❝ 𝙸𝚗𝚌𝚊𝚙𝚊𝚣 ❞ │𝗠𝗮𝗹𝗲 𝗥𝗶𝘃𝗮𝗹𝘀 │

-05-

Había sido un día raro, mi corazón se aceleró varias veces, ¿Pero porque?
No estaba enferma, había tomado pastillas, y estaba relajada, ¿Será por ellos?, No, eso es imposible, apenas y puedo sentir unas cosas, leves, pero , me vieron sonreír, ¿Esto es un avance tal vez?
Solo me queda ver qué me espera mañana.

[♥]

Todo es tu culpa madre.
Tuya, y de todo lo que haz hecho.

[♥]

Jueves

Llegué algo tarde hoy, ya que me demore en el desayuno, eran un par de frutas, ya que las amo, junto con pan con manteca, otra cosa que Adoro.

—¡_______! ¡Te estoy llamando idiota! —exclamo Osano, se veía algo agitado, al parecer corrió hasta alcanzarme—, ¿Ya te encuentras mejor desde ayer?

—Claro, estoy mejor, muchas gracias por preocuparte —le agradecí, con una leve sonrisa, el se había sonrojado.

—¡N-No es que me preocupes! —chillo algo avergonzado—, S-Solo son modales, tonta —luego el golpeo su puño encima de mi cabeza, bastante suave—, D-De cualquier manera, te veo en la azotea a la hora del almuerzo, ¡No tardes idiota!

Sin mas Osano se fue algo apresurado hacia otro chico rubio, el parecía espiarnos, hablo un poco con el, el rubio le dijo algo que no escuche cosa que enojo a Osano, luego los deje de ver.

Tranquilamente fui a mi casillero, tome mi bolso y me cambie mis zapatos, luego camine hacia la sala de costura, tenia algo bueno en mente.

Me había dirigido mal en un pasillo, y sin pensarlo pase por el club de drama, pasando por al lado de Kizano, idiota.
El idiota solo se digno a mirar hacia otro lado, chasqueando la legua, cuando vi dentro de el club, estaba completamente vacío, el idiota estuvo ahí, solo, ¿A esto se lo llama lastima o empatía?

No pensé mas en eso y seguí mi camino, pero un estruendo bastante fuerte se escucho cuando estaba cerca de la enfermería, y no dude en correr hacia allí y abrir la muerta.
Ahí estaba Mujo en el piso, sentado con una caja en su cabeza, supongo que trataba de agarrarla de un estante muy alto.
El se seguía quejando del golpe, con algunas cosas de enfermería esparcidas por el suelo.

—Lo ayudo —dije sin mas, mientras sacaba la caja de su cabeza, tenia unas cuantas curitas en la cabeza, junto con una venda que se le cayo.

—O-Oh señorita Aishi —se sorprendió al verme, al instante sus mejillas se encontraban rosadas.

—Puedes decirme ____ —le sugerí, para luego estirar mi mano para levantarlo, cuando el se encontró bien, note que era bastante alto, casi como el profesor Mido.

—N-No es necesario que me ayudes —comento algo nervioso, mientras veía a su alrededor.

—Yo insisto —sin mas comenzamos a ordenas las cosas en la caja, en puro silencio.

Cuando coloque el ultimo par de vendas en esta, le dije a Mijo que se sentara en la camilla.

—¿Paso algo? —pregunto el confundido viendo como yo me sentaba al lado de el, bastante cerca.

—Tienes algo en el cabello —susurre por algina razón, y comencé a sacarle las cosas de su cabeza.

El se vio confundido al principio, pero al ver que comencé a sacarle las curitas se sonrojo casi al instante, yo no lo miraba a los ojos, me sentía nerviosa creo, mi corazón latía con fuerza, ya que sentía su mirada en todo momento.