Capítulo 11

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He cumplido la meta, al fin estoy rumbo a Inglaterra, anhelaba con todo mi ser poder viajar, poder inspirarme y poder recordar esas dos semanas tan intensas que viví con Shine... aun cuando siento ese sabor agridulce por dejar a Travis en casa.

He traído todas las cartas de Shine y he traído mi diario de viaje para documentar, para escribir e inspirar canciones para ella.

Inglaterra es una tierra soñada y mi estadía será aún más cómoda por la ayuda que Andy consiguió, tener un pequeño departamento y un auto, para poder desenvolverme con total libertad. Aunque nada esté 100% solucionado, el sello y Andy han sido muy generosos conmigo y eso lo agradezco de maneras que no puedo expresar.

– Buenas tardes señorita Smith, aquí están las llaves de su loft y de su auto – dice un sujeto de mediana estatura que me esperaba en el aeropuerto – Muchas gracias – sonrío

– La señorita Torres ha dejado algunas cosas en su loft para hacer más amena su estadía, espero que disfrute mucho sus días en esta bella ciudad – sonrío aún más al escuchar sus palabras – La guío a su auto – toma mi maleta y me guía

– Muchas gracias por todo, adiós – me despido con la mano y me subo al auto

Recorrer Londres por segunda vez pero desde esta perspectiva es increíble, lleno de aire nuevo que llena mis pulmones de inspiración y melancolía.

Han pasado 8 meses desde que Shine se fue y aún sigue siendo difícil, extraño su sonrisa y su entusiasmo, como me gustaría tenerla aquí al lado, parloteando de todo lo que ama estar aquí, puedo imaginármela.

Cuando llego a la dirección que me dio Andy y entro al "loft" que me dijo, quedo asombrada de lo hermoso y acogedor que es, no es un lugar tan grande pero es espacioso y está lleno de detalles. Sobre la mesita de centro hay una caja llena de rosas y una nota:

Querida Clary:

Con todo nuestro amor para tu viaje de inspiración

Colours records

Me pongo a reír emocionada y agradecida de esto, amo las rosas y nunca había recibido una caja de ellas y chocolates en toda mi vida.

Una vez que instale algunas de mis cosas decido salir a pie y buscar un café para reponer mi cansancio y para sentir su aroma que me transporta.

Caminar se siente bien y respirar se siente bien, tan puro, tan sofisticado, tan único.

El café más cercano estaba a una manzana del departamento, era un lugar pintoresco y atractivo, sin mencionar ese olor a café que me hizo entrar volando a por el.

– Buenas tardes, ¿qué puedo servirte?

– Hola, quiero un expresso por favor – la chica me sonríe; pago mi anhelado café

– Puedes esperar en una de las mesas y te llevaré tu café.

– Genial, muchas gracias.

Me siento feliz en la mesita de afuera del café y saco mi libreta y mi celular para empezar con este viaje de inspiración. Mi café llega pasado los minutos y por un minuto me siento en casa, con Shine, tomando café en nuestra habitación a escondidas; Shine por sus medicamentos no podía tomarlo, pero a veces nos gustaba romper las reglas y sólo ser nosotras.

Logré escribir algunas líneas, reírme recordando cosas y saborear ese exquisito expresso. El comienzo de este viaje está siendo increíble.

Escucho un revoloteo frente al café donde hay un restaurante que se ve fino. Escucho gritos, revoloteo y a mucha gente acercándose. Mi paz del momento se interrumpe y en un solo segundo toda mi atención está frente a mi, en el revoloteo. Es cuando comprendo tanto griterío, veo a un hombre alto, veo un cabello alborotado y unos ojos verdes, el revoloteo era por Kyle que intentaba entrar al restaurante a comer. Por alguna extraña razón sentí alegria de verlo, ver una cara familiar y sin poder procesarlo comencé a caminar a toda prisa hasta el ventanal del restaurante, pasando por encima de todos los paparazzis y lo veo, ahí está, con cara agotada, ahí está su ser, ese ser que pensé que no volvería a ver.

Shine (P. S: de vuelta a casa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora