🍉 ᴀ̆̈ s̆̈ᴍ̆̈ᴀ̆̈ʟ̆̈ʟ̆̈ ᴘ̆̈ɪ̆̈ᴇ̆̈ᴄ̆̈ᴇ̆̈ ᴏ̆̈ғ̆̈ ɢ̆̈ᴏ̆̈ʟ̆̈ᴅ̆̈ 🍓

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Observaba su habitación, comprobando que todo se encontraba en orden, tomó su mochila negra que era adornada por algunos parches que fueron cosidos después de algun desgarre o uno que otro pin. Con cuidado paso uno de los tirantes por su brazo hasta su hombro e intentando no hacer ruido abrió la ventana en la que pensaba salir.

Pero antes de poder hacer alguna cosa su puerta fue abierta de un momento a otro, asustandolo por haber sido descubierto.

—Gustabo García, ¿me puede explicar qué demonios esta pensando hacer?

El rubio observó con cierta vergüenza al mayor, pero eso no le impidió poder responderle aunque sea de la manera más absurda. —¿Quién? ¿yo?

—¿Acaso hay otro "Gustabo García" en este lugar?

Resignado, el joven adolescente dejó caer su mochila al piso y se sentó en la cama, observando como la habitación era alumbrada por la luz artificial del techo mientras su tutor se adentraba y se colocaba frente a él con los brazos cruzados en busca de una explicación. —¿Y bien?

—Solo quería ir con Segis, no era nada malo.

—Claro, y por eso te escabullias por la ventana, ¿me equivoco?

—¡Nunca me dejas salir, parezco prisionero en esta casa! —El joven se hizo hacía atrás, haciendo que su espalda chocara y se recargara en la cabecera y abrazara una de sus almohadas.

—Sabes que no es así, a parte, porque saldrías a esta hora de la noche, es peligroso.

—Pero todos lo hacen, yo también me quiero divertir, y si no me dejas es por Segis.

—Claro, porque es un joven mayor que tú y ya ha estado en problemas por delitos menores, es una mala influencia para ti.

—Solo son dos años.

El menor desvío la mirada fijandola en un punto muerto, estaba cansado de aquellas discusiones, entendía que Viktor se preocupara por él, pero el ya no era un niño, y tampoco era cualquiera, fue criado por un montón de policias y mecánicos de extraño comportamiento. Sabía defenderse y cuidarse, Viktor no podía protegerlo de todo en todo el tiempo.

El ruso agotado, decidió sentarse a un lado del rubio, dejando espacio para no abrumarlo o asustarlo.
—Gustabo, sabes que solo estoy preocupado, no quiero que sufras y sé que eso es difícil, no puedo protegerte siempre. —Bajó la mirada, pero sentía aquella celeste mirada fija en su persona.

—Se que quieres protegerme, y yo tampoco quiero preocuparte, pero a veces eres demaciado sobreprotector.

—Y tú demaciado escandaloso.

Ambos rieron, obteniendo nuevamente contacto visual, después de todo eran família, discutir solo era algo del día a día, ya sea por algo importante o hasta solo elegir el que compraran o si esta mejor la chaqueta roja o blanca.

Gustabo dejó de lado la almohada que abrazaba y se acercó al mayor para abrazarlo, el cual correspondió el dicho abrazo mientras acariciaba su cabello; Gustabo no era alguien que le gustase el tener contacto físico, realmente nunca lo fue y siempre era muy selectivo sobre a quien darle dichoso privilegio, pero cualquiera necesita un abrazo cuando esta débil, ¿no?.

—No puedo prometer que no voy a hacer nada que te preocupe, así soy, y lamento serlo, pero si te puedo prometer que si necesito ayuda te lo diré.

—No necesitas prometerme nada Gustabo, ni cambiar tu forma de ser, eres perfecto, confió en ti, solo quiero que me dejes de mentir o te escapes, eso no dice nada bueno de tus amigos o de ti, ¿cómo puedo confiar en alguien que me miente o se escapa? Sólo quiero que seas honesto conmigo aunque sea en eso.

—Joder, cuanta cantidad de texto, normal que papu te este callando a cada rato o que Horacio este haciendo resúmenes de lo que dices.

—Y es por eso que hoy no irás a ninguna parte, así que ve diciendoles a tus amigos que no vas a ir. —El mayor se separó del abrazo y se levantó de la cama para finalmente dirigirse hacia la puerta. —Descanza Gus.

Una vez el ruso mayor cerró la puerta llendose a su habitación propia, el joven rubio se dejó caer en su cama, viendo el techo sin ponerle mucha atención, la plática de ese día le hizo pensar en muchas cosas, lo que menos quería es que Viktor dejara de confiar en él, era su única familia, si bien, al llegar a la ciudad encontró a más personas en que apoyarse, Viktor era la única persona que le llevaba a sus orígenes, más que su país de origen, a su familia.

Haciendo la cabeza de lado, observó en su mesa de noche dos fotos, una en la que era el bebé junto a una mujer que se supone era su amada madre, y otra donde alrededor de seis años, se encontraba con Viktor, cada uno con una sonrisa. Sonrió al ver aquellas imágenes, moviendo ahora su cuerpo para aquel lado para más comodidad.

—Me cuidaste cuando más indefenso estaba, seguramente debes estar feliz de eso, ¿no mamá? De que aún si no pude estar contigo, una buena persona me pudo criar, gracias a los dos.

Dejandose llevar por el sueño, sus ojos se cerraron, probablemente se regañaria a sí mismo por haberse dejado llevar por el sueño y no haberse puesto algo más cómodo antes de dormir, pero de eso ya se encargaría el Gustabo del futuro en la mañana siguiente.

Finalmente actualicé esto :D

Como dije anteriormente, estos son cortos de un mismo au, por lo que no tiene orden cronológico, pero aquí tenemos a un Gus adolescente y un Viktor modo padre, quería profundizar un poco en la relación de Vik y Gus, porque después de todo son los importantes acá Ajsjs

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