¡Feliz Navidad Anne!

Como Conejos

Sin duda alguna era aquel un maravilloso día que saluda con un cálido resplandor que acaricia su pelaje rizado y esponjoso. Sus orejas punteaguadas se sacuden ante una repentina brisa y boztesando estira las garras y se vuelve a acomodar en un pecheño estrecho entre la hierba alta de un campo de flores.

Un nuevo dia en la vida de Anne y una nueva oportunidad para seguir durmiendo.

Pero sus sueños gatunos son interrumpidos bruscamente, sin medir consecuencia salta alerta ante el estruendo de los arbustos de donde emerge una figura que asecha. Una gatita juguetona brinca sobre su cuerpo y con sus garras afiladas se aferra a su cuello, sin obcion por temor a no dañarse rueda al piso y deja que aquella felina le muerda el cuello.

Pero la gatita de pelo negro azabache entiende rapidamente y doblando las orejitas suelta a la minina y lame cariñosamente. Anne ronronea y sus patas extiende abrazando a la gatita de nombre Marcy. Pero marcy se distrae salta lejos curiosa por coger una mariposa que pasa volando, Anne vuelve a bostezar y rueda un poco para que una rama salga de su costado, le molesta sin embargo no logra alejarse demasiado, está aburrida y así con sus patas delanteras rasga la hierba y mete su cabeza en ellas esperando pronto volver a dormir.

Marcy intenta por sus medios alcanzar la mariposa, brinca por aquí y por allá, está tan distraida persiguiendola que no se da cuenta que se ha alejado de Anne. Su enfoque por fin se pierde y mira alrededor un poco asustada, el olor es diferente allí aun así si todo seguía siendo bonito no se sentia segura por nada.

Ella retrocedió moviéndose mas cerca del suelo, pero cuando giró una gata rojiza le maullo feroz. Aquella erizo su pelaje haciendo que ñareciera mas grande de los que realmente es, sus cola se agitaba violentamente mientras avanzaba hacia la indefenza y asustada Marcy.

Marcy por instinto también maullo y se erizo, pero era insignificante comparada con la desconocida. La gata rojiza se abalanzó dispuesta a echar a la intrusa de su territorio, Marcy se tiro al suelo y levantó todas sus patas en defenza inútil. Zas

La gata maullo adolorida cayendo a un lado de Marcy y tan pronto salió despavorida hacia los matorrales. Marcy abrió los ojos confundida pero su miedo no desapareció viendo como una nueva felina se alzaba sobre ella.

La gata morena con toques blancos le miraba allí como si nada, Marcy maullo suplicante pero aquella se sentó y lamio su pata derecha para luego frotarsela en la cara. Nada más hizo durante unos minutos hasta que bostezo y se alejó un poco para luego echarse en la hierba.