Carta 4 “Carta para Mia”
Luego de transcurrir unas horas Mandy despierta, se dirige a su habitación dejando las cartas esparcidas entre el mueble y el suelo. Su cabeza daba vueltas, tomo una ducha, se cambió de ropa y se hizo una taza de café, se dirigió a la sala y sentándose en el mueble tomo otra carta y se dispuso a leerla…
“Carta para Mia”
Querida hermana Mia, no sabes lo feliz que estoy de haber vuelto a Paris, sí que paso mucho tiempo, siento una inmensa alegría estar de nuevo reunidas. Lamentablemente traje conmigo muchas penas que he compartido ya contigo, tú sabes que la leucemia que tengo no será fácil de superar, pero recuerdo tus palabras de apoyo y eso me tranquiliza, da esperanza y muchas ganas de superar esta prueba.
Quiero darte las gracias, porque siempre has sido una hermana comprensiva, siempre me cuidaste de pequeña puesto que sabias que yo no era tan fuerte como tú. Siempre he admirado eso de ti, tú espíritu de lucha me hizo aprender a soportar muchas cosas, me diste mucho cariño y seguridad, si volviera a nacer sin duda pediría una hermana como tú.
Recuerdo mucho nuestras travesuras de pequeñas, cuando solíamos escaparnos a jugar cerca del río, y cuando me salvaste muchas veces de no caer en él, recuerdo a mamá muchas veces poniendo su cara de confusión cuando nos hacíamos pasar una por la otra, realmente la volvimos loca.
Recuerdo aquella vez en el colegio que yo enferme y tú diste el examen por mí, nadie pudo notar que me reemplazaste, hasta que entregaron la nota y era la nota más alta y como no descubrirlo si siempre he sido mala en física, pero tú eres más lista y admiro todo lo que has logrado y eso me hace sentir muy orgullosa te quiero mucho Mia.
Sabes sé que no has sido feliz, sé que aquella chica que conociste no supo valorar ni corresponder ese amor que le tenías, definitivamente no era para ti mi querida hermana, sé que conocerás a alguien mucho mejor y sé que te enamoras y que la cuidaras mucho, y esa persona que necesitas a tú lado es alguien que yo conozco muy bien. Por ahora sus caminos están separados ni una de las dos sabe la existencia de la otra, así que tienes que encontrarla.
Si Mia te estoy pidiendo que busques Mandy mi mejor amiga, la de la que siempre te contaba en mis cartas, de la que platicamos muchas veces, sé que tal vez por mi enfermedad no logre volver a verla, además ella ama a su esposo, tal vez nunca se fije ni en ti ni en mí, pero si eso llegara a suceder y yo no esté ya en esta vida, te pido tomes mi lugar… si Mia si llegas a encontrar a Mandy y yo ya no estoy; te pido tomes mi lugar, no le digas que paso conmigo, no quiero que sufra.
Sé que ella debe estar buscándome, la conozco y sé que tendrá mil preguntas por hacerme, pero tengo miedo de no estar aquí para cuando eso suceda.
Te lo pido como última voluntad en caso yo no sobreviva a esta terrible enfermedad, júrame que lo harás y que ella no sufrirá, pues no puedo imaginar verla así, tú sabes lo mucho que la amo y que si no le dije nada de mi enfermedad era para no angustiarla y dejarla que sea feliz.
Querida hermana en este momento tengo que ir al hospital a hacerme unas pruebas, perdona que no te dijera que hoy me haría estas pruebas, es que no quiero que te angusties, ni sufras y perdóname por darte tantos problemas desde pequeña. Bueno espero hoy me den una esperanza y pueda superar todo esto.
En caso pasara algo, dejare esta carta y otras más con nuestra nana. Te quiero y gracias por ser mi hermana, te veo más tarde para cenar.
Mandy no pudo evitar las lágrimas correr por su rostro al darse cuenta que esa sería la última carta que Lia le escribiría a Mia, ya que fue ese día, en que rumbo al hospital Lia sufriría el trágico accidente que le quito la vida.
Por otro lado Mia se encontraba triste y desolada, se sentó al piano y comenzó a tocar y a cantar una canción la cual le hacía expresar, como se sentía en ese momento.
Nos encontramos en el momento en que nos convenía
Creamos exigencias, pero nos perdimos en ellas
Estás a sólo unos kilómetros de distancia,
Y nuestros corazones, nuestros corazones se han quedado en este mar.
Corrí a lo largo del Sena
Con la esperanza de encontrarte, con tu alma tranquila.
Corrí sin saber cómo,
o por qué nos dejamos llevar
Sólo nos conocimos por un momento.
Y no sé si vales la pena,
Es bastante difícil estar segura.
Y cuando estés en Vincennes
En esa noche, no me olvides.
Voy a esperarte lo suficiente para decir
Que yo quería tomar el riesgo más grande
Una noche que me hizo tan triste
Una noche en la Plaza de la Republique
Y como puedes ver, éste es el final
Tengo que cruzar el océano mañana por la mañana
Me deslizo por tus brazos suavemente
Y es la realidad la que me espera
Sé que tu corazón ya está habitado
por una o más chicas que te marcaron
Yo soy menos fuerte que las otras
Pero espero encarecidamente que me extrañes,
Que pueda destacar.
Y no sé si valgas la pena,
Es bastante difícil estar segura
Y cuando estés en Vincennes
Esa noche, no me olvides
Voy a esperarte lo suficiente para decir
Que yo quería tomar el riesgo más grande
Una noche que me hizo tan triste
Una noche en la Plaza de la Republique
Canción: Place de la republique – Coeur de Pirate
Ambas estaban sufriendo la perdida de Lia, solo el tiempo curaría las heridas de ambas y tal vez volverían a ser las mismas... o tal vez no...
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Mientras nadie nos ve
General FictionMandy y Lia son dos amigas que se conocieron en la universidad, tras años de amistad Mandy decide contraer matrimonio con André un hombre emprendedor que la ama, pero todo esto traerá consigo una gran revelación, que cambiara la vida de Mandy, Lia y...