La hermana del dobe Sasuke x tu

CAPITULO 48

Narra T/N:

Llevaba días encerrada en mi habitación, la muerte de Deidara y Itachi me había dejado con ganas de hacer nada.

Solamente, estaba acostada en la cama, lamentándome por dichas perdidas... ¿Y por que no?. Lamentarme también por la muerte de Sasori, aunque ya había pasado mucho tiempo de su fallecimiento, no lograba borrar todos esos recuerdos que formamos juntos.

—T/N, ya sal —se escuchó una voz al otro lado de la puerta— Sakura y yo estamos preocupados por ti. No sabemos que te sucede.

T/N: —N-no te preocupes, Naruto, estoy bien —respondí con la voz entrecortada— Solo... Me siento mal.

Naruto: —¿Mal?... Si quieres, Sakura puede curarte, ella es buena ninja medico y... —pese a que no quería hacerlo, lo interrumpí.

T/N: —No ese tipo de mal. Tranquilo, se me pasara —intenté que mi voz sonara normal, no quería preocuparlo más de la cuenta.

Naruto: —... ¿Es por algo que te hizo Sasuke?... —se atrevió a preguntar, estaba claro que él no quería creer que Sasuke me había hecho algo malo (Aunque ya le había explicado que nada malo me pasó)— O... Quizá... ¿Es algo que sucedió mientras que te interrogaban?... Puede ser... ¿Estas mal por el sabio pervertido?

T/N: —¿El sabio pervertido? —me atreví a preguntar. Le había prometido al Naruto del futuro que evitaría la muerte de su sensei, pero... ¿Y si falle también?

Naruto: —Oh, si. Llegó hace poco... Esta en el hospital, fue herido de gravedad —su tono de voz fue bajando mientras hablaba. Seguidamente, volvió a su tono alegre de siempre— La abuela Tsunade y yo sabemos que se repondrá en poco tiempo.

Esa noticia me alegró un poco, una misión en la que no había fallado.

T/N: —Me alegro por eso —le respondí.

Naruto: —¡Oye! ¡No me cambies de tema! —me regañó.

T/N: —Lo siento... —bajé mi tono de voz y miré atentamente el techo— Lo siento...

Naruto: —No me contaras lo que te sucede... ¿Verdad? —habló, recargándose en la puerta.

Mis ojos volvieron a llenarse de lagrimas, moví mi pierna derecha con desesperación. Quería contarle, necesitaba desahogarme con alguien, ¿Qué mejor persona que mi hermano?.

Mordí mi labio con fuerza para evitar que hablara, sabia que por más que me doliera, no podía contarle a nadie.

Naruto: —Esta bien... —se alejó de la puerta— Saldré con los chicos a Ichiraku, si me necesitas, sabes donde estoy —se escuchaba decepcionado, eso solo hacia que me sintiera aun peor. 

Dicho esto, escuche sus pasos alejarse y la puerta de entrada abrirse y cerrarse. 

Naruto: —¡No vendrá! —gritó, seguramente avisándole a Sakura.

. . .

No se cuanto tiempo había pasado... Minutos o quizás horas... La verdad, no me importaba. 

Rodaba en mi cama, tratando de conciliar el sueño, algo casi imposible. 

De la nada, un suave ruido se escuchó (Al estar la habitación en completo silencio alcance a oírlo). Me senté en mi lugar y regulé mi respiración para que se me hiciera más fácil escuchar.

Me asomé un poco debajo de la cama... ¿Acaso la tristeza me estaba haciendo escuchar cosas? 

T/N: —¡Ah! —solté un pequeño grito, al ver lo que había provocado ese ruido.