🍦 𝔾𝕖𝕝𝕒𝕥𝕠 🍦 (Ercole x Luca)

Capítulo 8

- Oh ahora resulta que te importo padre -.
- Responde mi pregunta Ercole, ¿qué hace el aquí? -.
- El esta aquí haciéndome compañía -.
- No lo quiero aquí, quiero que se vaya -.
- No, no se irá, se quedará aquí porque lo quiero aquí -.

Ercole se acerco acerco Luca, para poner a su lado.

- No te atrevas a contradecirme -.
- ¡Ya no tengo 10 años padre! ¡Ni 18, tengo 23 años! ¡Deja de tratar de estar controlando mi vida! -.
- ¡No voy a dejar que me alces la voz! -.
- ¡Yo no voy a dejar que sigas manipulando mi vida a tú antojo! -.

Luca miraba a ambos realmente asustado, sus manos y cuerpo en general comenzaron a temblar, sus pupilas estaban achicandose más, fue entonces que comenzó su ataque de ansiedad, algo que desarrollo cuando estaba en la ciudad.
Su vista como a tornarse borrosa, y el escuchar los gritos de ambos, eran cada vez más lejanos, pronto sus piernas estaban más débiles.

- ¿Luca? ¡Luca! -. Ercole le llamo al verlo en ese estado, antes de que este cayera de golpe contra el suelo, Ercole logró sostener a Luca en sus brazo.
Se había desmayado.
- ¡Luca! ¡Luca! Despierta cariño, vamos despierta -.
- ¿Cariño?... ¿¡Cómo que cariño!? -.
- ¡No es un buen momento padre! -.

Ercole se levanto con Luca en brazos, para subir a su habitación en la segunda planta.
- ¡Patricia! ¡Trae alcohol, agua y un trapo! -.
- Enseguida Joven Visconti -.

Al entrar, lo recostó en la su cama, retiro sus zapatos y el chaleco tejido que llevaba por encima, dejando su camisa blanca solamente.
- Luca, despierta, va estar todo bien -.
- Aquí tiene las cosas que me pidió joven Visconti -.
- Gracias Patricia -.

Mojó uno de los trapos con alcohol y lo paso por la nariz de Luca, por varios segundos.
Enseguida Luca se levanto de golpe tosiendo.
- Uh.. ¿Estas bien? ¿Te sientes mal? -.
El menor trago un poco de saliva mientras formulaba palabras para poder hablar.
- Estoy mejor Ercole, gracias -.
- Toma, bebe un poco de agua -.

El castaño tomó el vaso y bebió esta, para después darle un sonria un poco triste.
- Lamento haberte causado problemas -.
- ¿Qué? No, no, no, no Luca, mi padre es el que está mal, es suficiente que el controle mi vida, es hora de que yo escoja, y yo te escojo a ti -.
Lo ojitos de Luca estaban completamente llenos de agua, estaba feliz, pero a la vez mal por la situación de su amado.

- Oh Ercole.. solo quiero que seas feliz, quiero hacerte feliz -.
- Ya lo haces -.
Ambos se sonrieron y se acercaron el uno al otro, para poder sus labios en un tierno beso.

Al separarse, se miraron mutuamente con una sonrisa y risa.

- Tú padre... ¿sigue aquí? -.
- Si, debe estar en su recamara muriendo de coraje -.
- ¿El ya sabes que tú y yo...?-.
- Si, bueno eso sospecha o cree, pero esta bien, es mejor que se entere -.

Luca extendió sus brazos, en señal de que quieria un abrazo.
Ercole no dudo nada y se acercó, lo abrazo y comenzó arrullarlo levemente.
- ¿Aun te duelen tus golpes? -.
- Solo un poco, nada grave -.
- ¿Seguro? Incluso me trajiste hasta aquí en brazos -.
- Lo sé -. Soltó una risa. - Pero estoy bien Luca -.
- Bien -.

Ahora hubo un silencio en ambos, aun que no era para nada incómodo, era relajante, suave, era perfecto.
Luca terminó durmiendo en brazos de él, después Ercole.

Pasarían su primera noche juntos, aun que no era como lo habian pensando, era perfecta.

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A la mañana siguiente, el menor despertó, había dormido bastante bien, fue muy cómodo.
Se estiro primero con un gran bostezo, miro a su lado y notó que no estaba el contrario, aun que realmente no era mucha sorpresa.