Capítulo 17: Alergia al marisco

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        Al día siguiente, Yang Yang llevó a Shen Xiuzhu a su casa en la costa de Jiangnan.

        La casa estaba un poco vacía, pero estaba bien cuidada, con estanterías llenas de plantas en maceta, muchas flores en la terraza, e incluso una habitación que se había transformado en una sala de jardín.

        Shen Xiuzhu se acercó al exterior de la sala de jardín y miró el interior a través del cristal. "Realmente hay una sala de jardín, es muy bonita".

        Miró la sala del jardín y dijo despreocupadamente: "Xu Chengyan lo hizo".

        "¿Él hizo eso?" Shen Xiuzhu se sorprendió ligeramente y volvió a sonreír: "También es bastante bonito".

        Shen Xiuzhu sonrió, se acercó a la puerta, la empujó y entró.

        El aroma de las flores se esparció, y cuando Shen Xiuzhu lo olió, bajó la vista de repente y tosió violentamente, sujetando una mano en la puerta y cubriendo su pecho con fuerza.

        La mirada de Shen Xiuzhu seguía siendo algo dolorosa, como si no pudiera recuperar el aliento.

        Reaccionó rápidamente y ayudó a Shen Xiuzhu a sentarse en el sofá, y luego sacó hábilmente una caja de medicamentos del bolsillo de su chaqueta.

        Shen Xiuzhu se tomó la medicina y sólo entonces su rostro se alivió, diciendo con cierta vergüenza: "Lo siento, estoy un poco incómodo ......"

        "Shen Xiuzhu todavía parecía un poco débil.

        Sin embargo, Yang Yang echó un vistazo a la sala del jardín y frunció el ceño: "¿Alergia al polen?".

        "No lo sé". Shen Xiuzhu sacudió la cabeza y sonrió: "Me parecen bien las plantas en maceta y otras cosas, pero quizá sea porque hay más flores en la sala del jardín, así que no lo soporto".

        He Yang: "Despejaré la sala del jardín".

        "Gracias". Shen Xiuzhu entrecerró los ojos y sonrió, se levantó de nuevo y dijo: "Iré a la otra habitación".

        Sin embargo, Yang detuvo el movimiento de Shen Xiuzhu y dijo lentamente: "Todavía hay plantas en macetas en las otras habitaciones".

        Dijo: "Te traeré de vuelta cuando todas las plantas en maceta hayan sido limpiadas".

        "De acuerdo".

        Después de enviar a Shen Xiuzhu de vuelta al hotel, regresó a su piso.

        Cuando volvió, la casa estaba tranquila, como si no hubiera nadie.

        Cuando llegó a su habitación, vio una figura sentada en la terraza.

        El sol estaba fuera y Xu Chengyan estaba sentado solo en la terraza, mirando la vista del río, ligeramente perdido en sus pensamientos.

        La costa de Jiangnan está en la orilla opuesta del río, y desde este ángulo se puede ver el barrio rico.

        Miró a la figura de la terraza y dijo con indiferencia: "Ordena las plantas de la costa de Jiangnan para la semana que viene, Shen Xiuzhu es un poco alérgico".

        Xu Chengyan miró  hacía el río y quiso decir algo, pero al final no dijo nada.

        Sólo después de un largo rato dejó escapar una sílaba con cierta dificultad: "Vale".

Tras la falsa muerte del sustitutoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora