La hermana del dobe Sasuke x tu

CAPITULO 64

Omnisciente.

—¡Jiraiya! —sonó el grito en medio del campo de batalla. El ninja intentó huir, pues sabía lo que se venía, sin embargo, la joven Uzumaki apareció detrás de él gracias a sus armas especiales.

Jiraiya: —Hola... —saludó alargando la ultima letra.

T/N: —¿Qué hace mi hermano aquí? —preguntó directamente. El chakra del chico era fuerte, evidentemente se enteraría de su presencia en algún momento.

No tuvo a tiempo a contestar, puesto que un incremento en el chakra del rubio acaparó toda la atención.

—Es el modo sabio —murmuraron ambos.

En un abrir y cerrar de ojos, la chica había vuelto a desaparecer. 

Aparecer al lado de su hermano gastaría demasiado chakra, pero no era momento de limitarse ahora. Si Naruto activaba el modo sabio significaba que su pelea era bastante seria.

Llegó justo en el mejor momento, cuando un ataque directo del elemento fuego iba en dirección a su hermano. En un acto desesperado, intentó protegerse usando las cadenas de chakra... Lastima que no había tiempo.

Naruto: —Vaya, un segundo más y te carbonizan —dijo en tono serio. Había ocupado el chakra de su bijuu para proteger a todos los presentes y eso también involucraba a la recién llegada.

La situación empeoró cuando en medio de una explosión apareció un sujeto de cabello azabache, Madara Uchiha. 

Naruto: —¿¡Que hiciste con los Kages!? —exclamó en un grito al verlo.

Una nueva pelea empezaba.

. . .

Pese a que a lo largo de la guerra T/N había logrado mantener el control de su chakra casi al igual que antes, sabía que sin el modo sabio no podría enfrentar al Jubi que se encontraba frente a ella.

Había cosas que los altos mandos no debían enterarse, ni si quiera la gente cercana a ella, pero ahora cuatro bijuus se apoderaban del campo de batalla.

La mirada recriminatoria de los sensei no se apartaba sobre ella, pero no era momento para reprocharla, ahora debían atacar.

Lastima para los ninjas que su plan no tuvo mucho resultado.

Con el equipo cansado, se creía que la derrota estaba cerca, sin embargo Naruto no pararía sin importar nada.

Afortunadamente, los refuerzos llegaron. Miembros de la aldea de Kenosha aparecieron para combatir, siendo liderados por  el Sanin.

Quizá si tenían una oportunidad.

. . .

¿Cómo era posible que un brillante plan acabara así? 

Muerte de gente inocente a la que protegían y la perdida de sus mejores estrategas les había recordado a los miembros de donde estaban parados.

Una guerra.

El rubio parecía afectado, así que su hermana fue la encargada de centrarlo.

T/N: —Naruto  —lo llamó— No es momento para distraerse. Sé que esto no es lo que tu esperabas, pero debemos concentrarnos ahora —trató de relajarlo. Aunque posiblemente necesitaría ayuda.

Para su fortuna, Neji y Hinata fueron a apoyarlo también.

Las manos del Jubi comenzaron a elevarse y de sus palmas comenzaron a salir millones de lanzas de madera gigantes. 

Varios ninjas usaron técnicas para intentar detenerlo. 

Sakura levantaba un muro para frenarlo, Naruto mandaba rasenshuriken con la intensión de detenerlo, T/N trataba de desviarlas usando su elemento aire, pero nada daba resultado. Los ninjas estaban cayendo poco a poco.

El Uzumaki cayó rendido al suelo. El cansancio se apoderó de su cuerpo. Sin embargo, Hinata Hyuga se interpuso con la intención de protegerlo.

Mal momento de ser de la rama principal, pues aun con su admirable acto por defender a su amado, el destino siempre estaba presente.

Neji Hyuga, el miembro más poderoso del clan, perteneciente a la rama secundaria, cumpliría su papel para proteger a su prima.

Claro, su destino se cumpliría, de no ser por la chica de ojos azules.

Neji protegería a su familia, pero T/N también protegería a la suya...