𝑵𝒂𝒓𝒂𝒏𝒋𝒂𝒔 𝒀 𝑺𝒆𝒓𝒑𝒆𝒏𝒕𝒊𝒏𝒂𝒔.

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Advertencia: mucho sexeo.

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Las voces felices de sus compañeros resonaban en toda la playa, eran las 11:15 P.M., tanto él como Kuzuryuu y Nidai iban a empezar a instalar los fuegos artificiales en la orilla, y lejos de las palmeras para prevenir algún incendio, aunque por el miedo de Nagito, decidió dejar aún así un extintor cerca, Hinata no quería que su lindo novio tuviera preocupaciones absurdas durante el fin de año.

Dejó bien acomodada la pirotecnia, una al lado de la otra. Era la segunda vez que hacía algo como armar sus propios fuegos artificiales y el año anterior salieron bastante bien, aunque algunos fueron regalados por Makoto en su última visita en la isla.

— HAJIME-CHAAAN — Ibuki corrió hacia el castaño, agarrando su brazo y sacudiéndolo Mientras daba algunos brinquitos - ¿¡Estás emocionado por año nuevo!? IBUKI ESTA QUE ESTALLA DE EMOCIÓN jaja - en definitiva, si Mioda estuviera en un programa de anime, saldrían brillos y tendría un arcoíris detrás, Hajime hasta juró que le temblaban ligeramente las manos, separándose de él y le daba una gran sonrisa — ¿Puedo morderte? ¡Ah, esto me da inspiración para una canción: "un puercoespín aburrido pasa la noche con una oveja en una isla"!

— ¿Qué tipo de título es ese? — Hinata se demoró un poco en entender el nombre de la canción -aún no estrenada para milagro de todos- y notar a Nagito parado a su lado, acurrucándose en su hombro y tomando su mano para entrelazar sus dedos, Ibuki jadeó dramáticamente.

- Nagito-chan, ¿Ya tienes el regalo? - Mioda bajó el volumen de su voz, pero el talento de músico definitivo hacía algo, así que los susurros eran inútiles.

— Si, ya está listo. Creo que ya es hora de ir a celebrar, queda menos de dos minutos — Mioda asintió con entusiasmó y corrió hasta Tsumiki, abrazándola y casi cayendo ambas a la arena.

Komaeda lo jaló para que fueran con los demás, sonriéndole con ternura y dándole un beso fugaz en la mejilla, en el caminó le pregunto cómo se encontraban él e Izuru, pero Hinata estuvo notando que algo le pasaba a su corderito, porque desviaba la mirada, o jugueteaba con los dedos de sus manos, en ocasiones tartamudeando, pero a su vez, estando bastante cariñoso.

Pasada las doce le preguntaría.

A la distancia vio a Fuyuhiko tomando las manos de Peko y dándole palabras amorosas por el fuerte sonrojo en la espadachina, Hajime estaba feliz por el progreso de esos dos, sin duda. También tomaría una pequeña venganza por los chistes y bromas que tanto el Mafioso como el Mecánico hacían de su relación con Nagito.

"¡Uno, dos... Tres!"

— Feliz año nuevo, Nagito.

Feliz cumpleaños, Hinata-kun.

— ¿Uh? — Komaeda se puso frente a él, metiendo la mano en el bolsillo de su abrigo, sacando de ahí una cajita mediana, y la extendió frente hacia él, invitando a tomarla - Nagi, no tenias qué - una sonrisa empezaba a asomarse por la comisura de sus labios, trató de reprimirla pero fue imposible. Quito la cinta con cuidado para poder abrir la caja, encontrando un cupcake del tamaño de su palma, (imagen en la multimedia, si) lo sacó y le dio una mordida, saboreando el yomogi, hizo un ruido de satisfacción total al recordar su amado Kusamochi. en cuanto termino de degustar, inmediatamente abrazó a su novio, dándole varios besos en el rostro, tuvo cuidado de no aplastar el pequeño postre, Nagito reía por las cosquillas que le generaban los besos en su cuello, correspondiendo el abrazo con fuerza - Muchas gracias, Ko. Joder, te amo tanto.

— No es nada, es lo mínimo que basura como yo podría hacer por alguien tan amable y perfecto como lo es Hinata-kun. De todos modos, tenía otro regalo para ti, uno de tu cumpleaños.

『𝐎𝐧𝐞-𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬』 ❛𝑯𝒊𝒏𝒂𝒌𝒐𝒎𝒂/𝑲𝒂𝒎𝒖𝒌𝒐𝒎𝒂❜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora