Lazo Roto ☆Sungwon ☆

008

¿Por qué? ¿Por qué ese alfa estaba tan concentrado en querer hablarle? Simplemente Jungwon no podía comprenderlo del todo, tal vez había visto su lazo, llevo su mano a la antigua marca, acariciándola levemente, sintiendo tristeza en el proceso, sabía que no tenía que sentirse de ese modo, su cachorro podía sufrir las consecuencias de sus emociones, por más que detestará sentirse así, no podía evitarlo.

¿Quién diría que los recuerdos compartidos se irían de inmediato gracias al alfa que lo había marcado y dejado de por medio? Jungwon pensaba que era importante para él, que nunca lo dejaría, que se pondría contento cuando se enterase de que tendrían un cachorro.

Detuvo sus caricias para pasar a apretar la zona, sus ojos se sentían picar, comenzando a calentarse levemente, y por fin sacando el primer sollozo por sus labios, dejo que las lagrimas salieran de por medio, las gotas que caían por sus lagrimales se deslizaban por su mejilla, humedeciéndola con su rastro.

Jungwon había sido fuerte, siempre lo había sido, desde preparatoria, aprendió a que no debía dejarse pisotear, aprendió que no todo podía ser color de rosa en su vida, pero, ¿era necesario que tuviera que pasar por un lazo roto? Había escuchado tanto de ellos, pensó que jamás lo viviría, y ahora allí estaba, sentado en su cama, con la mano sobre su antigua marca, la cual ya jamás será reforzada por el mismo alfa, su mano tembló ligeramente.

Dolía demasiado, recordar el pasado dolía demasiado, el querer olvidar a ese chico sería difícil para él, por más que sintiera que podía seguir con una sonrisa para disimular el dolor en su corazón, no podía hacerlo, había pasado poco tiempo, y sentía que estaría a punto de desplomarse en sus emociones, odia llorar, y más lo odia porque sabe que llora por ese alfa, ese tonto que lo traiciono de la peor forma, que de un momento a otro dejo de brindarle todo el amor que decía tenerle, ¿acaso el amor es falso? Tal vez lo sea, tal vez no debió enamorarse, tal vez era demasiado ciego al respecto de su concepto del amor, tal vez ni siquiera ese alfa le había brindado amor.

De nueva cuenta otro sollozo escapo de sus labios, dejo de tocar la unión de su cuello y hombro para pasar a abrazar su abdomen sin apretarlo.

—L-lo siento –menciono el voz baja–, perdón... no quiero dañarte, pero, me duele... aún me duele que él me haya dejado, perdona, cachorro.

(...)

—¿En verdad te atreviste a invitarlo a salir cuando dijiste que no lo harías porque apenas lo conoces?

—Sí...

—Sunghoon, ¿no crees qué puedas asustarlo? –Hoon era consciente de que la posibilidad de hacerlo era grande, pero valía la pena el riesgo.

Podía decirse que había tomado una decisión demasiado precipitada al invitarlo a salir, pero
no era una cita o algo parecido, lo había invitado para hablar un rato, aunque Sunghoon sabía que las preguntas que le haría, posiblemente sean incomodas para el omega, y claramente tenía que tener en cuenta un rechazo de por medio de parte de aquel bello muchacho.

—Solo hablaremos, no tiene nada de malo –se encogió levemente de hombros.

—Claro que lo tiene –hablo Jongseong–, no lo tomes como un tema que debe cerrarse, quieres enterarte del por qué de aquel lazo roto, ¿sabes qué podrías ser desechado de su lista si se lo preguntas?

—¿Lista? –pregunto Sunghoon ladeando un poco la cabeza.

Jongseong a veces creía que estaba con un tonto, Sunghoon a pesar de que podía tener a más de un omega a su disposición, nunca se había interesado
por alguno, siempre se la pasaba la mayoría del tiempo concentrado en sus estudios, no le interesaba salir a fiestas a divertirse, no le interesaba quedarse conversando más de dos horas con los demás, prefería estar en su cómoda casa mientras leía cualquier libro que le interesará, pero ahora verlo interesado en un omega, era tan extraño y fascinante que parecía que estaba viviendo una aventura ficticia con su amigo, Jongseong estaba feliz de que su amigo estuviera interesado en un omega, pero aún así quería golpearlo en la cabeza, pues Sunghoon parecía no conocer nada sobre relaciones.

—Sí, lista, ¿sabes? En otras circunstancias te diría que puedes hacer lo que se te venga en gana, pero esto es distinto.

—¿Por qué necesariamente tiene que ser distinto? –frunció levemente el ceño, a veces Jongseong es toda una caja de misterios ocultos, y parece que cree que él es adivino y que puede leer cada uno de sus pensamientos.

—Solo escucha, ¿a ti te molestaría si se meten en tu vida privada? –Sunghoon asintió–. Pues será lo mismo con el omega, no sabes las razones del lazo roto que tiene, no sabes nada de su pasado, y el atacarlo con preguntas sobre eso, tal vez lo altere.

—Descuida, seré lo más precavido posible.

—Eso espero, porque quiero que mi amigo tenga puntos para que puedas brindarle cortejo al omega.

¿Cortejo?

Eso ahora sonaba mucho mejor que antes, Sunghoon había sentido un agradable sabor de boca al
escuchar esa palabra, se pregunto si acaso se sentiría aún mejor al pedirle cortejo al omega, Yang
Jungwon, lindo nombre es igual a linda persona, ¿no es así? Y Sunghoon sabía que con solo verlo, podía ver a alguien precioso, y no solo por fuera, si no que también por dentro.