariana que sea su novia, y si me siguen dando esperanzas ustedes dos, no van a saber ni qué hacer conmigo cuando eso pase.

-Ay amiga, ni quien te crea que estás en tu tal “fase de superación”- dice Georgia mientras me dé palmaditas en el hombro.

-Algún día va a conocer a la verdadera Zoffia y no va a encontrar la forma de disculparse por lo grosero que ha sido contigo- creo que a Gia le entró la inspiración.

-Pues espero que algún día pase eso, porque si no voy a llorar muchísimo. Y ya vámonos a correr que la maestra se va a enojar si nos ve aquí paradas platicando, no ven que ya nos odia demasiado.

Las tres amigas salimos a darle unas cuantas vueltas trotando a la pista como calentamiento, pero obviamente caminamos la mayoría y solo corremos cuando la maestra se digna a vernos.

-¡Amiga! Ahí viene Tadeo- Gia está más emocionada que yo.

-En tres, dos, uno- Cuenta Georgia y en ése momento pasa Thomas a nuestro lado corriendo como bala.

-Gia… ¡Ese era Thomas!, tienen que aprender a diferenciarlos de una vez por todas- no puedo aguantar la risa ni un momento más y empiezo a reír como loca.

-Zoffia, mientras te reías como bruta pasaron Tadeo, Mariana y Xime a nuestro lado, los tres te vieron de una forma un poco…nada amigable- Georgia siempre tratando de subirme el ánimo.

-Pues Thomas pasó también por aquí y hasta me preguntó que si porqué te estabas riendo, me dijo que tu risa era muy bonita- parece que Gia no sabe mentir ni un poco.

-No seas mentirosa, se te nota en la cara demasiado y aparte Thomas es súper tímido, no hablaría con alguien “extraño” a menos que fuera importante.

-Pues yo no sé amiga, pero creo que te enamoraste del gemelo equivocado- Georgia y sus consejos levanta ánimos.

-No creo, me gusta Tadeo y aunque yo no le guste a él, sé que es el indicado, Thomas nunca me ha gustado y nunca me va a gustar, supérenlo.

-Lo que tu sigas, Zoffia- dicen las dos al unísono.

Corrimos varias vueltas más e hicimos todos los ejercicios que dijo la maestra. Me encantan esos días en los que puedo ver a Tadeo en la mañana y por la tarde y aunque se pasó toda la clase hablando con Mariana y con Xime, sé que en algún punto de la tarde también me estaba viendo.

Esos maravillosos momentos en que volteas a ver a alguien y te das cuenta que él ya te está viendo y hacen conexión visual por unos cortos segundos, es lo mejor que me ha pasado y no creo que sea cosa del destino y que solo fuera una rara coincidencia, porque siempre que voy a atletismo pasa por lo menos una vez y son los mejores segundos de mi vida, cuando sé que Tadeo está pensando en mí.

-Amiga, ya es la milésima vez que te vas al espacio en el día- Gia está aplaudiendo enfrente de mi cara.

-¿En quién piensas, Zoffia?, para qué pregunto, si ya todos aquí sabemos la respuesta.

-Que chistosas amanecieron ustedes dos el día de hoy.

-Voltea discretamente a la derecha- dice Georgia con una sonrisa en la cara.

-¿Qué pasa? Le contesto un poco confusa.

-Tu solo voltea, te va a encantar.

Volteo discretamente y me doy cuenta de que Tadeo me está viendo, según él no me doy cuenta de lo que está haciendo, pero es demasiado obvio, tampoco sabe fingir una mirada. Uno de sus amigos se da cuenta de que mis amigas y yo lo estamos viendo y le da una palmada en el hombro para que deje de ver hacia dónde estamos y él capta rápidamente y se voltea.

-¿No que nunca en la vida te iba a hacer caso?- pregunta Georgia con un tono de burla.

-No se rían de mí, talvez y me estaba criticando, uno nunca sabe.

-No te hagas la que no se dio cuenta, tú misma viste que no te quitaba los ojos de vista.

-Pues espero que ya esté cambiando de opinión sobre mí y me vuelva a hablar muy pronto.

Cuando fue hora de salir, Miguel ya estaba en la puerta esperándome, así que me despedí rápido de mis amigas y me dirigí al carro.

-¡Zoffia, espera!- volteé a ver de quién era la voz y a que no adivinan quien era, Tadeo.

-¿Hola?- le contesto y agacho mi cabeza ya que mis mejillas no podrían estar más rojas.

-Hola, Miguel dijo que tenías un libro que podrías prestarme, ¿Me lo puedes mandar con él mañana a la escuela?-

-Libros, siempre los tontos libros- dijo más para mí misma.

-¿Perdón?- dice confundido.

-No nada, mañana te lo mando con él.

-Mil gracias Zoffia, ¿nos vemos luego?

-No vemos luego- me despido y corro al carro donde me está esperando Miguel.

Algún día lograré que Tadeo me hable de algo más que no sean libros y que se atreva a hacerlo enfrente de sus amigos.

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HOLAAAA!!!!

¿CÓMO ESTÁN? ¿QUÉ LES PARECIÓ EL CAPÍTULO?

ESPERO QUE LES ESTÉ GUSTANDO.

COEMENTEN Y VOTEN PLISSSSS

#TeamTADEO ó #TeamTHOMAS ……. Todo puede pasar jajajajajaja

BESOS XXXXX

….Elvy…éste va para ti (tqm, amiga) J