Un pequeño bufido liberó por un momento un aura tan sofocante con intención asesina, cada poro del cuerpo del pelinegro sintió un dolor indescriptible. Solo durante ese momento, hubiera deseado estar muerto antes de volver a enfrentar tal sufrimiento. Su mente nublada por el dolor aún no recuperaba todos sus sentidos, aún cuando ya había cesado esa intención asesina, cayó de espaldas inevitablemente.
Mas no tocó el suelo, su cuerpo estático a pocos centímetros del piso, una fuerte mano sostenía su muñeca, evitando el impacto.
Finalmente pudo recobrar la compostura, aún así seguía confundido sobre lo que acababa de pasar.
Ese chico, Killua, era realmente peligroso.
¿Ese era Narukami?
Siempre se preguntó, por qué un yokai llevaría el nombre de un dios.
Pero lo que encontraba aún más desconcertante, era su actitud, parecía esforzarse en mantener un aura agradable. Aún cuando claramente su amabilidad era sarcasmo.
El albino soltó su muñeca y preguntó:
—¿Estás bien?
—¿Qué eres?— esta vez no se posicionó para una pelea, en cambio se preparó para correr tantos kilómetros como esa isla le permitiera con tal de alejarse de ese monstruo. Pero su voz no no flaqueó incluso cuando parecía querer mojar sus pantalones y llamar a su tía.
Una nueva sonrisa, sombría y macabra erizó la piel canela y con sus gélidos orbes carentes de brillo se acercó un paso.
Gon tragó un gran bocado de saliva.
Otro paso.
Y ahora estaba incómodamente cerca.
Se acercó a su oído y con un débil susurro estremeció al asustado pelinegro, su voz le causó pavor.
—¿No me recuerdas?
En realidad, esa voz no sonaba igual a la del jóven frente a él, ésta en cambio parecía profunda y resentida, la voz de un hombre que rondaba al rededor de los 30 años. Ni un poco de humanidad en ella.
Ese era Narukami.
Un sonido molesto en su cabeza, un alarido de furia que retumbó en su cabeza, hirviendo su sangre de una furia que no era suya.
—Cuanto tiempo, Janken— su vista abrió el poder del hilo de la vida, y nuevamente encontró esa sangrienta conexión atada al albino, quien parecía haber entrado en un estado de trance.
Era tan doloroso, su mano siendo cortada por el fino hilo, su sangre mezclada con esta conexión dolía. El brillante rayo de un ser iluminado es lo único que pudo ver antes de caer en la inconsciencia.
El breve recuerdo de un alma pasada que perdió a su alma gemela bajo la mano de un dios arrogante.
Fragmentos destrozados como pequeños cristales empezaban a encajar en su mente, un pasado que no le correspondía llegaba a formar parte de su corazón.
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Hilo Del Destino ⛩️
FanfictionGon Freecss es acusado de realizar un trato con un yokai a cambio de poder, a causa de esto será llevado al exilio, en donde encontrará a la persona a quien ha sido atado por el destino, solo que, este destino podría no significar exactamente amor...