Para la mayoría de personas la felicidad consiste en el dinero. Ese pequeño he insignificante trozo de papel que te otorga poder y prestigio sobre las demás personas
Para otros el origen de la felicidad se enfoca en la cantidad de logros o triunfos que acumulen durante su vida; mientras más arriba te coloques de la cima y sobrepases a más personas, mayor será tu satisfacción y crecerá su ego y placer
Para otra pequeña y podría decir insignificante cantidad de gente su felicidad radica en la compañía y calidez de la familia y amigos. Formar vínculos con las personas que amas y que son capaces de regresar de igual manera ese cariño
Pero esto último no lo entiendo. No soy capaz de entenderlo muy bien, porque a pesar detener tanto padre como madre nunca hemos tenido una grata relación ni conexión que la mayoría si
¿Y amigos? Si he creado lazos con gente muy buena y amable que me han acompañado en muchos momentos significantes de mi vida, pero no soy bueno para abrir o expresar lo que de verdad siento hacía los demás como me gustaría
Para mi, el verdadero motivo de mi alegría consiste de algo mucho más simple. Mi felicidad es Nagisa. Aquel chico de cabello celeste y ojos tan brillantes y hermosos como el amplio cielo que admiro diario
Cuando salimos de secundaria tomamos caminos diferentes respecto a los estudios, pero eso no fue obstáculo para seguir frecuentándonos
Pasábamos las tardes en su casa o a veces en la mía, solo comiendo nuestro propio peso en chucherías, jugando videojuegos o platicando de nuestros más profundos miedos y sueños para futuro hasta altas horas de la madrugada. Solo nos dedicábamos a disfrutar de la compañía del otro que tanto necesitábamos
Todas nuestras salidas y momentos juntos provocaron que poco a poco surgieran sentimientos en lo más profundo de mi que me negué a apreciar o aceptar por un tiempo
No sabía con exactitud que era esa reconfortante sensación que comenzaba en mi pecho y bajaba hasta mi estomago, tampoco sabía como explicarlo pero, el hecho de estar junto a él y mirar su amplia sonrisa, esa sonrisa tan radiante que emana alegría a cualquiera. Producía en mi un deseo inexplicable de tomarlo entre mis brazos, mirarlo directamente a sus zafiros y besarlo hasta saciar mi hambre y necesidad
Sin que lo esperase, terminé aceptándolo. Me había enamorado de Nagisa...
El amor es un sentimiento tan bello que a cualquiera le gustaría experimentar, pero... también puede llegar a producir un profundo miedo
Miedo al abandono o soledad; algo que he vivido en carne propia durante años por la poca presencia de mis padres en mi vida
Miedo a la traición; esa latente preocupación de abrir tu corazón y declarar a los cuatro vientos tu sentir, para descubrir que la otra persona solo se bufó de ti
Miedo al rechazo; el transmitir tus verdaderos sentimientos y que ese amor tan grande que ocultas en tu pecho no sea reciproco
Estar enamorado es algo muy bello, pero como todo en la vida, no es tan sencillo ya que desbloquea nuevas inseguridades que nunca había considerado
El amor es un arma de doble filo
Después de muchas noches en vela por no poder calmar los iracundos pensamientos que me carcomían vivo, decidí hablar de ello con mi mejor amiga y compañera de crímenes. Nakamura
Confesé a ella todo lo que almacenaba mi latente corazón, todo lo que me transmitía la presencia de aquel chico de tes blanca y cabello azulado
Río me dió muchos ánimos y también me regañó por no contárselo antes, pero una frase dicha casi al final de todos sus golpes fue lo que cambió mi manera de pensar —¡No seas cobarde Karma, nunca sabrás sino lo intentas!
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Amantes del crimen [KARMAGISA]
FanfictionUn caso, un asesinato, un cuerpo y un solo culpable. ¿Qué harías si un día te dan la noticia de que el amor de tu vida asesinó a alguien a sangre fría? Todas las pruebas están en su contra ¿Cómo reaccionarías? ¿En quién confiarías? Y más importante...