Capítulo 9: '¿Donde esta mi hijo?'

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Cuando desperté, después de tres días en esa maldita suite, usé mis encantos para manejar al badboy

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Cuando desperté, después de tres días en esa maldita suite, usé mis encantos para manejar al badboy.

Tuve que hacerlo, no puedes manejar a hombres como él apelando a su piedad... Por qué en primer lugar, no la tienen, cariño.

—Quiero tres de estas cosas brillantes, dos autos, una mucama que se llame Berta y dos guardias...

Izal asintió con la cabeza y una sonrisa estúpida.

—Algo más futura señora Escalante —se burló.

Si, que te vayas a la mierda.

Lo miré molesta y negué con la cabeza.

—Ya veremos... por mientras solo te permito verlo.

Me gire en mi posición.

Tuve que llegar a cierto acuerdo, al menos esto me permite ganar tiempo. ¿Qué para que busco ganar tiempo?

Jejeje, eso ni yo misma lo sé, estoy demasiado ansiosa por estar demasiado tiempo separada de mi bebe. Y a este ritmo no conseguiré volver con el rápidamente.

Me encontraba con una bata de encaje en color rosa, totalmente trasparente, era lo mismo que estar desnuda, y era la única prenda que el bastardo me permitió usar. Y solo me hizo sentir asqueada.

Ahora mismo solo sé que... ¡Quiero matarlo!

— ¡Quiero las malditas píldoras! —incapaz de soportarlo más, grite.

—Te las daré, si se lo pides amablemente a tu hombre —dijo guiñándome el ojo.

No me parece para nada atractivo. Honestamente después de follármelo me aburrieron enormemente sus métodos bruscos.

Chasqueé los dientes y dije—: No eres mi hombre, dame las píldoras que no quiero quedar embarazada de ti, otra vez...

Al cabo de los dos primeros días, yo exigí las malditas píldoras anticonceptivas, incluso el día después de follar exigí la píldora del día siguiente... ¿Pero que recibí en cambio? Exacto, nada. Solo más sesiones de coito que... bueno, no estuvo mal.

Aun así, si estuviera en frente de un juez no dudaría un segundo en acusarlo de abuso. Pero por supuesto tal juzgado en este mundo es imposible... estamos en una novela de ficción, una novela donde él terminara con la protagonista de todas formas.

Esta faceta de querer ser un «hombre responsable» es transitoria, me consolé después de pensar de ese modo.

—Mmm... —examinó con la mirada mi bata y sus ojos se iluminaron en alguna idea indecente—. Antes podríamos salir a algún lado...

—Izal, estoy empezando a creer que estoy siendo secuestrada... y créeme, no quieres enfadar a mis amigos —advertí con seriedad.

—Zaldibar Ovil, Bollack Tiana... —tras mencionarlos de forma despectiva, se ganó toda mi atención. ¿Cómo es que conoce sus apellidos, cuando ni siquiera yo lo sabía? —. Son bastante famosos en el mundo oscuro, en especial el club del que vinieron...

Embarazada del Bad BoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora