†Capítulo 1†

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Una niña cayo al suelo vomitando lo que habia almorzado hace apenas minutos atrás.

—levántate -exigió el hombre mirando a la niña quien se encontraba de rodillas en el suelo con todo su cuerpo temblando- ¡si no puedes conmigo, olvidate de acabar con los villanos!

—¡Enji! -gritó la mujer alvina, con su vientre de ocho meses y medio se acerco para tomar a su hija en brazos- ¡ya es suficiente! Dejala descansar...

—¡Tsk! -el hombre solo se dio media vuelta para irse a otra habitación dejando a la mujer tratando de consolar a su hija quien habia roto en llanto-

—ya, ya pequeña, mamá te protegerá y no te separaras de mi hoy...-dijo cargandola para con un pañuelo limpiarle la boca y después el suelo-

—mamá, ¿_____ estará bien? -pregunto un niño alvino con manchas rojas, el mayor de los hermanos-

—lo va a estar Touya -se arrodillo para acariciaroe la cabeza y después llegaron los otros 2 para darse un abrazo tratando de consolar a la alvina menor-

Y así fue sucesivamente, hasta el día que nació Shoto, Enji se entusiasmo demasiado al tener al pequeño bebé en sus brazos, el era el perfecto, su producto perfecto, un golpe muy duro para los demás, especialmente para el mayor y para la mas joven, pero esta ultima le agarro un cariño cuando lo vio en los brazos de su madre, era tan adorable.

—Shoto, no te preocupes, tu hermana mayor suempre va a cuidarte -decía mirando con ternura a su hermano menor, su madre veía esa escena con demasiada ternura, los otros dos alvinos también se unieron, menos Touya-

—_____, ¿podemos hablar un rato afuera?

—claro que si, Touya-nii -se levanto y lo siguio, ella admiraba mucho a su hermano mayor y deseaba que su poder llegara a igual a las llamas de el- ¿que sucede?

—_____, voy a entrenar en la montaña de allá, ¡quiero demostrarle a papá lo que puedo llegar a ser! -se mostraba decidido mirando aquella montaña- y te tengo a ti para que me enfríes si lo necesito, ese es nuestro secreto -dijo sabiendo el segundo don de su hermana, hielo-

—pero aún no te has recuperado de tus últimas cicatrices -mirando los vendajes nuevos en el brazo de su hermano- Touya-nii, me preocupas y necesito que estes bien -le sujeto una mano-

—pero _____ yo enserio necesi- -fue interrumpido por un grito-

—¡_____, es hora de tu entrenamiento! -su padre se dirigia a ellos, Touya abrazo a su hermana en modo de protección, pero fue empujado y tirado al piso por el mayor- ¡no interfieras!

—¡Touya-nii! -la pequeña trato de ayudarlo, pero fue agarrada del cabello para ser tironeada hacia tras, pasando enfrente del resto de los alvinos.

Y al cabo de unos minutos, al llegar al lugar de entrenamiento, la pequeña volvio a sentir como golpeaban su estomago y la tiraban al piso, se levabtaba y usaba su don, unas llamas  blancas que cada vez eran más fuertes, al cabo de unos minutos, su padre la tenia colgando de la cara, _____ trataba desesperadamente de soltarse, tocando el brazo de su padre, hasta que salio un trozo enorme de hielo haciendo que el mayor la soltara de golpe.

—no puede ser...-Enji mirando su brazo un poco congelado, miro a su hija quien trataba de recuperarse y la cargo- ¡eres perfecta! ¡tienes el hielo! ¡tienes el hielo y el fuego!

La pequeña no se alegro, al contrario, tembló al escucharlo, Touya quien habia escuchado también lo hizo, eso quería decir, que iba a entrenarla hasta romperle los huesos, volvió a temblar al escuchar su nombre.

—¡Touya! ¡es tu turno de entrenar hijo! ¡veamos que tan potentes llegan a ser esas llamas!

Y al anochecer, como siempre, _____ poniéndole nuevos vendajes en el cuello de su hermano.

La hija de Endeavor [Hawks/Keigo Takami]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora