Amor por Accidente • (Cameron Dallas FanFic) ©

4. Primer Día

        Los rayos de sol que se filtraban desde mi ventanilla, golpearon en mi párpados logrando despertarme. La voces gruesas mescladas con algunas más agudas que provenían de abajo, me recordaron, que hoy era lunes, el primer día de clases en mi nueva escuela.

        Al salir de las frazadas de mi cama, la brisa del fresca erizó mi piel. Me encaminé rápidamente a mi ropero y escogí mi ropa: mis vaqueros diarios con una remera de tirantes grisácea. Encima, me calcé un suéter que combinase con la remera y por bajo, mis zapatillas clásicas de lona negra.

        Me maquille livianamente pasando el labial por mis labios y pellizcando mis mejillas para darles coloración. Me impregné del perfume mientras cogía mi bolso aún vacío. Bajé los escalones a toda prisa.

        Toda la familia Grier se encontraba tomando su desayuno en la mesada de la cocina. Pude notar que entre Sky y Nash había un asiento vacío. Deposité mi bolso en el respaldo del asiento y llené este con mi peso.

        —Buenos días—Dije mientras llenaba mi taza de café.

        —Hola Lía—Respondió Sky con su voz dulce—Hueles rico—Añadió con una sonrisa de labios.

        —Gracias, linda. Puedes usar mi perfume cuando gustes—Respondí sonriendo en una mueca.

        Al darle el primer sorbo a mi café, la bocina de un auto me ensordeció. Todos se levantaron de la mesa con brusquedad y yo los imité.

        —Muy bien...—Dijo Meredith cogiendo su abrigo—Llevaré a Sky a la escuela y luego iré por un café antes de ingresar a la oficina—Balbuceó cogiendo a Sky de la mano—Niños, no hagan aguardar a Cameron—Dijo ella antes de cruzar por la puerta.

        Al oír su nombre, sentí con cosquilleó por mi estómago mientras una sonrisa se pintaba en mi rostro.

        Él tío Bob, depositó un beso casto en nuestras melenas y también cruzó por la puerta. Cogí mi bolso al igual que Nash y Hayes y seguí sus pasos hacia el Volvo. Cameron al vernos, comenzó a tocar su bocina aún más fuerte pero esta vez, con una sonrisa deslumbrante en su rostro. Sonreí al verlo, él era más grande que todos sus amigos, pero su personalidad no lo demostraba. Sonríe y bromea todo el tiempo, habla sin descanso, no tiene filtros de demostrar quien es.

        —Nash, deja a Lía en el asiento de adelante—Gritó Cameron por la ventanilla manteniendo su sonrisa.

        —¿Por qué? —Se quejó Nash—Es lunes. La abuela de Brent lleva a los demás—Nash abrió la puerta trasera con enojo y tomó asiento donde yo ayer. La cierra de un portazo.

        —Así es—Respondió Cameron con una sonrisa mientras posaba su mirada en mi mientras abría la puerta de adelante—Tenemos que alcanzar a Kenny en la universidad y creo que Lía se sentirá más cómoda—Al finalizar su oración, el me guiñó un ojo al verme cerrar la puerta. Le enseñé mi lengua por un corto segundo y sonreí al igual que él.

        Su aroma masculino se sentía aún más intenso al estar a solo unos centímetros de él. Respiré hondo unas cuantas veces para guardar su aroma en mi mente durante el día.

        Cuando Hayes subió al vehículo, Cameron lo puso en macha. Pasamos por una casa del estilo moderna al igual que todas de por aquí. Esta era un poco más pequeña que la de Cameron y algo más grande que la "nuestra".

        —Buenos días a todos—Dijo Kenny ya cerrando la puerta desde dentro—Hola Lía—Añadió el en una sonrisa deslumbrante.

        —Hola—Respondí devolviendo la sonrisa.