TEQUILA [RUSMEX]

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- Los países latinos han aceptado darles albergue a todos aquellos a los que pueda afectar la ventisca, sin embargo, aún pueden llegar a tener reacciones, aún no sabemos cuáles así que cualquier padecimiento que lleguen a tener deben comunicarme de inmediato. - Dejó salir un gran suspiro de frustración, no estaba de acuerdo con las opciones de México, y aunque quisiera cambiarlas todos los latinos se negarían, así que intentar que alguno de ellos cambie de opinión solo era una pérdida de tiempo. - Sobre sus mesas podrán notar un folder, ahí está escrito con cuál country deberán alojarse. Lo he decidido yo para evitar conflictos- Pudo notar de inmediato expresiones repulsivas de algunos, también burlas y disgustos. - Partirán en dos días, también cabe mencionar que mientras estén hospedados deberán dar una fianza y sus habitantes que vayan con ustedes a resguardarse debenrán realizar labores

- ¡Esto es una injuria ante nosotros! - El francés fue el primero en dar su opinión, no era de su agrado pasar tiempo con países tercermundistas, claramente esto solo lo haría por su gente.

- Esto fue acordado por toda Latinoamérica, son sus tierras, así que ellos deciden. - Aclaró ONU guardando sus documentos sin levantar la mirada.

-Claro que si no les parece pueden morirse de frío - comentó esta vez Argentina. Su comentario había hecho reír a sus hermanos, mientras que los europeos y asiáticos fruncian el ceño molestos. Pero, a decir verdad no tenían otra opción.

- serán tres largos meses- susurro para si mismo - El pensar que algunos países europeos no estaban de acuerdo, su comportamiento arrogante causaría sin duda un caos.

Tal vez aún podría hacer que el mexicano cambiara de opinión, tal vez ofrecerle algo de dinero, o hacer que tomara unas vacaciones lo convencería. Pero ¿dónde estaba México? Fue ahí cuando su vista se dirigió a toda la habitación, donde ya todos se habían levantado listos para retirarse, pero no estaba ahí, tampoco había indicios de que alguien se hubiera retirado ya que la mayoría aún seguía discutiendo el tema abordado.

México no está aquí.

- ¿Dónde está México?- preguntó serio a la mesa de los latinos intentando lo más posible de no parecer desesperado. Todos levantaron los hombros en señal de negación, tampoco tenían idea de dónde estaba.

Nuevamente volvió a mirar ese asiento vacío, pero alguien aún faltaba, Rusia tampoco se encontraba.

[ • • RUSIA • •]

El dolor de cabeza disminuía al igual que el frío en mi cuerpo, el cual poco a poco se hallaba más relajado; podía percibir un fuerte olor a chocolate y las resonantes voces se incrementaron. Intenté abrir los ojos y mi visión borrosa acompañada de la intensa luz que con lentitud se iba acostumbrando.