Clarissa
—No estoy segura sobre esto Lorelai— le digo a mi amiga, ella es la hija de mis jefes, pero también una amiga muy cercana, por lo que cuando le conté sobre la segunda cita con Thomas ella se auto invito a mi departamento para ser ella quien me preparará para la cita.
—Pero si estas preciosa, cariño si él no se da cuenta pues es un idiota—dice mientras se coloca detrás de mí y nos vemos por el espejo frente a nosotras.
Lorelai tiene razón me veo bien, bueno más que bien, pero siento que es demasiado. Vuelvo a ver mi reflejo en el espejo y repaso como me veo mi cabello castaño esta suelto, pero tengo ondas en las puntas, mis ojos cafés tiene alrededor un maquillaje negro muy intenso que los hace ver más oscuros de lo que ya son, mi nariz se ve más fina por el truco de maquillaje que hizo Lorelai, paso mi vista por mis labios, siempre he sabido que tengo la boca grande, por favor no piensen en cosas sexuales, pero mis labios son muy gruesos y ahora con este labial rojo mate se ven el doble de gruesos, sigo bajando la vista y miro el bonito vestido negro que se pega muy bien a las curvas de mi cintura y luego cae estilo campana, no es muy largo me llega un poco más arriba de las rodillas y para rematar todo el look llevo unos tacones también negros demasiado altos para mi gusto, pero hacen le dan el toque final al look. Aun así, sigo pensando que es demasiado.
—No dije que no me viera bien, porque lo admito que hace mucho no me arreglaba tanto y acepto que los resultados son fantásticos, pero siento que es demasiado para una segunda cita o más bien para esta cita—suelto un largo suspiro cuando termino de hablar. Luego de mi pequeña charla con Charity le envíe un mensaje a Thomas aceptando la cena, pero ahora que me miro en el espejo y estoy tan producida siento que voy a dar el mensaje equivocado y es que después de esa charla me platee muchas cosas y tome una decisión sobre qué hacer.
—Nunca es demasiado, linda y el restaurante al que te va a llevar es muy elegante debes estar a la altura de eso y además debiste practicar como decir lo que vas a pedir o investigar lo que vas a pedir— dice mientras se aplica labial, pero no entiendo de que habla y antes de preguntarle vuelve a hablar. —. Dime la verdad Clarissa ¿Cuál es el verdadero problema? —dejo ir otro largo suspiro y me siento en mi cama.
—No quiero dar el mensaje equivocado—admito.
Lorelai me mira con una ceja arriba y vuelve a hablar: —¿A qué te refieres con mensaje equivocado?
—Thomas hablo sobre una segunda oportunidad para el amor en nuestra primera cita y siento que va muy rápido, además recién hace seis meses que se divorció y siento que aún no supera eso y no se siento que va muy rápido—acepto que Thomas me gusta, me parece un hombre fenomenal y en nuestra primera cita la pasamos bien, tuvimos química y quede feliz luego de ella, pero luego de la emoción inicial comencé a plantearme muchas cosas y como dije todos tenemos un pasado, pero no todos lo tienen superado y creo que Thomas es de esas personas—. No quiero adelantarme, no quiero apresurar nada porque ya una vez lo hice y eso no acabo nada bien y aunque dicen que vivo en el pasado no es así, me ha costado, pero mi pasado cada día lo supero más, hay días que son más difíciles que otros lo admito, pero he avanzado. El que ahora hable sobre mi relación con Evan no significa que no lo haya superado significa que aprendí de mis errores y no quiero volverlos a cometer—digo cansada de que siempre que menciono a Evan todos piensen que aun sigo estancada.
—¡Hey! Tranquila—se acerca a mí y me abraza— entiendo lo que quieres decir y si yo te entiendo estoy segura de que él lo hará solo habla con él—asiento y me dejo abrazar un rato más. Tiene razón Thomas no es adivino si no le digo mis sentimientos él no los sabrá y para que entienda mi decisión primero debe saber lo que siento.
***
Escucho el timbre de mi departamento, tomo mi bolso y salgo del departamento. Cuando llego abajo un Thomas con traje me recibe con una hermosa sonrisa que me hace sentir cosas locas dentro de mí, pero no es el momento aún es muy pronto para estos sentimientos. La verdad que el traje le queda divino parece hasta hecho a la medida por la forma en la que se ajusta a su cuerpo.
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Mi segunda oportunidad
RomanceClarissa Wood 26 años Camarera Clarissa lleva casi dos años sobria, hace un año salió de rehabilitación y poco a poco ha vuelto al mundo ahora tiene un trabajo que, aunque no es muy renumerado le ayuda a sobrevivir, tiene un pequeño departamento...