Lazo Roto ☆Sungwon ☆

Epílogo

—Jeongin, será mejor que te saques eso de la boca antes de que venga Jungwon -el bebé solo miro por unos segundos a Jongseong y siguió con lo suyo, definitivamente ese bloque no sabía a nada, pero quizás si seguía lamiéndolo y tratando de morderlo con sus pocos dientes, tal vez logre conseguir algún sabor en especial.

Jongseong soltó un suspiro, miro hacía Jungwon quien se dedicaba a tomarle una fotografía al pequeño y después miro a Sunghoon quien estaba bebiendo un poco de agua.

—Sunghoon, quitale eso, no quiero que se lastime - dijo Jungwon mientras revisaba que la fotografía haya salido como él quería.

—Lo que diga, capitán -recibió un pequeño golpe de parte del omega-. ¡Soldado herido!

—¡Ya, Sunghoon! -reclamo Jungwon, pero la verdad era que le había causado gracia la actitud de su alfa.

Jongseong estaba feliz por esos dos, hace unos meses Jungwon por fin había decidido mudarse con Sunghoon y al fin poder estar juntos cuidando del pequeño Jeongin que la mayoría del tiempo se la pasaba mordiendo casi todo lo que estaba a su alcance.

Sunghoon todavía tenía que estudiar otro año más de carrera mientras que Jungwon había terminado ya con sus propios estudios, realizaba algunos trabajos por Internet, mientras que Sunghoon había conseguido un empleo para poder mantener a su pequeña familia.

Habían tardado un poco, y es que Jungwon no
estaba seguro de querer volver a ser marcado, pero Sunghoon le esperaría el tiempo que quisiese, eso
no era un problema, finalmente Jungwon le había pedido que lo marcará, después de todo le tiene mucho afecto a Sunghoon y le ha demostrado durante ya casi dos años lo mucho que lo quiere y como se puede hacer responsable ante cualquier adversidad.

—Parecen una pareja de casados -menciono Jongseong a lo que tanto Jungwon como Sunghoon le miraron sonrientes-. ¿Cuándo será la boda? Quiero la primer invitación.

—Cuando Jeongin entre a la universidad -menciono Jungwon a lo que Sunghoon mostró dolor por la espera que tendría que pasar.

—Y yo que pensé que pronto te llamaría mi esposo - menciono Sunghoon soltando un suspiro-, bueno, no importa, esperare el tiempo que quieras, porque te amo.

—Demasiada azúcar -canturreo Jongseong incorporándose para ir hacía Jeongin y revolver el poco cabello en su cabecita-, me tengo que ir, los veo después.

—¿Otra cita con el beta de la papelería? -pregunto Sunghoon a lo que Jungwon se vio sorprendido.

—¡Era secreto, Hoon! -Jongseong se mostró levemente molesto-. Aún así no voy a ir con él, pero tal vez lo lleve a su casa.

—Es bueno ver que al fin intentes algo serio con alguien.

Si, muy bueno.

Cuando Jongseong se retiro, Jungwon fue hacía Sunghoon para abrazarlo rodeando su cuello con sus brazos y colocando su cabeza sobre el pecho del alfa.

—¿Pasa algo, Jungwonie?

—Solo quiero estar así -sonrió-, y no te haré esperar tanto, créeme que me gustaría casarme contigo.

—¿Para qué hacerlo? Tu me amas, y yo también lo hago, no necesitamos un registro y una alianza para demostrarlo.

—Aún así hay que hacerlo más legal, ¿no crees?

—Está bien, todo sea por verte feliz, mi hermoso omega -deposito un beso sobre los cabellos del omega.

—Gracias por todo, Sunghoon, te amo.

—Gracias a ti por aparecer en mi vida, Jungwon, también te amo.

Jeongin miraba a sus padres, le gusta verlos juntos y sonrientes, pero él también quiere ser parte de ese abrazo, no quiere quedarse solo, gateo despacio hacía ellos hasta quedar cerca de las piernas de ambos, llevó sus dos manos hacía la tela de sus pantalones, los agarro y jalo para llamar la atención de ambos.

Jungwon sonrió enternecido por las acciones del pequeño y sin dudarlo se soltó del abrazo para poder agacharse y cargar a su bebé en sus brazos.

—¿Quieres unirte al abrazo, pequeño? -pregunto Jungwon mirando al cachorro.

—Claro que quiere, ¿no es así, ternura?

Sin más, Sunghoon abrazo a Jungwon dejando espacio para Jeongin entre sus brazos, tanto omega como alfa juntaron sus cabezas y miraron al pequeño que estaba feliz de poder estar entre las personas más importantes de su vida.

Fin.

Gracias por leer!