Capítulo 1

8.2K 578 12
                                    

Harry Potter se despertó sobresaltado, sus manos fueron directamente a sus orejas, normal, su sueño había parecido tan real; sus orejas iban en punta como las de un elfo. Levantándose de la cama, Harry se acercó al espejo y suspiró aliviado al comprobar sus orejas, normales. Se rió para sí mismo. ¿Por qué se le pondrían las orejas en punta? No era un elfo; era Harry, simplemente Harry. La guerra había terminado; había acabado con la muerte de Albus Dumbledore al final de su sexto año.

Se dio la vuelta y miró el reloj y vio que acababa de llegar a las ocho y treinta minutos, mirando los dígitos junto a la hora vio la fecha. 31 de julio. -Feliz cumpleaños, Harry-, suspiró mientras se daba la vuelta y entraba en el baño para ocuparse de su rutina matutina.

Treinta minutos después estaba sentado en la mesa de la cocina de Grimmauld place comiendo una tostada cuando Kreacher apareció frente a él.

-El periódico de esta mañana, Maestro Harry-, dijo antes de desaparecer de nuevo.

Harry cogió el periódico y al desplegarlo vio a Severs Snape cubriendo la primera página, estaba tumbado en una cama de hospital, no se le veía el cuello por las vendas, su cara parecía mortalmente pálida. Encima de la foto el titular decía.

¡Severus Snape sobrevive!
P

or Rita Skeeter

El maestro de pociones y ex mortífago Severus Snape ya está fuera de peligro. Severus Snape (en la foto de arriba) había sufrido la mordedura de la serpiente que se abalanzó sobre Harry Potter para matar al niño que vivió pero Severus Snape se había lanzado a proteger a Harry y recibió la mordedura en su lugar. Poppy Pomfrey de Hogwarts nos ha dicho que al llegar Severus al ala del hospital, había encontrado instrucciones en las cuerdas del hombre que ha seguido y se cree que es sólo gracias a esas notas que ahora vive y se va a recuperar completamente. Este reportero puede confirmar que Harry Potter aún no ha visitado a Severus Snape. Personalmente, habría pensado que ya lo habría hecho, después de todo le salvó la vida. Hoy Harry Potter cumple diecisiete años, tal vez piense que tiene cosas más importantes que hacer en este día que agradecer al hombre que arriesgó su vida para salvarlo.

-¡Estúpida mujer!-, murmuró Harry mientras miraba la foto de Severus tumbado en la cama del hospital, y pasó el dedo por encima de la imagen. -Necesitará un lugar seguro para recuperarse. Voy a preparar todo para él- susurró Harry antes de levantarse y dirigirse a la habitación en la que Severus se quedaba cuando tenía que dormir durante las reuniones de orden.

-Mujer insolente- Severus resopló cerrando el papel y dejándolo sobre la mesita de noche. Sólo ella podía tomar algo y convertirlo en un desastre insondable, pensó indignado, cruzando los brazos sobre el pecho y apoyándose en la almohada a su espalda.

Poppy entró en la habitación y procedió a juguetear con sus vendas agitando su varita aquí y allá alrededor de su cuello. La matrona, que era fenomenalmente experta en hacer varias cosas a la vez, le entregó a Severus frascos de pociones sin decir nada ni dar explicaciones.

No esperaba menos, ya que había dicho claramente lo que había que hacer en caso de que ocurriera algo así. Tragándose el contenido sin discusión, colocó los viales vacíos sobre el mueble y cerró los ojos.

-Están saliendo muy bien-, comentó Poppy desterrando las viejas vendas y recogiendo los frascos vacíos. ¿Cómo te sientes?.

-Incómodo- Severus refunfuñó cambiando ligeramente las pociones

-Me imagino que sí, pero lo importante es que estás vivo- Poppy le lanzó una mirada cómplice y salió rápidamente de la habitación.

Severus exhaló un suspiro, se acercó con cuidado y tomó un ejemplar del Diario el Profeta, y lo abrió sobre su regazo. La figura de la foto lo miraba fijamente, con el rostro como una máscara de frustración y alivio. El titular de arriba gritaba que el mundo estaba a salvo una vez más; no había nada que temer. Algo ardía en lo más profundo de Severus y no tenía nada que ver con el mar de Pociones que Poppy acababa de darle.

OUR HEARTS BEAT AS ONE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora